Tras repartición de plurinominales, así se compone la nueva Cámara de Diputados
A pesar de que en los comicios del 6 de junio pasado los partidos contrarios a Morena obtuvieron el 52.2% de los sufragios, en la Cámara baja solo tendrán el 44.4% del total de esa soberanía.
La sexagésima quinta legislatura de la Cámara de Diputados, que iniciará funciones desde el próximo 1 de septiembre, hasta el último día de agosto de 2024, tendrá un equilibrio político mucho más acorde con la pluralidad de la sociedad mexicana, al contar con 222 diputados de oposición, incluyendo a los 23 de Movimiento Ciudadano (MC), en tanto que Morena y sus aliados, los partidos del Trabajo (PT) y Verde Ecologista de México (PVEM), mantendrán una mayoría de 278 legisladores.
Luego de que el Instituto Nacional Electoral (INE) asignó -de manera definitiva- los diputados plurinominales que les corresponden a cada partido político, la representación cameral queda de la siguiente forma: Morena, el PT y el PVEM contarán con el 55.6% del total de la Cámara baja, en tanto que toda la oposición tendrá el 44.4% de los legisladores.
Si consideramos que en las pasadas elecciones del 6 de junio Movimiento Ciudadano no participó en el bloque opositor que conformaron los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD), la fuerza de estos últimos tres institutos políticos representa el 39.8% de los diputados, en tanto que MC por sí mismo posee el 4.6% de los asambleístas.
En cuanto a los diputados plurinominales, el INE le asignó al PAN 41 legisladores, el PRI tendrá 40, el PRD 8 y MC 16. A su vez, Morena contará con 76 diputados de representación proporcional, el PT 7, y el PVEM 12. Sumando en total los 200 legisladores de esta categoría, de los cuales 100 son mujeres y 100 son hombres.
Se impone la negociación
De esta forma, el bloque oficialista tiene la fuerza suficiente para aprobar leyes, pues para ello solo se requiere que la mitad más uno de los integrantes de la Cámara baja voten a favor, lo que alcanzan con suficiencia Morena y aliados.
No obstante, el verdadero equilibrio que retorna a la Cámara de Diputados es el que se presentará en la aprobación o rechazo de reformas constitucionales, para lo que se requiere que dos terceras partes de los legisladores voten a favor, lo que Morena solo podrá conseguir si logra negociar y convencer a por lo menos 55 legisladores de la oposición.
Estos cálculos serán necesarios si los 500 diputados se presentan en las sesiones en las que se vayan a discutir reformas a la Constitución, pero debemos considerar que la misma carta magna establece que para ser reformada, además del cuórum legal de 251 diputados, se requiere el voto de las dos terceras partes de los legisladores presentes.
Es decir, si llegaran a faltar 48 diputados de la oposición, Morena, el PT, y el PVEM, junto con MC, lograrían la mayoría calificada con 301 diputados, estando en el pleno solo 451 legisladores.
Por eso en esta nueva legislatura es tan necesaria la presencia puntual de la oposición, porque en las urnas los ciudadanos se manifestaron para que el partido gobernante no cuente con la mayoría calificada en la Cámara baja, tal y como ocurre desde 2018 en el Senado, donde Morena ha tenido que negociar, principalmente con el PRI, para sacar adelante las 18 reformas constitucionales registradas hasta ahora en la actual administración.
Sistema perfectible
Por otro lado, es importante destacar que, al igual que en la legislatura iniciada en 2018, que está a punto de concluir, lo que las oposiciones obtienen en las urnas no se refleja del todo en las curules de la Cámara de Diputados.
A pesar de que en los comicios del 6 de junio pasado los partidos contrarios a Morena obtuvieron el 52.2% de los sufragios, en la Cámara baja solo tendrán el 44.4% del total de esa soberanía.
En contraste, mientras Morena y aliados lograron el 47.8% de la votación nacional, desde el 1 de septiembre próximo representarán al 55.6% de los diputados.
Es decir, aunque PRI, PAN, PRD y MC consiguieron -con los votos ciudadanos- una mayoría electoral, seguirán siendo minoría en la Cámara baja, mientras que el bloque oficialista, a pesar de que no obtuvo ni la mitad de los sufragios totales, constituye una mayoría simple en la nueva legislatura.
Esta disparidad se explica debido al reparto de diputados plurinominales, cuyas fórmulas tienden a favorecer al partido gobernante. Sin embargo, esto no significa que se requiera la eliminación de los diputados de representación proporcional, pues estos cumplen la función de incorporar a las minorías electorales en la Cámara baja.
En realidad, los ajustes deben hacerse en el límite de sobrerrepresentación, a fin de que las minorías electorales no se conviertan en mayorías legislativas que no expresan del todo la voluntad ciudadana depositada en las urnas.
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Surya Palacios Periodista y abogada, especialista en análisis jurídico y de derechos humanos. Ha sido reportera, conductora de radio y editora.