Así inicia el juicio por narcotráfico en contra de Genaro García Luna
De ser encontrado culpable en una Corte de Nueva York, el exfuncionario mexicano podría pasar el resto de su vida en prisión.
Es un hombre de 54 años que comparecerá en una sala de la Corte del Distrito Este de Nueva York vistiendo traje, corbata y zapatos negros, y no con el uniforme color naranja que debe portar en todo momento durante sus días en reclusión: Así dará inicio este martes el esperado juicio por narcotráfico en contra de Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública de México.
Se trata del primer proceso penal al que es sometido, en Estados Unidos, un exfuncionario mexicano de primer nivel. Sobre él pesan tres cargos por conspiración internacional para distribuir cocaína, uno por participar en una empresa criminal, y el quinto por hacer declaraciones falsas ante una autoridad estadounidense, tras su detención en 2019.
Estos delitos ameritan una pena mínima de 20 años de prisión, aunque el fiscal acusador, el doctor en derecho Breon Peace, pretende conseguir que García Luna sea condenado con la máxima sanción de cadena perpetua, por presuntamente haber recibido sobornos de dos carteles de la droga, colaborando con estos en el envío de cocaína a la Unión Americana.
El juez del caso, Brian M. Cogan, quien también estuvo a cargo del juicio en contra de Joaquín Guzmán Loera, el “Chapo” Guzmán, ha concedido dos de las peticiones que recientemente solicitó el también extitular de la Agencia Federal de Investigación (AFI). Por un lado, su defensa podrá introducir en las sesiones del proceso seis computadoras portátiles, igual número de teléfonos celulares, un iPad, cargadores para estos dispositivos, y un adaptador HDMI.
A su vez, el togado autorizó que García Luna vistiera, durante los dos meses que se prevé durará el juicio, dos trajes azul marino, dos camisas blancas, y un número igual de camisas color azul claro, junto con tres corbatas a juego, además de un par de zapatos negros, un cinturón, cuatro pares de calcetines y cuatro camisetas interiores de color blanco.
El acusado solo podrá usar estas prendas cuando se encuentre en la Corte, y no en el Centro de Detención Metropolitana de Brooklyn, donde se encuentra recluido a la espera del inicio y conclusión de su juicio.
El exservidor público mexicano es señalado por ayudar a distribuir en Estados Unidos aproximadamente 52,845 kilos de cocaína, debido al presunto contubernio que mantuvo con los carteles de Sinaloa y de los hermanos Beltrán Leyva, según la hoja del veredicto, cuya copia posee ALTO NIVEL. Este es el documento que deberán llenar los 12 jurados que serán responsables de determinar si Genaro García Luna es culpable o inocente.
Dificultades para la defensa
Desde que Genaro García Luna fue detenido en 2019, su defensa, que dirige el abogado Cesar de Castro, sabe que será muy difícil obtener un veredicto que exculpe a su cliente.
El equipo que asesora al exfuncionario se integra en total por seis litigantes, quienes han perdido la mayoría de las mociones presentadas en la Corte, empezando por la solicitud de libertad bajo fianza que le fue negada en marzo de 2020.
Un mes antes de esa fecha, García Luna estaba dispuesto a pagar una caución de un millón de dólares, la cual luego aumentó a dos millones mediante garantías que terceras personas le habían proporcionado, tras admitir que solo poseía bienes valorados en 1.2 millones de dólares.
La Fiscalía pidió entonces que se le negara la libertad debido a la posibilidad de huida, lo cual fue confirmado por el juez. Este antecedente ha hecho que De Castro se queje constantemente de la Fiscalía, a la que acusa de parcialidad, y de pretender introducir en el juicio pruebas que no son relevantes y que, por el contrario, podrían manipular al jurado.
No obstante, Cesar de Castro reconoce que el exsecretario de Seguridad Pública “aprovechó sus conexiones con el gobierno” mexicano para desempeñarse -de manera lucrativa- en el sector privado, al concluir su gestión.
Pero “esta transición común del sector público al sector privado”, dijo el defensor en el más reciente documento dirigido al juez Brian M. Cogan, nada tiene que ver con la acusación que sostiene la Fiscalía, instancia que dice contar con pruebas de los sobornos del narcotráfico que García Luna habría aceptado mientras era funcionario.
Miles de documentos en contra
De su lado, el fiscal Breon Peace dará cuenta en el juicio de más de 3,500 documentos probatorios en los que -asegura- se probará la complicidad de García Luna con las bandas dedicadas al trasiego de drogas. La Fiscalía describe al mexicano como un hombre que “utilizó su posición oficial para ayudar al cartel de Sinaloa”, a cambio “de decenas de millones de dólares” en sobornos.
En ese tenor, no todas las sesiones del juicio serán públicas y con presencia de la prensa, pues -tal y como ocurrió en el proceso en contra del “Chapo” Guzmán- el juez Cogan puede ordenar, a petición de la Fiscalía, que algunas audiencias se desahoguen a puerta cerrada, debido a la naturaleza de las pruebas, que podrían involucrar a otros políticos mexicanos.
En julio de 2022, Genaro García Luna acusó al presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, de mantener una política conciliatoria con el narcotráfico. Al intentar eliminar las pruebas en su contra, el extitular de la AFI apuntó que el actual gobierno federal “adoptó un enfoque más conciliador para lidiar con los cárteles” del narcotráfico, en contraste con “la guerra contra las drogas” en la que participó el acusado cuando era secretario de Estado.
Esta línea argumentativa, en la que se destaca la colaboración que García Luna prestó -desde el gobierno mexicano- a las autoridades estadounidenses en el combate al narcotráfico, será uno de los ejes de su defensa, un enfoque que podría estar acompañado de candentes revelaciones con las que se explicaría, por ejemplo, el conocimiento o ignorancia del expresidente Felipe Calderón sobre las actividades que desarrolló su subordinado.
Además del juicio en Estados Unidos, en México, hay varias órdenes de aprehensión en contra de Genaro García Luna, a quien se le acusa de uso indebido de atribuciones y facultades, asociación delictuosa y enriquecimiento ilícito. Además, el Ministerio Público federal lo investiga por el delito de introducción ilegal de armamento a México, en el caso “Rápido y Furioso”, de acuerdo con la Fiscalía General de la República.
La semana pasada, ALTO NIVEL dio a conocer que la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda de México (UIF) también acusó a García Luna, desde 2021, de haberse robado del gobierno al menos 250 millones de dólares, recursos que el exservidor público habría usado para adquirir y mantener una sofisticada empresa de lavado de dinero.
Surya Palacios Periodista y abogada, especialista en análisis jurídico y de derechos humanos. Ha sido reportera, conductora de radio y editora.