Buscador
Ver revista digital
México

La violencia política contra las mujeres: lo que los partidos olvidan

06-03-2018, 10:25:02 AM Por:
© Depositphotos

La violencia política contra las mujeres sigue pasando prácticamente inadvertida en nuestro país. ¿Qué podemos hacer ante esta situación que debilita la democracia?

Por: Fernanda Salazar Mejía*

La violencia política de género sigue pasando prácticamente inadvertida en nuestro país, a pesar de la evidencia que existe  – en todo el mundo – sobre el impacto que tienen las amenazas, intimidaciones, agresiones físicas y psicológicas, y la discriminación político-económica, para limitar la participación de las mujeres en la vida pública e inhibir la agenda de igualdad y derechos de las mujeres. La tipificación de este fenómeno como delito penal, quedó inconclusa en la Cámara de Diputados.

Aunque a primera vista las cifras reflejan un avance en la participación de las mujeres en administraciones públicas locales, en 2017 sólo hay 14% de presidentas municipales y jefas delegacionales. Actualmente, solo hay una gobernadora en el país y, para las elecciones de este año, solo se han registrado candidatas mujeres a esa posición en la Ciudad de México, Puebla, Tabasco y Guanajuato. La única candidata mujer a la Presidencia de la República, lo es por la vía independiente.

Si bien el Reporte Global de Brecha de Género del Foro Económico Mundial ubica a México en el lugar 34 de 144 países en “empoderamiento político”, este documento solo considera las cifras de representación en el congreso nacional. Por su parte, el Estudio sobre Igualdad entre Mujeres y Hombres en Materia de Puestos y Salarios en la Administración Pública Federal 2017, de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, devela que del 53% de los puestos ocupados por mujeres, sólo 36.4% son mandos medios y superiores. Estas cifras ponen sobre la mesa la pregunta de por qué no hay más mujeres en puestos de decisión. La respuesta – muy probablemente – se encuentra en la violencia política contra las mujeres y en fenómenos como el famoso “techo de cristal”.

¿Cuál es nuestra responsabilidad social ante esta situación que debilita la democracia?

  • Visibilizar: Debemos detectar, cuestionar y detener aquellas estrategias político-electorales, que fomenten o consientan el uso de herramientas o recursos de comunicación basados en la violencia política contra las mujeres, que dañan la democracia y los derechos humanos de la mitad de la población. Visibilizar el doble discurso de los partidos, es crucial.
  • Amplificar: Crear dinámicas para darle voz a las mujeres dentro de la política y a las víctimas de violencia política de género. En ello, los medios de comunicación, los partidos políticos y las prácticas de sororidad, sin importar la filiación partidista, son fundamentales.
  • Denunciar: A falta de una legislación clara, existe el Protocolo para Atender la Violencia Política contra las Mujeres. Entre 2012 y 2016, la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade) recibió 156 denuncias por casos de violencia política contra las mujeres, con el mayor repunte en 2015 y 2016.

Por el bien de nuestra democracia y dado el tamaño de la elección que estamos por vivir, es fundamental la participación de la ciudadanía y el compromiso de los competidores, institutos políticos y autoridades nacionales y locales, para la prevenir, eliminar y sancionar la violencia política contra las mujeres.

*Fernanda Salazar es socia de Auris Estrategia y Comunicación, especialista en comunicación política.

También puedes leer: Este instituto empodera a las mujeres en puestos directivos

autor Equipo de jóvenes periodistas cuyo objetivo es explicar las noticias más relevantes de negocios, economía y finanzas. Nos apasiona contar historias y creemos en el periodismo ciudadano y de servicio.
Comentarios