En el Buen Fin 2020, el ganador será (otra vez) tu tarjeta de crédito
Ante esta crisis, no queda más que cuidarse de elevar el endeudamiento bancario y que, de una vez por todas, renovar este evento, porque no sirve para lo que fue creado.
Se aproxima la décima edición del Buen Fin, evento que, como todos sabemos, pretende replicar el Black Friday de Estados Unidos, donde tiendas minoristas y almacenes presentan rebajas de productos a precios de liquidación para beneficio de los consumidores, como parte de una celebración posterior al Día de Acción de Gracias.
En México, el formato comenzó en 2011 y es una dinámica impulsada por comerciantes pertenecientes a la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicio y Turismo (Concanaco). Hasta la fecha, se han registrado incrementos en ventas y recaudación de manera consecuente; tan solo en 2019 participaron 11 mil 279 establecimientos comerciales, 67 mil 760 empresas y 47 mil 519 sucursales, donde los segmentos más demandados durante el periodo de promoción fueron los electrónicos, televisores y computadoras, así como ropa y calzado.
Si bien en años anteriores la situación nacional estuvo lejos de reflejar bonanzas, el consumo no faltó. Pero hoy nos enfrentamos a un contexto muy distinto, ya que el evento se realizará en un periodo de crisis y contracción económica. La operación por supuesto se adaptará con la finalidad de evitar conglomeraciones, acordando una extensión en la duración a 12 días, partiendo del 9 y finalizando el 20 de noviembre, y donde el principal canal de venta será el e-commerce. Adicional a la extensión del periodo, las marcas, que normalmente recurren al índice de ventas del año anterior para prepararse, no podrán aplicar la misma estrategia, por lo que ahora tendrán que entender que la experiencia digital, los precios especiales y las entregas rápidas, serán aspectos fundamentales para tomar la decisión de una compra, según una investigación realizada por Criteo.
Ahora vale la pena realizar la siguiente interrogante: ¿hacer consumo innecesario es la fórmula para reactivar la economía del país?
Es conocimiento de todos que las promociones no son ni mínimamente comparables con las de Estados Unidos. Cuando allá compran en grandes cantidades con grandes ofertas, aquí apelan a descuentos de entre el 15% y 30% o a los famosos meses sin intereses. Dónde también existe el antecedente de marcas que inflan los precios de manera previa al “Buen Fin” para que, durante la celebración, se refleje un supuesto descuento, cuando en realidad el producto se está vendiendo al costo regular.
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Con lo anterior, los ganadores durante el Buen Fin serán principalmente sin lugar a dudas las tarjetas de crédito, que terminarán poniendo a largo plazo los compromisos, propiciando un mayor endeudamiento y tarjetas sobregiradas. A lo largo de la pandemia, los ciudadanos han optado por adquirir créditos y apoyos financieros a “Fintechs” para liquidar deudas o para hacer amortizaciones de pago a instituciones bancarias tradicionales, para quedarse únicamente con la mensualidad fija del producto fintech. Esta tendencia, permite que los consumidores tengan disponibilidad de pago. Sin embargo, terminará siendo un círculo vicioso por el incremento de deuda, que generará morosidad, índices de impago por menores ingresos y carteras vencidas, escenario que será una realidad al término del año.
A quien pondrá a trabajar toda esta estrategia de consumo será a la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), que estima estar lista para recibir un aumento en el número de consultas a través de medios digitales y llamadas telefónicas, por lo que, además de poner a disposición mil empleados para apoyar de manera virtual a consumidores, monitoreará publicidad engañosa y lanzará un micrositio de Quién es Quién durante las dos semanas del Buen Fin, adicional a poner disponible el número telefónico. La pregunta sería: ¿Podrá la oficina con esta misión?, muy complicado para Francisco Ricardo Sheffield Padilla.
No es que seamos mal pensados o malintencionados, pero más vale recordar los múltiples casos y quejas en los que el consumidor no recibió lo que pagó. Ejemplo de esto, fue el caso de Tec-Check, plataforma comparadora de precios, que ganó la queja colectiva que presentó a favor de 48 consumidores por malas prácticas de la tienda en línea de Liverpool, Sanborns y ClaroShop. La plataforma pidió durante semanas a los consumidores alzar la voz y sumar sus quejas de incumplimiento en fechas comprometidas de envíos, faltas de confirmación de compra y cargos en tarjetas, así como omisión en el seguimiento del servicio al cliente cuando faltó la entrega. Así, los consumidores lograron ser compensados con el equivalente al 20% de su compra.
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Así como en ocasiones las tiendas departamentales hacen caso omiso a las quejas, no olvidemos que hoy día, iniciativas como Tec-Check, que buscan crear una organización de consumidores en línea que permitan tener claridad ante lo comprado, son canales de amplificación, donde mientras más visible sea la situación, más atención le pondrán a la injusticia. No queda más que cuidar el recurso, no descapitalizarse ni elevar el endeudamiento con instituciones bancarias en épocas de contracción y dificultad económica. Ante la celebración, ojalá este sea el camino para la reactivación, no del empresariado sino de la comunidad laboral en el país y, de una vez por todas, modificar e innovar con un evento interesante porque ya vimos que el llamado Buen Fin, no sirve de mucho para lo que fue creado.
Nota del editor: Este texto pertenece a nuestra sección de Opinión y refleja únicamente la visión del autor, no necesariamente el punto de vista de Alto Nivel
Julio Pilotzi Periodista con 20 años de experiencia en los medios de comunicación. Colabora actualmente en ADN 40 de Televisión Azteca. Su columna Split Financiero ha sido publicada en la Sección de Finanzas del periódico, Capital de México, El Sol de México, actualmente en Diario 24 Horas y El Economista.