Jóvenes: los afectados por la desocupación laboral
En el Día del Trabajo las políticas públicas deben mejorarse para generar en México y en el mundo justo eso que se celebra
Los jóvenes tienen tasas de desocupación laboral muy elevadas, los programas sociales y la economía en general tienen mucho que hacer para impulsar a este sector de la población que este 1 de mayo, Día del Trabajo, no tiene mucho que celebrar y cuyo horizonte tampoco luce halagador.
La tasa de desocupación de los jóvenes entre 19 y 29 años, es decir, la edad más productiva del ser humano en todos los aspectos, es mucho más elevada que la tasa de desocupación general en la economía; peor aún, al revisar el mismo indicador por género, se observa que las mujeres tienen todavía menos oportunidades laborales que los hombres, en pleno siglo XXI y en un mundo en el que se supone que la inclusión laboral es la constante en todos los países.
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Las cifras duras
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), al cierre de marzo pasado la tasa de desocupación laboral en la economía mexicana fue de 3.6 por ciento de la Población Económicamente Activa (PEA), cifra que por cierto fue la más elevada en 16 meses ya que desde diciembre de 2017 no se reportaba un nivel tan alto en este indicador. En estos 16 meses el piso fue un rango de 3.2 por ciento de la PEA, registrado en octubre pasado.
No obstante, para efectos de comparar “peras con peras”, ocuparemos la tasa de desocupación del cierre de diciembre pasado, ya que ese es el dato más reciente que se presenta para el caso de los jóvenes de entre 19 y 29 años. De este modo, la tasa de desocupación general de la PEA en diciembre pasado fue de 3.5 por ciento. En contraste, este mismo indicador para el grupo de edad antes señalado fue de 5.81 por ciento, la única buena noticia consiste en que este mismo indicador resultó inferior a la tasa previa del cierre del tercer trimestre del año cuando se ubicó en 6.05 por ciento, pero no deja de ser una lectura muy elevada con respecto a la tasa general en la economía.
Es decir, la tasa de desocupación de los más jóvenes en edad de un trabajo formal resulta ser 2.26 por ciento superior a la tasa general, lo que significa una diferencia muy alta, son varios puntos arriba y eso para fines estadísticos es demasiado.
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Desocupación por géneros
Al revisar las tasas de desocupación por géneros las malas noticias siguen, sobre todo para uno de los sectores más vulnerables de la población y al que las políticas de inclusión supuestamente lo ha insertado en la modernidad y evitado todo tipo de discriminación.
Así tenemos que la tasa de desocupación entre los jóvenes de 19 a 29 años del género masculino es de 5.34 por ciento, inferior a la tasa general del segmento de la población estudiada y ubicada en 5.81 por ciento, aunque de cualquier manera muy superior a la tasa general de la PEA.
En contraste, la tasa de desocupación de las mujeres de entre 19 y 29 años es de 6.59 por ciento, no está entre las más altas de los últimos años ya que esta lectura ha llegado a ser de hasta 7.99 por ciento en 2016, pero no deja de ser una lectura muy elevada con respecto a la PEA y frente a sus pares masculinos.
Muchos factores inciden para que los jóvenes mexicanos tengan altos niveles de desocupación; de entrada, se inserta en la corriente mundial. Sin embargo, también forma parte de la problemática nacional que no hemos podido responder por décadas, así como ahora este grupo enfrenta el grave problema del desempleo, generaciones anteriores han padecido el mismo mal. En el día del trabajo mucho debe hacerse por mejorar las políticas públicas para generar justo eso: trabajo.
