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Economía

Estos factores deben fomentarse para sacar a México de la “trampa del crecimiento”

08-02-2022, 8:22:00 AM Por:
© Especial

Tres indicadores serán clave en el desempeño económico del país este año, cuyas expectativas de crecimiento están debajo de otras naciones.

Este lunes la secretaria de Economía, Tatiana Clouthier, pronosticó que el PIB de México crecerá en 2022 alrededor de 2.8 por ciento; la expectativa está en línea con la del Fondo Monetario Internacional (FMI), aunque más optimista respecto a las proyecciones recientes de la comunidad de analistas que ya ubican este indicador en un nivel cercano al 2 por ciento.

Alinearse a los consensos de organismos especializados es un buen inicio para encontrar en algún momento una solución al grave problema de crecimiento insuficiente que asola al país y, de hecho, al mundo entero. Sí, el planeta ya entró nuevamente a la “trampa del crecimiento”, después del “rebote” económico global. De una muestra de 15 economías que el FMI contempla para elaborar parte de su material informativo en el que actualiza las perspectivas de crecimiento de la economía global (México contemplado), solamente tres de ellas tendrán un incremento respecto al mes pasado, una crecerá igual que en 2021 y las 11 restantes crecerán menos; nuestro país está contemplado en este último grupo.

El mundo crecerá menos que en 2021

Así, de la muestra de 15 naciones, España superará el PIB del año pasado ya que alcanzará un nivel de 5.8 por ciento frente el 4.9 reportado en 2021; Japón crecerá 3.3 por ciento superando el 1.9 por ciento del año pasado, mientras que Arabia Saudita superará el 2.9 por ciento de crecimiento registrado en 2021 con un 4.8 por ciento proyectado para este 2022.

La India será la única nación que crecerá lo mismo que el año pasado, cuando su PIB avanzó a una tasa anual de 9.0 por ciento. Todos los demás países crecerán menos. Latinoamérica es nuevamente la región más afectada y los dos países que la representan en la muestra del FMI quedan muy mal frente a otras naciones. México y Brasil son los países que tendrán la mayor reducción en su crecimiento económico; para el primer caso el PIB en 2022 será 1.89 veces inferior a la que reportó en 2021, mientras que Brasil tendrá un auténtico desplome con un PIB 15 veces inferior al que reportó en 2021 ya que apenas crecerá 0.3 por ciento en este año. según las proyecciones del FMI.

Los otros factores que podrían incrementar (o detener) el crecimiento del país

Si bien hay factores globales que afectarán el crecimiento en todo el planeta, México, como muchos países, tiene particularidades estructurales o coyunturales que también inciden en un bajo desempeño de su PIB.

Tres indicadores son clave en este contexto. De su evolución en los próximos años depende que México pueda librarse de la “trampa de crecimiento” en la que se encuentra, pero de inicio las proyecciones no son lo más favorables para nuestro país.

1) El consumo privado. Después de mostrar un espectacular repunte de 10.2 por ciento el año pasado, este 2022 tendrá una tasa de crecimiento de sólo 2.5 por ciento, es decir no crecerá ni siquiera la tercera parte de lo que creció en 2021; pero eso no es lo peor, para 2022 se estima una tasa de crecimiento de 2.3 por ciento. Así, el consumo privado, uno de los principales motores del crecimiento económico, está a la baja.

2) La inversión. Otro indicador con un desplome preocupante; en 2021 tuvo un incremento de 14.1 por ciento en su conjunto (público y privado), pero este año apenas crecerá 5.5 por ciento y para 2023 se espera un incremento de 4.5 por ciento. Impulsar el crecimiento de la inversión tiene que ser prioritario, se requieren “montañas” de recursos y el gobierno juega un papel determinante.

3) Exportaciones. Si la caída de los dos indicadores anteriores es espectacular y preocupante, la que se registra en este indicador no tiene calificativos. Las exportaciones subieron en 2021 a una tasa de 27.7 por ciento, pero en 2022 apenas tendrá un repunte de 6.4 por ciento y el año que entra su impulso será de sólo 5.3 por ciento. El motor exportador muestra signos de estancamiento, nuestro principal mercado nos mueve a su antojo, eso tiene que cambiar o dependeremos eternamente de dicho factor.

México debe salir de un debate absurdo generado por expectativas artificiales sustentadas en discursos y reconocer las proyecciones de los organismos especializados es un buen avance. El siguiente paso tiene que ser la identificación de los factores locales que han llevado al país a la “trampa del crecimiento”, aquellos sobre los que sí tenemos o podemos tener control.

La prioridad no debe ser adivinar si el país llegará o no a una tasa irreal de crecimiento, es un hecho que eso no sucederá. Lo prioritario tiene que ser el impulso del crecimiento con bases reales, creíbles y de largo plazo, ese sería el mejor de los legados.

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