Buscador
Ver revista digital
Economía

El plan anti inflación que presentó AMLO a Biden tiene muy poco de ‘antiinflacionario’

13-07-2022, 10:42:58 AM Por:
© EFE.

Algunas de las propuestas se tratan más bien de necesidades ligadas a la economía mexicana, como la creación de infraestructura y una gran reforma migratoria.

Los presidentes de cualquier país no lo saben todo; de hecho, por lo general no son especialistas en casi ningún tema, mucho menos económicos. De ahí, la relevancia de que se alleguen de personas que los asesoren, de expertos en cada materia.

Quién sabe qué expertos asesoran al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, pero todo indica que están poco informados sobre la realidad actual de la economía del país y de su vecino del norte. Ayer al presentar nuestro primer mandatario a su contraparte estadounidense, Joe Biden, el famoso y misterioso “plan anti-inflacionario”, anunciado desde la semana pasada, este quedó muy corto de acuerdo con las expectativas generadas. Aquí algunos comentarios:

Plan de estímulo, más que plan antiinflacionario

Si pudiéramos definir el plan presentado, podríamos señalar que en esencia se trata más de un plan de estímulo económico que de un plan contra la inflación. La reactivación de la economía es algo que sin duda urge a México, pero no necesariamente a Estados Unidos. De ahí viene el primer extrañamiento, ya que las presiones inflacionarias en nuestro vecino del norte provienen de la parte de la demanda en la economía, no es un problema de oferta. Los asesores del presidente AMLO deben saber esto y, por lo tanto, de lo que debiera tratarse cualquier plan es de buscar la manera de reducir las presiones por demanda y no facilitar más el consumo, o estimularlo. Pero vayamos a los cinco puntos presentados al presidente Biden.

1. Garantizar abasto de gasolina en la frontera

El primer punto del plan consiste en garantizar el abasto de gasolina en la frontera entre los dos países, para que los ciudadanos norteamericanos en la región puedan abastecerse de combustible, mientras hay escasez mundial.

Pero, sucede que en Estados Unidos la situación es muy diferente a la de México, al menos allá no hay escasez de combustible. Lo que sí hay es un auténtico libre mercado en el que por años la gasolina estuvo muy barata, cuando los petroprecios estaban deprimidos, hoy es todo lo contrario; desde luego que impacta en el bolsillo de los ciudadanos, pero no en la misma medida que lo hace en la ciudadanía mexicana, con muchos menos recursos y poder adquisitivo. De hecho, que el público en general consuma menos gasolina sería benéfico en estos momentos para la economía de Estados Unidos, porque significaría menos consumo y menores presiones sobre la inflación.

En todo caso, que los texanos o californianos compren gasolina en México, no sería de gran impacto para bajar la inflación en todo Estados Unidos, y no se observa cómo se puedan reducir las presiones inflacionarias en nuestro país subsidiando también gasolina al consumidor estadounidense.

2. AMLO ofrece a Biden gasoductos para la Costa Oeste

AMLO puso a disposición de Estados Unidos la red de gasoductos de México para transportar gas de Texas a Arizona, Nuevo México y California y resolver el problema energético en la Costa Oeste de ese país.

Nuevamente, la disminución en el abasto de gasolina en algunas partes de Estados Unidos, obedece a que se resiente un menor dinamismo consecuencia de las medidas que ha tomado la Fed para “enfriar” la economía. En todo caso, los gasoductos que México presume, fueron la primera parte de un plan estratégico que este gobierno debió continuar y que no lo hizo, para que llegara la red hasta el centro del país y de ahí hacia el sur sureste, para impulsar el dinamismo de la economía nacional y evitar en determinado momentos crisis de abasto. Ahora esos gasoductos quieren utilizarse en algo, seguirán sin completarse como una gran red nacional.

3. Suspensión de aranceles

También se planteó suspender aranceles en alimentos e insumos para aminorar los precios de los consumidores en ambos países.

Es una medida correcta en un entorno de estímulo económico; pero, el problema no es de producción y logística, no al menos el principal. La gran inflación energética y alimentaria es global, la reducción de aranceles sería como tomar una aspirina para aliviar una fuerte migraña, no serviría de mucho. México y el PACIC son el mejor ejemplo, se tomaron medidas de contracción arancelarias desde febrero de este año, pero es la hora en la que siguen las presiones sobre la inflación de nuestro país.

4. Plan de inversión bilateral

El cuarto punto consiste en iniciar un plan de inversión privada y pública entre los dos países para producir bienes que fortalezcan ambos mercados

Es una especie de New Deal binacional; el punto es que se trata nuevamente de un factor a favor del estímulo económico, bueno en el largo plazo, pero muy dañino bajo las condiciones actuales; también parece más una idea sin sustento porque no se ponen cifras sobre la mesa, no se garantiza nada, y no hay análisis de riesgos y beneficios. En todo caso, si algo le hace falta a nuestro país es infraestructura, pero a lo largo del sexenio y de los anteriores, el tema siempre ha pasado a segundo término. Ya por la tarde en un comunicado conjunto, se publicó que México se comprometió a invertir 1,500 millones de dólares en infraestructuras entre 2022 y 2024. Al respecto, sólo se confirma que el país atrasado en la materia es el nuestro, además, faltaría ver cómo y, sobre todo, con qué recursos se va a cumplir con dicho compromiso, ¿Cómo se le obligará a la Iniciativa Privada a participar en un plan sin pies ni cabeza?

5. Entrada de trabajadores temporales a EU

El quinto y último punto del plan anti-inflacionario presentado por AMLO a Biden, propone ordenar el flujo migratorio y permitir la llegada ordenada a Estados Unidos de obreros, técnicos y profesionales de distintas disciplinas.

La pregunta inmediata es: ¿eso en qué ayudaría a disminuir las presiones inflacionarias tanto en México como en Estados Unidos? Como presidente de nuestro país, es loable la preocupación que externa por los migrantes, pero claramente AMLO quiso integrar en un plan supuestamente anti-inflacionario una estrategia migratoria que sus antecesores también han intentado de alguna manera. Lamentablemente en Estados Unidos no es el momento, Biden y los demócratas lo saben; mucho menos se tomará en cuenta si la propuesta va acompañada de un ataque a los “conservadores estadounidenses”, o de viejos recursos como los permisos a migrantes de los años cuarenta del siglo pasado, cuando el planeta entero era otro, la vida misma tampoco tenía nada que ver con los tiempos actuales.

Una gran reforma migratoria sería el gran avance para cualquier presidente de México, pero no lo será en el corto plazo, mucho menos insertada en un plan para bajar la trayectoria de los precios.

En resumen, es un plan que en esencia no tiene mucho de novedoso, no está enfocado a resolver de raíz el problema de la inflación en México y en Estados Unidos, y más bien tiene algunas intenciones políticas que, aparte de todo, no llegan en el mejor momento políticamente hablando de la mayor economía del planeta.

La inflación es un fenómeno de tanta complejidad en este momento, que no se ataca con soluciones simplistas, los asesores que diseñaron la estrategia deberían estar más cerca de la realidad.

AMLO dijo posteriormente que, con este planteamiento, se busca “contar con la fuerza de trabajo” que impulsará el plan propuesto por Biden para impulsar la economía, en el que destinará más de un billón de dólares para la construcción de obras de infraestructura.

Tratar de vender una gran reforma migratoria no tendrá mucho sentido. El plan de Biden irá por etapas, se ajustará según las condiciones y justo en este momento la mayor prioridad en Estados Unidos y en el mundo es combatir la inflación, reducirla al mínimo posible.

Con una economía en pleno empleo (3.6 por ciento de desempleo, históricamente bajo), hay prioridades en el gigante mundial, lamentablemente un supuesto plan anti-inflacionario con tufos del siglo pasado no es lo mejor.

MÁS NOTICIAS:

Comentarios