Buscador
Ver revista digital
Opinión

Los dos posibles futuros de la creación de contenidos

02-03-2023, 8:57:37 AM Por:

Actualmente, un promedio de que 62.5% de la población mundial, es usuario de internet. En México, 96.87 millones de personas (74%), son parte del mundo digital.

En 1996, Bill Gates, fundador de Microsoft, citó en uno de esos artículos aquella frase que ahora es un mantra: “El contenido es el rey.”

Hoy, ese rey ha conquistado las redes sociales y logrando una mayor penetración de mensaje. Supongo que Bill Gates no presagiaba que, 25 años después, cualquiera con un canal o una cuenta en redes sociales, se pondría la corona. ¿Y cómo no?, si tener una cuenta es fácil y gratis y hacerse famoso está al alcance de casi cualquiera.

Todas las empresas apuestan su marketing por redes sociales. Algunas, con mayor presupuesto, abarcan otros espacios tradicionales de publicidad, pero los esfuerzos más importantes los dirigen a campañas digitales. Y si la viralización es el éxito de una campaña, la clave está en la cantidad de contenidos publicados. Y entonces, el internet se llena de contenidos y anuncios para acceder al juego del algoritmo para los 4,950 millones de usuarios que hay en el mundo, según un estudio de Hootsuite. Actualmente, se estima un promedio de que un 62.5% de la población mundial es usuaria de internet. En México, 96.87 millones de personas (74%), son parte del mundo digital.

En las últimas semanas que se han tratado temas tan polémicos, enfrentamientos entre creadores, influencers, figuras públicas, usuarios, políticos o artistas, he reflexionado hacia dónde vamos con todo esto. Entre el metaverso, humanos digitales, inteligencia artificial o las miles de campañas que surgen todos los días. La permanencia de adoptar una vida digital parece inminente y quizá no nos damos cuenta del impacto para las próximas generaciones.

César Fajardo, creador digital y fundador de Hunters México, visualiza dos escenarios (uno optimista y otro pesimista). Como base, parte de la idea de que, en menos de dos años, el internet se llenará de contenidos basura generados por la inteligencia artificial automática en busca de alimentar los algoritmos.  

  1. Optimista:  los humanos nos hartamos del internet y regresaremos al mundo real en busca de mensajes, expresiones y talentos reales. Habrá un boom en artes escénicas como teatro, festivales y música en vivo como una expresión natural de talento.

El internet se quedará para las máquinas. Los creadores serán parte de la inteligencia artificial y los consumidores serán bots. Las plataformas digitales empezarán a llenarse de anuncios artificiales al ver que pierden audiencia y los humanos utilizaremos internet únicamente para consultar información y comunicarnos como en 2009.

Con la inteligencia artificial habrá cada vez más bots y deep fakes (videos manipulados para hacer creer a los usuarios que ven a una determinada persona). Los humanos dejaremos de confiar en todo y volveremos a darle valor a lo que es real y tangible. El contenido regresará en formato de humanos y sí, los influencers dejan de ser tan relevantes.

Pero en México, como las empresas generalmente van un paso atrás, seguirán gastando miles de pesos en agencias que dan resultados inflados de clics, views o alcance. Serán los emprendedores quienes se darán cuenta de que, al no generar ventas o notar un retorno de inversión, buscarán otros formatos para impactar en su audiencia y se apoyarán de otros recursos (eventos, recomendaciones de boca en boca, o plazas promocionales).

  • Pesimista: si cada vez más nos enfocamos a formatos digitales, el mundo real continuará con su rumbo (desastres naturales, guerras, pobreza) y el internet seguirá siendo ese refugio en donde nada de eso existe. Los videojuegos serán la gran entrada al metaverso que ofrecerá realidades ‘personalizadas’ y las empresas pagarán miles de dólares por situarse en aldeas digitales. Hoy en día, hay cerca de 70 millones de mexicanos que juegan videojuegos, de acuerdo con The Competitive Inteligence Unit.

Las competencias sociales no serán necesarias y cada vez habrá menos empresas que gasten su dinero en personal que desarrollen proyectos que la IA fácilmente pueda realizar. Empresas como ChatGPT podrán vender licencias para trabajar en un instante, lo que una, dos o más personas hagan en más tiempo. Los influencers tendrán mucho menos tiempo de vida real que digital y tendrán que utilizar cualquier recurso a su alcance para penetrar en el mercado.

Las nuevas generaciones serán menos numerosas porque crear una familia requiere de competencias sociales y tolerancia y, en una realidad personalizada, ¿para qué se necesita ser tolerante? Los productos se venderán como parte de una experiencia y no para cumplir una necesidad. Los medios tradicionales se irán extinguiendo, empezando por la imprenta y, con ello, el fin de miles de empleos.

Habrá tanta información y tantos datos, que nos perderemos unos a otros y bastará un tweet de 280 caracteres para protestar y ser parte del sistema de cancelación.

Por supuesto que estos escenarios son dicotómicos y una propuesta exagerada en donde no existe un punto medio. Y estamos en un momento para reconsiderar cuánto tiempo permanecemos en la vida digital y cuánto tiempo en la vida real. Hay que tomar en cuenta que el cambio generacional se dedica más mundo real, ya que el internet está lleno de contenido basura y es en dónde están sus papás millennials.

A menos que la inteligencia artificial pueda crear esos formatos humanos y surja un nuevo concepto: realidad digital. Entonces sí, el rey seguirá siendo el rey.

Nota del editor: Este texto pertenece a nuestra sección de Opinión y refleja únicamente la visión del autor, no necesariamente el punto de vista de Alto Nivel.

MÁS NOTICIAS:

autor Comunicólogo por el ITESM y Maestro en Recursos Humanos por la ULA. Storyteller de historias que inspiren, capital humano, desarrollo organizacional y liderazgo. Publirelacionista, maratonista y especialista en generador de contenidos.
Comentarios