Precios de granos caen tanto que bodegas se llenan de sorgo maíz y trigo sin vender
Los precios en el mercado son más bajos que el precio de garantía de 6,900 pesos por tonelada de maíz; productores acusan entrada indiscriminada de importaciones como parte del problema.
El campo sigue en serios problemas y las soluciones que se han implementado han sido insuficientes y no podrán evitar que miles de productores enfrenten una crisis más severa en caso de que las cosas sigan así, el riesgo social es muy alto. Así lo expresó en entrevista radiofónica, una vez más, el Vicepresidente del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), Rogelio García Moreno, quien encabeza protestas constantes en Palacio Nacional para alertar sobre la situación que enfrentan miles de campesinos y el campo mexicano en general, ante la competencia de productores de otros países y la falta de apoyo en México.
Cifra mágica: 10,000 millones de pesos
El campo requiere en estos momentos alrededor de 10,000 millones de pesos para solucionar temporalmente la problemática que enfrentan respecto a la falta de venta y baja producción. “Con 10,000 millones de pesos se inyectaría la liquidez necesaria para cuando menos, de forma temporal, liberar presiones en el campo mexicano. Es cierto que Segalmex compró alrededor de 2 millones de toneladas en maíz en Sinaloa, pero lo que se debió haber hecho es diversificar esos recursos inyectados en Sinaloa para apoyar en diferentes partes del país”, dijo Rogelio García.
Sucede que, de acuerdo con el miembro del Consejo Nacional Agropecuario, los problemas se acumulan en el campo, se inician con el hecho de que Segalmex tiene un precio de garantía, que hoy es de 6,900 pesos la tonelada de maíz, pero el precio en el mercado está más abajo, lo que provoca que el grano se acumule en las bodegas.
Otro factor que provoca el estancamiento de granos en las bodegas es la competencia de productores del extranjero: los productores locales de granos compiten con la producción de varias partes del mundo que llegan al país. El punto es que en esos países la agricultura es altamente subsidiada, mientras que en México los apoyos son cada vez menores.
Para el Consejo Nacional Agropecuario, la próxima gran amenaza es la cosecha Otoño-Invierno, en la que están en juego alrededor de 11 millones de toneladas de grano, y no solamente maíz, sino también trigo y sorgo.
En este sentido, los cálculos del experto señalan que el gobierno debería apoyar urgentemente al campo mexicano y pone sobre la mesa la cifra de entre 10,000 y 11,000 millones de pesos, a modo de apoyar la producción. Pero el problema es más serio todavía porque la inyección de liquidez terminaría solamente con una parte del problema, mientras las bodegas se mantendrían llenas.
Problema global
El vicepresidente del Consejo Nacional Agropecuario advierte también que existe un problema global en la agricultura: factores como la guerra Rusia-Ucrania, las presiones sobre los energéticos, el repunte de la inflación en los dos años recientes, así como la volatilidad de costos en diversos productos alternos.
Después de los confinamientos, el consumo de granos y la recuperación de las cadenas logísticas se estabilizaron, permitiendo que los precios empezaran a bajar, no fue un proceso abrupto sino que ha requerido de varios meses.
En ese sentido, el experto menciona que la producción excesiva en varias partes del mundo ha determinado el descenso de los precios, mientras que la guerra ya no presiona los precios ni la producción como lo hizo en un inicio.
La apertura a la importación de granos para abatir la inflación en México es otro factor. Además, la entrada de granos producidos a un costo menor, debido a los subsidios en los países de origen han estancado el consumo en el país, abatiendo los precios. Este último factor debería ser una buena noticia; de hecho, una excelente noticia; si es que no hubiera importación de granos, pero el mercado se ha saturado al darle preferencia en materia de importación y consumo a la producción proveniente del extranjero.
Faltan mecanismos
Rogelio García Moreno señala que el problema del campo mexicano es muy grave y puede empeorar, y conmina al gobierno a tomar medidas para reducir las presiones sobre miles de productores antes de que la situación pueda volverse insostenible en el campo mexicano.
El ejecutivo del Consejo Nacional Agropecuario explica que es urgente la operación del gobierno para diseñar un mecanismo que ordene las cosechas, proporcione certeza a la cadena de valor del campo mexicano y estimule a los campesinos a que produzcan porque hoy día existen muchos riesgos financieros y económicos que no podrán mantener por muchos tiempo más. Mientras eso sucede, el grano está estancado, las bodegas llenas de sorgo, maíz y trigo, que no puede repartirse porque el dueño es Segalmex y registraría cuantiosas pérdidas si lo vende a un nivel inferior al precio de garantía.
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