Tamaulipas, ¿una historia de éxito en reducción de crimen?
Tamaulipas ha salido de los rojos en el Semáforo de Alto Impacto y empieza a perfilarse como una gran historia de éxito. Hay pendientes, pero el avance es impresionante.
El estado cierra el 2019 con tasas de incidencia delictiva cuando menos un 25% por debajo de la tasa nacional. Esto es extraordinario y vale la pena desmenuzarlo.
¿Qué pasa si comparamos a Tamaulipas contra sí misma? En estos delitos tuvo una reducción respecto al año anterior de:
- Homicidio – 22%
- Secuestro – 72%
- Extorsión – 11%
- Narcomenudeo – 15%
- Robo de Vehículo – 28%
Todos los delitos de crimen organizado bajaron en el año. Nada mal para un estado que nos tenía acostumbrados al terror. La población lo empieza a notar, pues la percepción de seguridad empieza a mejorar, conforme a datos del INEGI.
Es obvio que hay regiones de peligro en Tamaulipas. En homicidios, por ejemplo, la entidad cerró con una tasa de 20 homicidios por cada 100 mil habitantes, que compara bien contra la nacional de 24. Sin embargo, hay municipios con tasas muy altas como Ciudad Victoria, la capital, con 37, así como Reynosa y El Mante con una tasa de 35. Por el contrario, los municipios con tasas por debajo de 10, muy en verde, son Tampico, Altamira y Cd. Madero.
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El año pasado, la mayoría de los municipios lograron bajar los homicidios. Victoria bajó un 50%, El Mante 31%, Nuevo Laredo 23%, Matamoros 11% y Reynosa 7%.
En Secuestro, Tamaulipas tradicionalmente nos aparecía en rojo. Este año, los secuestros bajaron un impresionante 75%, lo que habla de que la Unidad Anti-secuestros está haciendo su trabajo. Con esa reducción, el estado logra posicionarse por debajo de la tasa nacional.
Bajar robo de autos tampoco es fácil, porque este delito siempre está relacionado a mafias de robo o narco-mafias. Este año, el estado logró reducirlos un 28%.
Por último, me gusta que el Narcomenudeo también haya bajado en el año y compare bien contra otros estados. Quiere decir que la fiscalía y la policía no están distraídas con este delito.
El Robo a Casa y las Lesiones Dolosas (riñas) también bajaron. Por el contrario, subieron el Robo a Negocio, Violación y la Violencia Familiar. Sin embargo, primero hay que crear las condiciones de paz con los delitos de alto impacto y luego afinar la puntería en los delitos patrimoniales y los socio-familiares.
En el Semáforo
Carretero, Tamaulipas tiene una gran zona en rojo, en la franja fronteriza. Es
un tema muy complejo que el estado y el ejército tendrán que trabajar. Si lo
logran, sería la cereza en el pastel.
No conozco detalles de la estrategia, pero cuando vemos cambios favorables de esta magnitud siempre tiene que ver con estas variables:
- Lo primero, una actitud correcta, un buen nivel de consciencia en las autoridades. Aceptar el problema, informarlo y trabajarlo con inteligencia. Mucha modestia ante los logros.
- Revisión continua y ajuste de estrategias conforme a resultados. El equilibrio siempre es dinámico.
- Mucha coordinación entre autoridades municipales, estatales, federales y militares.
- Participación de la sociedad: medios, cámaras empresariales, ONG´s y líderes ciudadanos.
Habrá quien me corrija diciendo que cuando bajan estos delitos es porque las mafias dejaron de pelearse entre ellas. Sin duda, pero a veces este arreglo entre mafias se debe a que la presión del gobierno y la sociedad son tales, que no tienen otra alternativa más que negociar entre ellas.
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México sí tiene historias de éxito, quizá esta empieza a ser la próxima, junto con Sinaloa, BCS, Nuevo León y Yucatán. Esas historias no se generan en el gobierno federal, sino en los estados y municipios, muy a pesar de que el gobierno federal recorta y concentra presupuestos, y sigue promoviendo la violencia por no querer regular las drogas.
Sugiero que el caso de Tamaulipas se estudie por los especialistas y que las autoridades, sin cantar victoria, nos expliquen la razón de esta notable mejoría. Bien por Tamaulipas.
