Casa Madero cierra puertas a turismo, pero operaciones en bodega siguen
La empresa denunció que por la tarde del pasado 24 de mayo, un grupo armado invadió parte de la hacienda de Casa Madero ubicada en Parras de la Fuente, Coahuila.
Después de que un grupo de ejidatarios armados con machetes tomara por la fuerza las instalaciones de riego de Casa Madero la semana pasada, la vinícola mexicana cerró las puertas para visitas turísticas, aunque continúa con sus operaciones.
El equipo de comunicación de Casa Madero confirmó a ALTO NIVEL que las instalaciones de riego siguen tomadas y sus puertas están cerradas a visitas, pero siguen cuidando el viñedo y trabajando en la bodega donde embotellan sus vinos.
La empresa denunció que por la tarde del pasado 24 de mayo, un grupo armado invadió parte de la hacienda de Casa Madero ubicada en Parras de la Fuente, Coahuila. Las personas pudieron ingresar con lujo de violencia hasta los viñedos del inmueble.
La casa vinícola relató que pidieron la ayuda de autoridades municipales y estatales ante la invasión ilegal de sus instalaciones, pero no obtuvieron respuesta.
De acuerdo con reportes de medios locales, un grupo de ejidatarios que integra el Movimiento de la Defensa del Agua en Parras acusa a Casa Madero de usar más agua de la acordada para sus viñedos y llega menos líquido vital para los campesinos.
Recientemente, Casa Madero se unió a la Asociación de Tajos de Aguas de Parras, que integran ejidatarios y empresarios de la región, para encontrar soluciones a la escasez general de agua de uso agrícola y que todos los usuarios legítimos tuvieran acceso a su dotación correspondiente de acuerdo con los volúmenes disponibles.
“Estas acciones incluyen la reforestación de la sierra, la modernización de la infraestructura hídrica y la creación de parques lineales que aumentarían el atractivo turístico de Parras, acuerdo que es apoyado por ejidatarios, ambientalistas, ciudadanos y empresarios, siendo estos últimos quienes donarían los recursos para concretarlo”, indicó Casa Madero en un comunicado.
Casa Madero, la vinícola más antigua de América con 425 años de existencia, anunció a finales de abril un plan de inversión de 1,500 millones de pesos en un plazo de cinco años. Brandon Milmo, codirector de la compañía, aclaró que esta inversión no es para aumentar su producción de 200 mil cajas al año, sino para mejorar sus procesos y estilos de vinos.
Cuenta con 400 hectáreas cultivadas, de las cuales 70 son orgánicas y la inversión se enfoca en su proyecto de sustentabilidad de 4 ejes.
- Reducir la huella de carbono.
- Agricultura regenerativa y orgánica
- Conservación del agua y acciones de reforestación
- Manejo eficiente de residuos.
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