Y tu salud financiera, ¿para cuándo?
El retiro lidera la lista de las principales preocupaciones económicas, ya que un 76% de los mexicanos no sabe a qué edad se quieren jubilar.
Un tema que considero de gran importancia en nuestras vidas, y que a menudo pasa desapercibido, es la salud financiera. En este mundo tan cambiante, es clave tomar acciones firmes para asegurarnos de tener un futuro financiero en buena forma. La mayoría de la gente cree que está en buena situación económica. ¿Será esto cierto con base en la realidad que vivimos hoy en día?
Estamos situados en una era en la que la esperanza de vida ha aumentado considerablemente. Nuestra sociedad se ha vuelto más longeva, y esto nos obliga a preocuparnos más por nuestro futuro, en especial por nuestro retiro. Si bien es cierto que en el pasado podíamos confiar en el sistema de pensiones como un salvavidas económico para nuestra vejez, ahora nos enfrentamos a una realidad diferente; los sistemas de pensiones dependen de nosotros.
De acuerdo con el último reporte de Bienestar Financiero 2023, publicado por Aon, Invested, Vanguard y Amedirh, en nuestro país, el retiro lidera la lista de las principales preocupaciones económicas, ya que el 76 por ciento de los encuestados no saben a qué edad se quieren jubilar y apenas un 29 por ciento tienen claro cuánto están ahorrando para su futuro.
Además, tenemos que lidiar con otro desafío: la inflación. A lo largo de los años, este compuesto económico puede erosionar significativamente el valor adquisitivo de nuestro dinero. Esto significa que, lo que hoy parece suficiente para asegurar nuestro retiro, puede no serlo en el futuro. Las pensiones podrían verse afectadas negativamente por el impacto del encarecimiento, lo que generaría estragos en la estabilidad financiera de las personas mayores.
Ante este panorama, es muy importante que comencemos a tomar medidas concretas para garantizar nuestra salud financiera a largo plazo. Es necesario que seamos proactivos y asumamos la responsabilidad de nuestro propio futuro económico. Por ello, debemos tomar decisiones informadas y planificar cuidadosamente nuestras finanzas.
Aunado a ello, es crucial contar con una educación financiera sólida que nos permita comprender los conceptos clave como el ahorro, la inversión y la diversificación. En este sentido, las empresas pueden desempeñar un papel importante al proporcionar programas de finanzas sanas y fomentar la educación financiera entre sus colaboradores.
Como líderes, es fundamental que ayudemos a nuestros colaboradores a formar su bienestar financiero y tomemos medidas concretas para asegurar nuestro futuro económico. A continuación, quiero compartir algunas recomendaciones:
1. Destinar tiempo breve pero consistente a pensar en nuestras finanzas
A menudo, nos dejamos llevar por la rutina diaria y las relegamos un segundo plano. Sin embargo, es importante que dediquemos un tiempo regular para evaluar la situación financiera, revisar gastos, analizar metas y hacer ajustes necesarios. Incluso unos pocos minutos cada semana pueden marcar la diferencia a largo plazo.
2. Reconocer la importancia de hacer un plan financiero para toda la vida
Al igual que planificamos nuestras metas personales o profesionales, también debemos tener un plan financiero integral. Este plan debe contemplar nuestras metas a corto, mediano y largo plazo, como la educación de nuestros hijos, la compra de una vivienda o la jubilación. Establecer objetivos claros nos ayudará a tomar decisiones más acertadas y a mantenernos enfocados en nuestras prioridades.
3. Dejar de ser compradores de productos
En lugar de simplemente comprar productos financieros sin un análisis exhaustivo, debemos adoptar un enfoque más estratégico. Es esencial que comprendamos los diferentes productos y servicios financieros disponibles, sus ventajas y desventajas, y cómo se alinean con nuestros objetivos. Consultar con expertos en la materia y buscar asesoría adecuada nos permitirá tomar decisiones informadas y maximizar el rendimiento de nuestras inversiones.
4. El tiempo es un recurso invaluable que a menudo subestimamos
Evita gastar dinero en actividades que no aportan valor duradero; dedica tiempo aprender nuevas habilidades, desarrollarte personal y profesionalmente, cultiva relaciones significativas y explora tus pasiones.
5. Compartir y reducir los gastos
No cargues con todos los gastos, considera compartir los costos con amigos, familiares o compañeros de casa. Siempre es buena opción dividir el costo de una comida, un viaje o incluso los gastos mensuales de vivienda. Esto no solo aliviará tu carga financiera, sino que también fomentará la colaboración y fortalecerá los lazos con las personas que te rodean.
La clave para lograr un bienestar financiero sólido radica en poner en práctica estos pasos. No basta con tener conocimientos o planes; debemos implementar las acciones necesarias para alcanzar nuestros objetivos. Esto implica seguir un presupuesto, ahorrar de manera constante, invertir de forma inteligente nuestro tiempo, dividir gastos y ajustar nuestras estrategias según sea necesario.
Al adoptar estas recomendaciones, estaremos dando pasos significativos hacia una mejor salud financiera en los próximos años. El camino hacia una estabilidad económica no es siempre fácil, pero con enfoque, dedicación y una estrategia sólida, podemos asegurar un futuro próspero.
Nota del editor: Este texto pertenece a nuestra sección de Opinión y refleja únicamente la visión del autor, no necesariamente el punto de vista de Alto Nivel.
MÁS NOTICIAS:
- Profeco llama a revisión a 13 mil autos VW por falla en bolsa de aire
- ¿De vacaciones? Estos son los 5 mejores hoteles del mundo, según TripAdvisor
- Peso argentino, la moneda más ganadora frente al dólar en primer trimestre
- ¿Cuáles son los 10 países más poblados del mundo?
- Peso cierra su tercera semana con pérdidas frente al dólar
Moisés Pérez Peñaloza Líder de Retiro y Bienestar Financiero de Aon para Latinoamérica. Experto en jubilación, ahorro, finanzas personales y capital humano.