7 logros económicos que presumió AMLO, pero no tienen (casi) nada que ver con su gobierno
En una administración que tiende hacia el nacionalismo y el fortalecimiento de la economía local como motor del desarrollo, es paradójico que los logros mostrados dependen casi por completo del contexto global.
Durante su Tercer Informe de Gobierno (oficial), el presidente Andrés Manuel López Obrador destacó que en su administración se puede presumir y “gritar a los cuatro vientos” siete récords o logros en materia económica.
Efectivamente, algunas cifras relacionadas con la economía y las finanzas del país alcanzan saldos históricos. Es un hecho que la economía de México se recupera gracias al “rebote” económico en todo el mundo tras el colapso del PIB global durante el año pasado por la pandemia, y es gracias a ese rebote, más la posición de México como el mercado emergente más cercano a Esttados Unodos, la mayor potencia del planeta, que se ve favorecido.
Pero, es justo por este contexto global, por el que el país registra un desempeño favorable e incluso histórico en algunos indicadores. Definitivamente poco, muy poco, tiene que ver el desempeño económico interno.
En una administración que tiende hacia el nacionalismo y el fortalecimiento de la economía local como motor del desarrollo, es paradójico que los logros que tiene estén casi por completo ligados al contexto global.
Aquí las cifras y los factores que impulsan a la economía mexicana.
1. Tipo de cambio: El peso, más ligado que nunca al dólar y a las tasas en EU
El peso está más ligado que nunca al dólar, y de manera especial a las tasas de interés de ese país. Es cierto que le favorece el hecho de que México tenga relativa estabilidad económica, pero es mucho más determinante el primer factor. Los flujos de capital mandan sobre el peso, mientras esos flujos reciban en Estados Unidos y en todo el mundo un rendimiento de cero por ciento, siempre buscarán la tasa “estratosférica” superior en 400 puntos base que paga nuestro país. Lo anterior por no hablar del apoyo de la Fed al peso, que fue de gran ayuda en los momentos de mayor presión para nuestra moneda durante el año pasado.
2. En EU sus ciudadanos no quieren trabajar… todavía, y eso impulsa las remesas hacia México
En Estados Unidos sucede un fenómeno histórico, algo que será recordado como “cuando el gobierno nos mantuvo“, según lo han calificado algunos medios.
Sucede que, en el país más rico del mundo, en el momento de la pandemia y del Gran Confinamiento del año pasado, el gobierno ejerció un gasto sin precedentes de hasta 3 billones de dólares para evitar el colapso de su economía. Mucho de ese dinero se entregó directo a los ciudadanos del país. De hecho, en algo jamás visto el gobierno entregó ayuda directa a todos los hogares de la nación independientemente de su situación económica.
Pero, los apoyos no se han retirado en una buena proporción, muchos ciudadanos reciben más de lo que podrían ganar en un empleo; por lo tanto, no salen a buscar trabajo. Se calcula que al menos 8 millones de estadounidenses siguen en sus casas y sobreviven con la ayuda del gobierno. Mientras eso sucede, alguien tiene que trabajar; ese “alguien” es la mano de obra indocumentada, mexicanos en un amplio porcentaje, que se han visto beneficiados no sólo por el exceso de trabajo, sino porque los salarios se han incrementado, precisamente para mantener cautiva dicha mano de obra.
Se espera que la situación empiece a cambiar hacia el invierno siguiente. Entonces los mexicanos empezarán a competir por los trabajos con los ciudadanos de ese país, y es probable que tengan que ceder muchos puestos de trabajo. Las remesas seguirán en niveles altos por un tiempo, pero en Estados Unidos auguran que no será un fenómeno eterno, sobre todo por el relevo generacional que está en puerta en ese país, cuando millones más de estadounidenses saldrán a buscar empleo.
3. La BMV en el cielo, gracias a Wall Street
Como sabemos, las bolsas de valores en México son un reflejo de lo que pasa en Estados Unidos, muchas veces incluso un espejo magnificado. El cierre histórico de ayer en el Índice de Precios y Cotizaciones de la BMV sólo es consecuencia de los niveles históricos en las bolsas de Nueva York, nada tiene que ver un mercado bursátil que por cierto es el más “pequeño” de los países miembros de la OCDE, junto con la bolsa de Colombia.
4. Inversión extranjera que depende de la reinversión
La captación de Inversión Extranjera Directa (IED) durante el primer trimestre de 2021 ascendió a 11 mil 864 millones de dólares, lo que significó su mayor nivel para un periodo similar desde 1999. De entrada, no es un récord histórico, sino un buen dato, el mejor desde 2019. Sin embargo, la cifra pierde fuerza cuando se observa que, de acuerdo con los análisis posteriores, resultó que del monto señalado el 60 por ciento correspondió a reinversiones ya comprometidas en años anteriores por parte de varias empresas. Es lógico, la IED no es inversión de corto plazo, por lo que cuando llega requiere de inversiones posteriores para conservar “los fierros” invertidos, y el mercado.
5. Salario mínimo; sin duda un gran logro, pero…
Sin duda lo que se debe reconocer como un gran logro en este gobierno es el aumento al salario mínimo de los trabajadores del país, aunque este indicador a veces no dice mucho sobre la verdadera situación de los salarios promedio en México.
Lo que habría que ver es qué tanto se “pegó” este salario mínimo al salario promedio pues, según se ha señalado desde hace muchos años, en realidad un amplio porcentaje de los trabajadores no ganan el salario mínimo; es sólo una referencia, de modo que, si no subieron los salarios promedio, en realidad existe un deterioro para estos últimos. Como sea, es un gran logro haber aumentado el salario mínimo en México, aunque falta mucho.
6. La deuda no crece, y tampoco baja, aunque sí aumentó
El subtítulo parece contradictorio, pero es justo lo que sucede con la deuda del país. En efecto, México ha adquirido poca deuda en el exterior durante este sexenio, si acaso para lo indispensable. Es decir, en términos estrictos se supone que no adquiere deuda para gasto corriente, como en otras épocas. Sin embargo, la deuda de México tampoco ha bajado, el país cumple con sus compromisos, y no puede darse el lujo de pagar demás, salvo ahora que se quiere hacer con los recursos aportados por el Fondo Monetario Internacional al Banco de México. En la relación Deuda/PIB, es un hecho que la deuda del país sí creció debido al desplome de la economía durante el año pasado.
7. Reservas históricas, gracias a los DEG del FMI
Antes del viernes pasado, la presente administración era la segunda en la que más reservas se acumulaban en el banco central durante el presente siglo. Pero, el FMI decidió activar una “ola global de liquidez” por medio de la asignación de Derechos Especiales de Giro (DEG) de acuerdo con nivel de las cuotas de cada país, a México le correspondieron poco más de 12 mil millones de dólares.
Así, las reservas alcanzaron el viernes pasado una cifra histórica de 205 mil millones de dólares, algo que no se entendería sin esta “ola global de liquidez”, nuevamente, un factor externo, sin olvidar que la acumulación de reservas de Banxico ha sido un proceso de muy largo plazo.
Es cierto, México tiene signos de recuperación, pero lejos está todavía de ser un país sin problemas, lo malo es que justamente las cifras económico-financieras positivas podrían funcionar como un espejismo sobre la verdadera situación de la economía, que no es la peor del planeta, pero le falta mucho para estar entre las mejores, y más lejos todavía de ser un ejemplo mundial.
CORTESÍA EFE
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