Este es el plan B de AMLO y Morena si no pasa la reforma electoral
El partido del presidente intentará cambiar la legislación secundaria, sobre todo aquella que se refiere al INE, a pesar de que podría violar la Constitución.
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, y su partido en la Cámara de Diputados ya se preparan para el previsible rechazo de su iniciativa de reforma electoral, pues como Morena no cuenta con los votos para modificar la Constitución, en el mes de diciembre se prevé cambiar solo la legislación secundaria, a pesar de que esto podría violar la carta magna.
La apuesta de Morena es hacer algo similar a lo que ya se realizó con la militarización de la Guardia Nacional, que trasgrede el artículo 21 constitucional, o lo que ocurrió con la reforma a la industria eléctrica: El partido oficial y el presidente confían en que sus actos -que rayan en lo ilícito- sean convalidados por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
“Hay que recordar lo que ya ocurrió con la reforma eléctrica, la Suprema Corte consideró que era válida en su mayor parte, por lo que podremos lograr lo mismo con el voto electrónico, la estructura y volumen del Consejo electoral del INE, y con el esquema de los diputados plurinominales”, adelantó el diputado de Morena Hamlet García Almaguer.
En entrevista con ALTO NIVEL, el legislador considera que no se requieren cambios a la Constitución para modificar una parte importante del sistema electoral del país, incluyendo disminuir los recursos públicos que reciben los partidos políticos, y modificar el funcionamiento de los Organismos Públicos Locales Electorales (OPLEs).
Es el plan B del partido en el poder ante lo que sus integrantes, y el mismo López Obrador ya dan por descontado, pues la reforma electoral del mandatario no cuenta con el respaldo de la oposición en el Congreso, luego de que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) anunció esta semana que no avalará la propuesta presidencial.
Como se recordará, esa iniciativa de reforma electoral, que plantea cambiar 18 artículos de la Constitución, propone desaparecer al Instituto Nacional Electoral (INE) para sustituirlo por un Instituto Nacional de Elecciones y Consultas (INEC), cuyos consejeros serían electos por los ciudadanos a partir de candidatos propuestos por el presidente, las dos Cámaras del Congreso y la Suprema Corte.
También se formula que la Cámara de Diputados ya no tenga 500 integrantes, sino solo 300, que serían elegidos mediante listas estatales que propondrían los partidos, en tanto que el Senado pasaría de 128 a 96 legisladores que también dejarían de votarse directamente por los ciudadanos, para ser electos a través de listas en cada entidad federativa.
Plurinominales por estados
En ese tenor, dado que el artículo 52 de la Constitución establece que la Cámara de Diputados se integra por 500 legisladores, Morena sabe que no puede reducir ese número mediante un cambio en la legislación secundaria, por lo que -en una sui generis– interpretación se proyecta que 200 legisladores, hoy plurinominales, sean elegidos mediante listas estatales.
“Con esto se eliminaría la sobrerrepresentación de Morena en la Cámara de Diputados de la que siempre se queja la oposición, además de que esos 200 diputados, al ser electos de otra forma, podrían incluir acciones afirmativas” en beneficio de mujeres o representantes de pueblos originarios, detalló García Almaguer.
De lo que se trata es de “ajustar el método con el que se eligen los 200 diputados plurinominales”, sin desaparecerlos, acotó el legislador.
La propuesta alternativa de Morena en este tema específico es eliminar las actuales cinco Circunscripciones electorales plurinominales, de donde salen los 200 legisladores que no hacen campaña, para sustituirlas por listas partidistas que serían votadas en las 32 entidades federativas.
El problema es que el artículo 53 de la carta magna es claro al respecto: “Para la elección de los 200 diputados y diputadas según el principio de representación proporcional y el Sistema de Listas Regionales, se constituirán cinco circunscripciones electorales plurinominales en el país conformadas de acuerdo con el principio de paridad”.
Ergo, cambiar la forma en la que se eligen los 200 diputados plurinominales, para que estos representen a los estados del país, necesariamente implica trasgredir la Constitución.
INE vs INEC
Lo mismo sucede en cuanto al nombre y estructura de la autoridad electoral, que el diputado morenista Hamlet García asegura puede cambiarse en la legislación secundaria sin necesidad de reformar artículos constitucionales.
El apartado A de la fracción V del artículo 41 de la Constitución establece que “el Instituto Nacional Electoral es un organismo público autónomo dotado de personalidad jurídica y patrimonio propios”, cuyo Consejo general “se integrará por un consejero Presidente y diez consejeros electorales”.
Es obvio que aquí tampoco hay margen para la interpretación, pues diez consejeros más un presidente son once integrantes del Consejo general del INE, además de que el nombre de este organismo constitucionalmente autónomo también no deja dudas desde la carta magna.
Por ende, intentar reformar la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales para reducir el número de consejeros del Instituto Nacional Electoral, y alterar su nombre para que se denomine Instituto Nacional de Elecciones y Consultas igualmente es contrario a la Constitución.
Opinión ciudadana
En la Cámara de Diputados, la postura de Morena no es otra más que la del presidente Andrés Manuel López Obrador, pues -a decir del diputado Hamlet García- la reforma constitucional en materia electoral que presentarán al pleno de esa soberanía será la del mandatario, a pesar de que inicialmente se había dicho que el partido oficial intentaría elaborar “un dictamen colegiado” que reuniera todas las iniciativas que se han presentado en este tema.
“Si en el pleno no se aprueba la reforma, cada quien tendrá que asumir su responsabilidad, la oposición tendrá que explicar por qué no quieren una democracia más austera”, refiere García Almaguer.
Preguntado sobre la posibilidad de que Morena tome en cuenta que los ciudadanos en 2021 votaron para conformar una Cámara de Diputados en la que el partido oficial no pudiera reformar la Constitución sin contar con las oposiciones, el legislador dijo que, en este caso, los ciudadanos sí quieren una reforma electoral, y justo coinciden con lo que propone el presidente.
Prueba de ello, agregó, hay tres encuestas realizadas por distintos organismos demoscópicos en los que la mayoría de los ciudadanos coinciden con la reforma electoral de López Obrador, entre estos ejercicios se destaca un sondeo que mandó elaborar el Instituto Nacional Electoral, y otro publicado la semana pasada por el diario español El País.
“Hay un apoyo mayoritario a la reforma del presidente, si (esta) no pasa, buscaremos cambiar la ley, y para eso sí nos alcanza”, confió el legislador.
Surya Palacios Periodista y abogada, especialista en análisis jurídico y de derechos humanos. Ha sido reportera, conductora de radio y editora.