¿La inteligencia artificial puede bajar la inflación? Este banco cree que sí
La inteligencia artificial podría cambiar incluso conceptos económicos que por siglos han estado escritos en piedra.
La Inteligencia Artificial (IA) irrumpió en la humanidad este año de tal manera que empieza a marcar un precedente y ubicarse dentro de los momentos históricos que vive el mundo en este siglo.
Algunos de los grandes pensadores de nuestros tiempos han considerado que la IA estará llamada a ser una auténtica revolución y, por lo tanto un momento histórico, similar a la registrada con la aparición de la imprenta o la Revolución Industrial.
Los “siete magníficos”
La IA es tan relevante que, bajo su batuta, los llamados “siete magníficos” de Wall Street viven momentos de bonanza en el mercado, en momentos en los que otros emisores de la llamada “economía clásica” vuelvan bajo.
Amazon, Alphabet (Google), Apple, Meta, Nvidia, Microsoft y Tesla, tienen un desempeño singular en el mercado de valores, destacando las ganancias de Nvidia con un beneficio de más de 120 por ciento en el primer semestre del año.
Todas estas emisoras, estos “siete magníficos” tecnológicos, están en una carrera comtrarreloj por el dominio de la inteligencia artificial en sus productos y el acaparamiento de un mercado que, desde luego, vale miles de millones de dólares.
Estas emisoras están consolidándose cada día más entre las más valiosas del mercado. De hecho, Apple ya lo es, cuando a finales de junio rebasó los 3 billones de dólares de valor de capitalización en Wall Street. Todo un hito: actualmente se ubica por debajo de dicho nivel, pero se espera que pronto lo vuelva a cruzar.
La IA puede llegar a ser tan relevante en la economía global, que incluso determinaría el rumbo de la Inflación general, según el estudio denominado “IA generativa e implicaciones macro“, desarrollado por el banco UBS.
Este análisis detalla la forma en la que la IA podría ayudar a bajar la inflación; la opinión es una de las primeras que surgen en este sentido, por tal motivo la consignamos para tratar de entender lo que señalan los analistas del banco.
La IA podría bajar la inflación
De acuerdo con el análisis de los expertos de UBS, si en teoría la IA mejora la eficiencia, debería haber como consecuencia una reducción de los precios. Lo anterior debido a que la mejora sustancial de la eficiencia puede redundar en mayores márgenes de beneficio empresarial y, por lo tanto, mayor competencia.
Así, con el tiempo los economistas esperarían que muchas de esas ganancias registren mayor competencia en el mercado y, ante más competencia involucrada, se sugiere una menor tasa de inflación.
Pero no sería el único cambio relevante que puede llevar a la inflación a bajar, o cuando menos a incrementar la competencia, con efectos positivos en los precios.
Los expertos también opinan que la IA debería cambiar los precios relativos. Por lo tanto, el valor asignado a ciertos trabajadores o ciertas mercancías puede ajustar ya que la IA hace posible algunas cosas que antes eran antieconómicas.
Así, en este contexto se encuentra también el concepto de mayor volatilidad de los precios individuales.
“Con el tiempo, creemos que la IA puede hacer que el concepto de inflación en toda la economía pierda sentido. La discriminación de precios de primer grado ocurre en una economía cuando a cada cliente se le cobra un precio personal, basado en la comprensión del vendedor y de la disposición a pagar de ese cliente” señalan los expertos del UBS.
“Esto es un concepto antiguo, antes de mediados del siglo XIX, cuando el comercio minorista era un asunto local y los comerciantes conocían a sus clientes personalmente, a diferentes personas se les cobraría diferentes precios”, señalan los expertos del banco.
Pero en un mundo tan cambiante, con muchos más millones que antes y con los mercados globales, es altamente probable que dicho concepto sea aplicado con éxito si se hace con las bases actuales.
Habría consideraciones desde el ingreso del cliente hasta la zona donde vive o su edad, el concepto de inflación dejaría de tener sentido porque cabría la posibilidad de que los factores productivos se guíen por criterios que nunca en los tiempos actuales se han aplicado.
Así, una aplicación de la IA puede identificar más fácilmente la determinación de un individuo de comprar un producto, y evaluar al vendedor su precio diferenciado.
“La IA puede hacer la idea de un precio universal, un concepto cada vez más sin sentido, en nuestra opinión”, dicen los expertos del UBS.
LA IA parece estar llamada a revolucionar el mundo como lo conocemos hoy, todo indica que será tan profunda que podría cambiar incluso conceptos económicos que por siglos han estado casi escritos en piedra.
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