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Elecciones 2024

México inicia proceso electoral con más estabilidad financiera que en 1994

01-03-2024, 11:49:42 AM Por:
© Especial Alto Nivel

Hace 30 años ocurrió la última gran crisis económica y política de México. Hoy los mercados inician la recta final del proceso electoral con balance positivo

Marzo de 1994 marcó el inicio de la gran caída económica de México, que sucedió meses después con la gran devaluación del peso y el fin de los regímenes de tipo de cambio controlado, pero lo sucedido en el tercer mes de aquel año, que ya se ve lejano, es el marco contextual que determinó lo que siguió.

Por supuesto, el gran suceso fue el crimen contra el candidato del partido en el poder en ese momento, Luis Donaldo Colosio, un crimen que impactó dramáticamente a la economía, que ya venía lastimada por el surgimiento en el primer día de ese 1994 de la guerrilla del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN). Todos estos sucesos redundaron en algo que es esencial para cualquier economía: desconfianza.

Y dicha desconfianza era incluso un contrasentido, hasta cierto punto considerando que también apenas en enero de aquel 1994 México había iniciado la vigencia del que era en ese momento el mayor acuerdo comercial del planeta, con su vecino y socio Estados Unidos, y Canadá, el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), pero la economía estaba muy enferma y tenía que ajustarse.

Tres décadas después, los mercados están ante el inicio de un proceso electoral que se antoja inédito. En primer lugar, porque es altamente probable, casi seguro, que por primera vez en la historia una mujer sea presidenta de la República. En segundo lugar, la situación de México y su economía es diametralmente distinta. En tercer lugar, estamos frente a una oportunidad histórica por el Nearshoring para atraer miles de millones de dólares en inversiones que, si se aprovechan como debe ser, detonarán el ansiado desarrollo económico de largo plazo. Este es el antes y el ahora.

Hace tres décadas, desconfianza; hoy, relativa estabilidad

Hace tres décadas la cotización del peso rondaba niveles de 3.05 pesos por dólar, pero lo singular es que el modelo cambiario era muy distinto al actual.

Luego de varios experimentos, el gobierno tenía vigente en ese momento un régimen de “bandas de flotación”, es decir un precio máximo y uno mínimo, en el que la cotización del peso se movía, en los hechos la cotización del dólar siempre estaba más pegado a la banda superior que a la inferior, producto de las constantes presiones cambiarias traducidas en demanda de dólares.

Por su parte, las tasas de interés se movían en un promedio artificial de 8.5 por ciento, con niveles de inflación que también se movían aparentemente a la baja, en niveles de 6.5 por ciento, todas estas cifras eran publicadas por un banco central que estaba en vías de ser autónomo, oficialmente un mes después iniciaría su vida de autonomía, aunque tardaría prácticamente un año en consolidarla. Mientras eso sucedía, las estrategias en política cambiaria y de tasas de interés se tomaban en instancias gubernamentales.

Mientras tanto, en el mercado accionario empezaba a reflejarse el declive, tras abrir el año en 2,895 puntos para principios de marzo, la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) ya se ubicaba en 2,675 puntos y la caída siguió hasta marzo de 1995, es decir un año después, cuando se ubicó en 1,448 puntos. En total, el mercado bursátil mexicano tuvo un desplome de 45.86 por ciento.

Hoy podemos contar otra historia, no hay nada escrito, pero al menos en la fotografía inicial los mercados enfrentan la histórica recta final del proceso electoral en una situación totalmente distinta.

En cuanto a los números, la moneda mexicana mantiene la solidez que la ha caracterizado en la presente administración, el balance de los primeros dos meses del año indican una apreciación de 0.94 por ciento al finalizar febrero en 17.05 pesos, manteniéndose sólida.

Las tasas de interés, en el llamado fondeo secundario, se colocan sobre un promedio de 10 por ciento, todavía con los efectos de la tasa de referencia de Banxico que se ubica en 11.25 por ciento y que, según los analistas, podría bajar en las próximas semanas o meses.

En cuanto al Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) de la BMV,, este refleja un retroceso acumulado en los dos primeros meses del año de 3.44 por ciento, nada relevante por el momento, después de las fuertes ganancias de 18.41 por ciento en el principal indicador accionario mexicano el año pasado.

Adicionalmente, en contraste con el escenario de salida de capitales de 1994 que llevó al Banco de México a registrar un mínimo histórico de reservas internacionales de 3,000 millones de dólares en diciembre de 1994 (que se comparaba desfavorablemente contra los 20 mil millones que debía pagar solamente en 1995), hoy tenemos un constante ingresos de recursos: remesas, inversiones y créditos, sin considerar que las reservas en Banxico ya superan los 200 mil millones de dólares.

En 1994 marzo fue el inicio de la gran caída económica de México, la mayor crisis de la historia contemporánea, hoy la fotografía de la solidez es evidente, veremos al final del proceso electoral cómo se comportaron los mercados mexicanos.

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