El peso se mantendrá sólido y apunta a bajar de los $18 por dólar
La moneda mexicana puede tener su mejor primer trimestre en cinco años por estos factores de apreciación.
Los días 21 y 22 de marzo, la Fed, tendrá su siguiente reunión de política monetaria, algunas especulaciones señalan que la institución decretará un aumento de hasta 50 puntos base en su tasa de referencia, llevándola de un jalón a un máximo de 5.25 por ciento. Otros señalan que dicho aumento será de 25 puntos base hasta 5 por ciento.
El único consenso que existe es que la Fed subirá su tasa sí o sí, porque no hay más opciones ante las cifras recientes de la economía, como el sólido desempeño del mercado laboral, entre otros.
Ocho días después, el 30 de marzo, tocará el turno a Banco de México (Banxico). Recordemos que en la reunión pasada sorprendió al mercado con un aumento de 50 puntos base para llevar la tasa de referencia a 11.00 por ciento anual, nivel histórico desde que utiliza la tasa de referencia como herramienta de política monetaria. En este caso no existe todavía mucha certeza, aunque para entonces conoceremos la cifra definitiva de inflación para el mes de febrero y la primera quincena de marzo, de eso dependerá mucho lo que haga Banxico.
Otra cosa en la que hay certeza es que, por el momento, la diferencia de tasas entre los bancos centrales de Estados Unidos y su contraparte mexicana se mantendrá en un mínimo de 600 puntos base, o bien 6 por ciento. Aunque podría mantenerse la diferencia actual, que como sabemos es de 625 puntos base o 6.25 por ciento considerando que la tasa de referencia de la Fed está en 4.75 por ciento mientras que el indicador en México se ubica en 11 por ciento.´
El dato y todo el contexto antes señalado es relevante porque tiene que ver, incluso es determinante, en la tendencia o trayectoria de otro indicador de gran relevancia para la economía mexicana: el tipo de cambio.
Factores que mantendrán sólido al peso
Todo indica que este primer trimestre del año será el mejor periodo para la moneda mexicana en los últimos 5 años. Inició el año en niveles de 19.31 y actualmente se ubica en 18.45 pesos, lo que significa que tiene una apreciación acumulada de 4.45 por ciento.
Pero, también todo indica que la apreciación cambiaria se mantendrá y pese a que al peso cada día le costará más trabajo seguir apreciándose, no dejará de hacerlo en lo que resta de este primer período trimestral, a menos que suceda algo que provoque lo contrario.
Justamente aquí es donde entran en consideración la serie de factores que mantendrán sólido al peso en el corto plazo.
– Diferencia de tasas: El primero y más importante es la diferencia de tasas entre México y Estados Unidos. Como mencionamos arriba, es un factor determinante porque determina la dirección de los flujos de inversión, esos recursos monetarios que se invierten en los mercados mexicanos y que tanto han fortalecido a nuestra divisa. Si el escenario que dibujamos al inicio del artículo se cumple, no habrá problema para que los inversionistas foráneos mantengan su presencia en el mercado mexicano, de modo que el peso se mantendrá sólido por ese lado.
– Voto de confianza a la economía mexicana: La economía nacional tiene muchos problemas, pero menos que otras. Además, siempre ha resultado beneficiada por su cercanía con la mayor potencia mundial, por lo que este factor seguirá beneficiando al peso, especialmente porque el contexto geopolítico está “enrareciéndose” y los capitales buscarán refugio en la moneda más sólida del mundo, que es el dólar, lo que de manera indirecta beneficiará al peso, como ya lo hemos visto en los meses anteriores.
– Impulso de inversiones de largo plazo (Nearshoring): La recolocación de capitales seguirá beneficiando al país. El nearshoring, entre otros, mantendrá el flujo de dólares hacia México, con potencial de mantener sólido al peso.
– Remesas estables: No sabemos si seguirá incrementándose el flujo de dólares por concepto de remesas hacia nuestro país, pero es casi seguro que no se reducirá, el mercado laboral estadounidense ha dado muestras de solidez y además requiere mucha mano de obra en este momento, es más fácil que los trabajadores foráneos que de alguna manera lograron llegar a ese país encuentran trabajo, con lo que seguramente las remesas se mantendrán hacia México, con los obvios beneficios para nuestra moneda.
El gran objetivo
En un análisis mitad técnico y mitad fundamental, todo indica que el gran objetivo del mercado en estos momentos es hacia los 18 pesos por dólar, nivel que le costará alcanzar pese a la solidez que ha mostrado el mercado.
De hecho, antes de que llegue o intente alcanzar esos niveles el punto de soporte más importante está en 18.25 pesos por dólar, y de romperlo crece más la posibilidad de que en algún momento se registren cotizaciones cercanas a 18 pesos. Este nivel es al mismo tiempo un “soporte psicológico” muy importante, si llega ahí, podríamos hablar de otros niveles o rangos no vistos hace muchos años.
Pero, los parámetros que han determinado la apreciación del peso se mantienen vigentes: estamos frente a una moneda nacional sólida debido en gran medida a las condiciones foráneas externas, las tasas de interés siguen siendo esenciales para la fortaleza del peso, sin duda ayuda la relativa estabilidad económica, pero en definitiva el diferencial de tasas es determinante.
Asimismo, de apreciarse como se espera, probablemente las autoridades hacendarias y del banco central tendrían que evaluar la conveniencia de una divisa tan fortalecida, ya que como hemos explicado en otras entregas, esta fortaleza cambiaria; por cierto, no única en la historia reciente, también se puede volver un factor de riesgo para las finanzas de este país, así como para algunas empresas del estado, como Pemex.
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