¿Terminó el criptoinvierno? Bitcoin repunta 38% durante enero
Algunos grandes bancos de Estados Unidos retomaron sus apuestas por el bitcoin, que empezó 2023 con una gran alza.
En medio del “criptoinvierno”, el bitcoin, la moneda más representativa y popular de los criptomercados, inició el año sobre niveles de 16,527 dólares por unidad, lo que significaba su precio más bajo desde el 21 de noviembre del año pasado, cuando cotizó en 15,625 dólares.
El panorama para la criptomoneda se dibujaba negativo con los precios anteriores y, sobre todo, con las expectativas para este mercado, especialmente después del colapso de la plataforma FTX, así como de los avisos por elevados riesgos de otras plataformas y los desfalcos de otras.
Sin embargo, al cierre del primer mes del año el bitcoin terminó en 22,900.7 dólares, lo que significa que tuvo un repunte durante dicho periodo de 38.55 por ciento; se trata de un ajuste espectacular sin duda alguna, pero no el primero ni el último.
A pesar de este impulso en su precio, el bitcoin todavía registra una caída de 64.44 por ciento respecto al máximo histórico registrado el 6 de noviembre de 2021 y ubicado en 64,398.6 dólares por unidad, en aquellos días en los que se decía que incluso podría rebasar los 100 mil dólares.
No obstante, el repunte de enero llama la atención, por lo que comentamos al inicio del artículo, se supone que estamos en el “criptoinvierno”; es decir, en un mercado deprimido, con potencial bajista por factores también arriba mencionados.
¿Qué sucedió para este repunte al inicio de año?, ¿será sostenible en el tiempo? Veamos algunas consideraciones sobre el bitcoin y, por lo tanto, sobre los mercados.
Ajuste técnico ligado al dólar
Una primera causa que explica el repunte del bitcoin es el ajuste técnico que registra este mercado ante la depreciación del dólar, experimentada en enero, y causada a su vez por la sensación de que la inflación de los meses anteriores ha llegado a su fin.
La apreciación de bitcoin es reflejo colateral del debilitamiento del dólar ante menores factores de riesgo como la moderación de la inflación y las alzas de tasas. De esta manera, cuando el dólar se debilita, hace falta más de esta moneda para comprar bitcoin y el precio se ajusta casi automáticamente.
Desde las semanas previas los indicadores económicos mostraron señales de estabilización, favoreciendo los posicionamientos de las carteras o fondos de inversión en activos excesivamente castigados, como el caso del bitcoin que como señalamos tiene todavía un desplome del 64 por ciento respecto a su cotización máxima histórica.
Al parecer, un ajuste técnico en el mercado del bitcoin explica en parte este repunte espectacular de casi 39 por ciento en el primer mes del año en curso.
Inflación llegó al techo y el alza de tasas se moderará, otro factor
Para algunos analistas y operadores en los criptomercados, un factor determinante está relacionado con el descenso de la inflación en Estados Unidos y en el mundo entero, lo que a su vez provocará que los aumentos en las tasas de interés se moderen; se se espera que la Fed anuncie un aumento de 25 puntos base en su tasa de fondos federales el 1 de febrero, por debajo de los 50 puntos que había aumentado la tasa las cuatro ocasiones más recientes.
La disminución de las tasas reduce los costos de proyectos de criptofinanciación y reduce también la volatilidad en el mercado, por lo que es un factor adicional en este repunte del precio del bitcoin.
Gigantes del mercado no abandonan el bitcoin
A pesar del desplome del bitcoin desde sus máximos históricos y de los escándalos y desfalcos en los criptomercados, algunos gigantes de los mercados financieros tradicionales mantienen su atención en este activo, lo que demuestra que algo observan como potencial de negocio e inversión.
Fue así como en el inicio de año la agencia Bloomberg informó que Morgan Stanley, considerado uno de los mayores bancos de inversión de Estados Unidos, adquirió bitcoin a través de Grayscale Bitcoin Trust, por un modesto monto de 3.6 millones de dólares; el gigantesco banco tiene activos por 6.5 billones de dólares, pero el hecho de que haya comprado una cantidad ínfima es un aliciente en medio del criptoinvierno.
OPINIÓN: La sombra del fraude oscurece al mundo “cripto”
Pero Morgan Stanley no fue la única institución financiera de gran calado que compró bitcoin; BlackRock, el mayor gestor de inversión del mundo, con activos en gestión por más de 15 billones de dólares, también adquirió una suma no determinada, por medio de Global Allocation Fund.
El regreso de los tiburones financieros tradicionales al todavía turbulento mar de las criptomonedas refleja que hay interés por participar de un negocio que, si bien está en etapa de desarrollo, tiene potencial.
Por lo pronto, fue un gran mes para el bitcoin, sin embargo, el criptoinvierno sigue, no se ha terminado. Por tal razón, algunos riesgos siguen vigentes y pueden inyectar más volatilidad a un mercado que se caracteriza precisamente por eso. La probable recesión, así como eventuales repuntes inflacionarios y una guerra que parece no tener fin entre Rusia y Ucrania, son los factores de riesgo que más se consideran en los criptomercados. La volatilidad será un distintivo por mucho tiempo más.
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