Toparán comisiones de Afores, pero así seguirán ganando con tu ahorro
La limitación a sus ganancias por cobro de comisiones se compensará en parte con el paso de los años por la acumulación de saldos.
El tope a las comisiones que cobrarían las Administradoras de Fondos de Ahorro para el Retiro (Afores) a partir de que entre en vigencia la Reforma al Sistema de Pensiones, previsiblemente a partir del año 2023, sin duda limitará sus ganancias y redundará en mayores beneficios financieros para los trabajadores, quienes en un esquema de comisiones topadas al promedio vigente en tres naciones que son a la postre Chile, Colombia y Estados Unidos, más el aumento creciente de la tasa de aportación hasta llegar al 15 por ciento, podrán ahora sí tener una mejor perspectiva de pensión.
Al margen de varios temas adicionales que esta reforma pensionaria incluye, en los días recientes se ha desatado la inconformidad del gremio de las Afores al señalar que ellos no negociaron en ningún momento un tope a las comisiones, como está planteado en la iniciativa de reforma. Esto tendrá sin duda producto de un efecto negativo para los ingresos futuros de las administradoras ya que el tope a comisiones, que en los hechos significará una reducción drástica del promedio actual (0.92 por ciento), contraerá sus ingresos por cobro de comisiones.
Sin embargo, existe un salvavidas para las Afores, este factor de hecho está presente en el sistema prácticamente desde que inició, se refiere a la fase de acumulación de recursos en el Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR), que deja aportaciones crecientes a las administradoras.
En otras palabras, las Afores están “sentadas” desde hace años en una montaña de liquidez que crece año con año porque el SAR en México tiene vigente todavía su fase de expansión en el que las aportaciones de los trabajadores son mucho mayores a los retiros monetarios que se hacen.
¿Recuerda usted el llamado bono demográfico?, pues lo que sucede en el SAR es consecuencia directa, los jóvenes en edad laboral son mayoría respecto a quienes pasan a retiro, una mayoría muy importante, de modo que año con año el SAR recibe mucho más recursos por aportaciones, respecto a los que debe pagar por pago de pensiones.
Estas “montañas de liquidez” han dejado a las Afores ganancias importantes. Muy importante: no se trata de estigmatizar las ganancias de las administradoras, las han obtenido con toda legalidad y honestidad, así está diseñado el sistema y, en sus labores de administración de los recursos del SAR, es el papel que les toca jugar y los beneficios que han obtenido por dicha labor. Más aún, estas ganancias se han visto aderezadas por el esquema de comisión que se cobra, comisión por saldo.
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El papel que juega la comisión por saldo
Es muy sencillo y es uno de los absurdos por los que, de vez en vez, se les acusa a las Afores de obtener fuertes ganancias. Ellas no tienen la culpa porque no fueron las que decidieron el esquema de comisión a cobrar. De hecho, al inicio del SAR en su fase de cuentas individuales, existían hasta 3 tipos de cobro de comisión, pero las autoridades reguladoras dentro de sus facultades decidieron dejar sólo el esquema de cobro de comisión por saldo, es decir, los trabajadores solamente pagan comisión por el saldo que tienen en su cuenta de ahorro para el retiro.
El asunto es que la mayoría de las cuentas tienen saldos crecientes y no tanto por los rendimientos obtenidos, sino por las aportaciones; derivado de lo que hemos señalado anteriormente, los trabajadores en activo que tienen un amplio horizonte de vida laboral, son muchos más respecto a los que pasan al retiro o están muy cerca del mismo.
Estos saldos crecientes les otorgan a las Afores mayores comisiones año con año, es simple sentido común. Si existiera alguna duda de lo que hablamos, vea usted la realidad de las cifras, que como siempre hablan por sí solas.
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Aumentos “espectaculares” en lo recursos administrados de las Afores
El total de recursos registrados en las Afores pasó en una década (2020 vs 2010) de 2.14 a 6.09 billones de pesos, un incremento de 3.95 billones, equivalente a 184.7 por ciento. Ciertamente estos recursos totales incluyen el capital de las Afores que conforme a las normas de capitalización deben mantener invertidos en las Afores. Al cierre de agosto de 2020, la suma fue de 37 mil 834.7 millones de pesos. Sin embargo, respecto al gran total esta cifra es la parte más baja de la ecuación, corresponde al 0.62 por ciento del gran total, el resto de los recursos corresponde a los recursos de los trabajadores en los diferentes esquemas de administración, de los cuáles una parte importante las lleva a cabo el gremio de las Afores.
Todas y cada una de las Afores, salvo curiosas excepciones, tienen un incremento notable en los activos registrados durante la última década; veamos caso por caso.
En Afore Azteca, los saldos administrados pasaron de 16 mil 956.6 millones de pesos en 2010 a una cifra de 252 mil 579.7 millones al cierre de agosto de este año, lo que supone un incremento nominal de 235 mil 623.1 millones, o lo que es lo mismo una tasa de 1,389.7 por ciento.
Citibanamex pasó de 331 mil 030.8 millones de pesos a 1 billón 085 mil 348.1 millones de pesos, 754 mil 317.3 millones adicionales, igual a 227.87 por ciento.
Coppel creció de 47 mil 290.4 millones a 419 mil 487.7 millones, igual a un incremento de 372 mil 197.4 millones o bien 787.05 por ciento de crecimiento nominal.
Inbursa es una rara y curiosa excepción, su crecimiento es de tan sólo 10.10 por ciento, apenas 17 mil 394.5 millones más en 2020 respecto a los que tenía en 2010, pasó de 172 mil 184.9 a 189 mil 579.4 millones en dicho periodo.
Invercap subió sus recursos de 64 mil 275.2 a 270 mil 189.4 millones, igual a 320.36 por ciento o si se prefiere 205 mil 914.2 millones.
PensionISSSTE tuvo un crecimiento más moderado pero no tanto como Inbursa, en el periodo analizado pasó de 310 mil 837.4 a 505 mil 348.6 millones de pesos, con lo que creció 194 mil 511.2 millones de pesos, igual a 62.58 por ciento.
Afore Principal pasó de 81 mil 866.1 a 379 mil 585.3 millones, lo que representó un aumento de 363.67 por ciento, igual a 297 mil 719.1 millones.
Profuturo, por su parte, pasó de 204 mil 285.3 a 867 mil 854.1 millones de pesos en una década, su crecimiento fue de 324.82 por ciento, es decir 663 mil 568.7 millones de pesos.
SURA no se quedó atrás, pasó de un total de 255 mil 639.9 a 873 mil 854.1 millones de pesos, algo así como 618 mil 214.2 millones de pesos adicionales, igual a 241.83 por ciento.
Finalmente Afore XXI Banorte tuvo una tasa de crecimiento nominal de 889.52 por ciento, ya que pasó de 126 mil 484.5 millones de pesos registrados en 2010 a 1 billón 125 mil 100.7 millones reportados en agosto de este año.
Todos los incrementos anteriores son consecuencia directa de la fase de acumulación en la que se encuentra el SAR, año con año los recursos que se aportan son mucho muy superiores a los que se retiran.
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Afores enfrentarán un escenario diferente
Todo indica que en los próximos años las Afores enfrentarán un escenario diferente respecto a las comisiones, si bien existe un compromiso para que estas bajen a estándares internacionales al cierre del sexenio, es probable que dicha reducción sea más acelerada de lo previsto. Sin embargo, la fase de acumulación en el SAR no ha terminado, se estima que empezará una fase diferente hasta bien entrada la presente década, o principios de la siguiente. Estos años las Afores deberán prepararse para una nueva realidad, la limitación a sus ganancias por cobro de comisiones se compensará en parte con el paso de los años por la acumulación de saldos, pero es inevitable un cambio en el tema, se apruebe o no lo que se propone en la reforma al SAR.
En este debate sobre el tope al cobro de comisiones cada parte está en lo suyo: la autoridad reguladora tratando de llegar a estándares internacionales a la brevedad, y las Afores defendiendo sus ingresos, todo dentro de la legalidad, que es al final del día lo que beneficiará a los trabajadores.
