Cómo el cambio climático está impactando al consumidor mexicano
Ocho de cada diez consumidores mexicanos consideran que las empresas tienen el deber de impulsar resultados social y medioambientalmente positivos.
Por Francisco Olivares*
Actualmente nos encontramos en un cambio de paradigma social en donde las personas buscan ser más conscientes de sus decisiones al momento de comprar. Cuestiones como el impacto ambiental, la procedencia del producto, su forma de fabricación y la calidad, han comenzado a imponerse frente a tendencias pasadas como la marca y los productos de un solo uso. Comprender las formas en que piensan y actúan los consumidores es clave para que las empresas puedan desbloquear un panorama más amplio y certero al momento de ofrecer productos y experiencias que sean afines a las nuevas preferencias.
En nuestro más reciente estudio Future Consumer Index 2023, identificamos cómo el cambio climático se está convirtiendo en un factor de influencia creciente que está alterando hábitos de consumo arraigados. Por ello, las empresas necesitan saber cómo responder a esta demanda, creando nuevos productos o reformulando los existentes para hacerlos más sostenibles, saludables, asequibles, y con impacto positivo en la sociedad; de modo que puedan proteger su rentabilidad y la experiencia de marca. Aquí, la confianza desempeña un papel fundamental.
¿Qué es lo que mueve ahora al consumidor mexicano?
El impacto del cambio climático en nuestra sociedad es innegable, y dentro de las principales preocupaciones para los mexicanos destacan la insuficiencia de agua, las modificaciones en los precios de los productos y los eventos climáticos extremos. Estos no son solo problemas abstractos, sino desafíos tangibles y el 79% de los consumidores mexicanos está profundamente preocupado por la fragilidad del planeta y más de la mitad (53%) espera que el cambio climático empeore en los siguientes seis meses.
En el estudio, podemos observar que esto los ha llevado a encontrar soluciones como la adquisición de productos diseñados para mitigar los efectos del calentamiento global, así como cambios en la elección de alimentos. De hecho, en México se puede observar una marcada tendencia por reparar las cosas en lugar de comprar nuevas (68%), están dispuestos a reciclar y rellenar un producto si hubiera la opción (45%) y hacen un esfuerzo por reducir el desperdicio de comida (92%).
Sin duda alguna, los consumidores buscan activamente formas de superar las adversidades que enfrentan como consecuencia del cambio climático. Por su parte, las empresas tienen la responsabilidad de comprender estos comportamientos con la finalidad de desarrollar estrategias que se alineen con las necesidades actuales del consumidor, y que contribuyan con soluciones a largo plazo para los problemas ambientales, sociales y económicos.
¿Qué pueden hacer las empresas para adaptarse?
El actual panorama del consumidor refleja una transformación profunda, donde los factores que más influyen en las decisiones de compra son: la consciencia ambiental, la confianza en la marca, la asequibilidad, las ofertas saludables, y que contribuyan a la sociedad inmediata. De hecho, el 49% está dispuesto a pagar más por productos que promuevan la salud y el bienestar, y el 32% por productos que sean sostenibles y responsables con el medioambiente. Resulta imprescindible que las empresas comprendan y aborden estas tendencias cambiantes, y se adapten a la nueva realidad del consumidor para construir relaciones sólidas y sostenibles en un mundo en constante evolución.
La falta de acceso a información clara y estandarización genera confusión y desconfianza en los consumidores, lo que dificulta sus intenciones por comprar de forma más sostenible. En este sentido, 69% de los encuestados en México dice que necesita de mejor información para tomar decisiones sustentables; y el 62% no confía en las declaraciones de sostenibilidad hechas por las empresas y marcas. Esto recalca la importancia de trabajar en estrategias de transparencia y rendición de cuentas que contribuyan a la percepción positiva de las organizaciones.
Por otro lado, a medida que los consumidores buscan responsabilizar a las empresas de sus actividades, el 80% de los consumidores mexicanos considera que las empresas tienen el deber de impulsar resultados social y medioambientalmente positivos, y similarmente, el 79% cree que las empresas deben asegurarse de que sus proveedores cumplen con estándares sostenibles. Es así que, la promoción de la transparencia, confianza y calidad se vuelven cuestiones esenciales para que las empresas puedan navegar dentro de este cambio en el que los consumidores piden soluciones sustentables y conscientes con el medio ambiente.
Francisco Olivares es socio líder adjunto de Consumo, EY Latinoamérica.
Nota del editor: Este texto pertenece a nuestra sección de Opinión y refleja únicamente la visión del autor, no necesariamente el punto de vista de Alto Nivel.
MÁS NOTICIAS:
- Grupo Peak: La estafa que desapareció 800 mdp en Nuevo León
- Esta es la historia de McDonald’s y de su dueño actual
- 5 pasos financieros para prepararte para el retiro
- Peso se aprecia 0.82%, a la espera de decisión de la Fed
- Bob Bakish renuncia como CEO de Paramount tras 27 años en el estudio
EY Líder global en servicios de aseguramiento, asesoría, impuestos y transacciones. Las perspectivas y los servicios de calidad que entregamos ayudan a generar confianza y seguridad en los mercados de capital y en las economías de todo el mundo.