Cómo elegir un reloj de pulso que se ajuste a ti y a tu personalidad

Por Rene Gonzalo Hernández López

Un reloj de pulso es un artículo que valdrá siempre por su valor intrínseco y sentimental. En estas fechas puedes consentirte con uno que premie tu avance profesional o académico. Las facilidades crediticias te dan la oportunidad para adquirir uno de estos objetos duraderos, de calidad y belleza indiscutible.

Puedes pensar que la modernidad hace prescindible un reloj de pulso, ya que puedes consultar la hora en tu celular o en la pantalla de la computadora. Incluso puedes argumentar que la inversión en una pieza que puede alcanzar precios considerables es inútil, porque existe el “smartwatch” que conjuga tecnología, practicidad y moda.

Sin importar el ir y venir de tendencias estéticas o tecnológicas, un buen reloj de pulso se mantiene como una posesión imperecedera que habla de nuestra personalidad, gustos y que, incluso, puede pasar de generación en generación. ¡Es un must!

Es como un buen traje y un par de zapatos de alta calidad: todos debemos tener al menos uno en nuestro guardarropa.

Pero, entre tantas opciones, ¿cómo elegir el mejor sin poner en riesgo nuestras finanzas o el pago de la mensualidad del coche? Aquí algunas recomendaciones:

Herencia

En el mundo de la relojería, la historia cuenta… ¡y mucho!

Por antonomasia, el reloj ligado con la calidad y la tradición es el fabricado en Suiza. Le siguen los alemanes, ingleses y franceses. En caso de optar por algún automático, los japoneses y estadunidenses están entre los más recomendables.

Hay una regla que debes conocer: para ser considerado suizo (Swiss made), el 50% del costo de fabricación de un reloj debe originarse en la meca de la relojería.

Un “Swiss parts” se refiere a un reloj hecho en cualquier lugar, pero con componentes originarios de Suiza.

Un fake es un fake en cualquier sitio. ¡Evita a toda costa las réplicas o clones!

Forma

La norma indica que el modelo que elijas no debe verse pequeño en tu muñeca; la correa no deberá extenderse más allá de ésta. En caso de que adquieras un modelo de extensible, puedes solicitar su ajuste con el distribuidor autorizado.

Un modelo de carátula redonda es perfecto para casi cualquier muñeca y talla. Como en todo, en gustos se rompen géneros.

¿Automático o de cuarzo? Tradición vs exactitud

En estos tiempos todo hay que hacerlo de prisa. Por ello, tener un reloj de cuarzo resulta muy práctico porque no tiene las complicaciones de ajustarlo; no obstante, debes considerar que las tendencias o el avance de la tecnología los pueden volver obsoletos en un plazo relativamente corto.

Por otro lado, un reloj automático deberá ser ajustado si no lo usas continuamente, ya que su mecanismo depende del movimiento de tu muñeca. No obstante, esta operación es un verdadero ritual que te llenará de satisfacción.

Puedes evitar este “contratiempo” si inviertes un poco más y adquieres un mecanismo con reserva de cuerda prolongada y sistema Tourbillon, que evitará atrasos o adelantos.

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De acuerdo con tu personalidad y estilo

Los hay formales, híbridos (analógicos con pantallas digitales), ecológicos (la luz del día los recarga), deportivos y de carreras (con cronógrafos y taquímetros), de buceo, de piloto (con detalles estéticos que remiten a una cabina de avión), de tipo militar (más simples, pero de consulta muy ágil), para montañismo (con barómetro, brújula y altímetro) y hasta de astronauta o agente secreto… ¿Quién no ha visto al agente 007 con una belleza de este tipo en su muñeca?

Es recomendable que optes por alguno que proporcione sólo la información que uses.

¿Formal o de tendencia?

Los relojes de diseño clásico son más formales. Su elegancia te permitirá portarlos en reuniones de trabajo o eventos sociales. Puedes optar también por adquirir algún modelo sport que se adapte a tu atuendo para la oficina, así como a la reunión con los amigos o la familia el fin de semana.

Ten especial cuidado si piensas adquirir uno de marca de fabricante de ropa o de marcas de coches. Si bien no todos son malos, tampoco son precisamente los de mayor calidad y suelen pasar de moda con mayor prontitud.

De hecho, lo que encarece a los relojes es la mano de obra, no “la marca” ni los materiales con los que está fabricado.

Correa de piel o caucho vs extensible de metal

Esto es algo muy importante a considerar: adquirir un reloj de cierta calidad y precio trae consigo un costo considerable de mantenimiento. Algunas marcas sólo realizan cambios de pilas o de correas si realizan un proceso de revisión integral de la maquinaria, lo que supone un gasto adicional.

Como es previsible, un extensible de metal es mucho más durable que cualquier correa, por lo que sustituirla de vez en cuando debe estar dentro de tu presupuesto. Actualmente también están de moda las correas de nylon, que tienen reminiscencias militares o deportivas.

Resistencia al agua y a impactos

También son cualidades de los relojes de gama media y alta. Deberás considerar la conveniencia entre invertir en una maquinaria cubierta por cristal de zafiro (que sólo puede ser rayado por un diamante) y una con plexiglass (plástico que no se rompe, pero que se raya).

Si tu presupuesto está algo limitado y no quieres complicaciones, puedes optar por uno con cristal normal, aunque deberás estar consciente de que puede romperse o rayarse con el uso cotidiano.

Como en todo, en gustos se rompen géneros. Elige alguno que uno que pueda representarte en varias situaciones y ajustarse a tu ritmo de vida; si puedes, compra dos. Como dicen los amantes de los tatuajes: una vez que tienes el primero, ¡ya no podrás detenerte!

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