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Asesinato de John F. Kennedy: nuevos cables revelan datos de Lee H. Oswald en México

22-11-2023, 8:57:57 AM Por:

A 60 años del asesinato de JFK, los documentos desclasificados en 2023 vuelven a poner en la mira el viaje que Oswald hizo a nuestro país, dos meses antes del magnicidio.

Cuatro hombres de origen cubano radicados en Florida, en apariencia turistas, visitaron -en septiembre de 1963- a un joven estadounidense que se alojaba en la habitación 18 del “Hotel Del Comercio” en la Ciudad de México. Hoy, sesenta años después, nuevos cables desclasificados revelan que el huésped con el que se reunieron era Lee Harvey Oswald, el hombre que pasó a la historia por ser el autor del homicidio del presidente de Estados Unidos John F. Kennedy.

Los documentos, en los que se detallan varias reuniones públicas entre los cubanos y Oswald, han sido desclasificados en 2023 por la administración del presidente Joe Biden. Son reportes elaborados por la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA, por sus siglas en inglés) al interrogar a por lo menos tres mexicanos que fueron testigos de esos encuentros.

Ernesto Lima Juárez, un contratista que en esa época vivía en Tamaulipas, explicó que uno de los cubanos era “un hombre blanco, de entre 55 a 56 años de edad, de 1.76 metros de altura, de complexión delgada y pelo entrecano”, apunta uno de los cables desclasificados cuya copia posee ALTO NIVEL.

El interrogado aclaró que no tuvo ninguna asociación con los cubanos, aunque uno de sus amigos, de nombre Francisco Morales, sí se tomó unos tragos con ellos en una o dos ocasiones. Según este testimonio, las reuniones sostenidas por Lee Harvey Oswald con los cubanos “parecían ser de naturaleza social”.

Tras el homicidio del presidente Kennedy, ocurrido el 22 de noviembre de 1963 en Dallas, Texas, la CIA realizó una exhaustiva investigación sobre el viaje de Oswald a nuestro país 57 días antes del magnicidio. Los pormenores de esa visita se dieron a conocer parcialmente hace un par de décadas, también a partir de cables desclasificados.

Lee Harvey Oswald, entonces de 24 años, no vino a México por placer, su intención era obtener en el Consulado de Cuba una visa de tránsito para viajar a la isla, y desde ahí trasladarse a la Unión Soviética, para lo que también acudió a la Embajada de esa nación hoy desaparecida.

En ambos trámites fracasó, aunque al llevarlos a cabo tuvo contacto con al menos 35 personas que luego fueron entrevistadas por la CIA. A esos testimonios se añade la información proporcionada a esa Agencia por la Dirección Federal de Seguridad (DFS) mexicana, dependencia de la Secretaría de Gobernación que realizó varios arrestos para poder obtener las declaraciones de quienes trataron con Oswald.

Exiliados cubanos, mafia y mercenarios

Otro de los nuevos cables desclasificados relata los pormenores de una reunión que habría sostenido en 1969 el entonces presidente de Cuba, Fidel Castro, con “un grupo de radicales” estadounidenses.

El informante, identificado como L/1, revela que en el encuentro el mandatario “habló con ellos por dos horas acerca de que un solo asesino no podría haber matado a Kennedy”.

Agrega que “Castro ordenó una recreación del crimen, utilizando a sus mejores tiradores, y ellos no pudieron duplicar lo que se supone hizo Lee Harvey Oswald por sí mismo” en solitario.

L/1 también le dijo a la CIA que tres grupos estuvieron involucrados en el asesinato del presidente John F. Kennedy: “Un grupo de cubanos, un grupo de “mafiosos” y un tercer grupo de mercenarios. El tercer grupo incluyó a un hombre con nombre griego”.

No es la primera vez que se menciona la posibilidad de que el homicidio de Kennedy haya sido un complot en el que participaron varios de los enemigos que tenía el presidente estadounidense. Se trata de una hipótesis que incluso fue presentada en un juicio, en 1966, por el fiscal de Nueva Orleans Jim Garrison.

Sin embargo, las tres investigaciones oficiales que realizó el gobierno de Estados Unidos concluyeron que Lee Harvey Oswald fue el único asesino, quien a su vez fue privado de la vida por Jack Ruby, dos días después de los trágicos hechos, el 24 de noviembre de 1963.

Reunión con estudiantes

Entre los 2,672 documentos desclasificados en este año también se encuentra un cable en el que un informante, de origen estadounidense, le narra a la CIA que un amigo conoció a Oswald en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

“El describió a Oswald como “raro” e “introvertido”, una persona que obviamente tenía complejos y problemas”, se afirma. La fuente le dice a la CIA que Lee habría acudido a la Facultad de Filosofía de la UNAM en busca de estudiantes procastristas, quienes “podrían ayudarlo a persuadir a la Embajada de Cuba para que le otorgaran una visa”.

La CIA le había seguido la pista a Oswald desde 1959 aunque, inmediatamente después del magnicidio, la Agencia dijo no contar con información de quien -a la postre- se convirtió en uno de los personajes más enigmáticos de la guerra fría.

Hoy sabemos que en su viaje a México visitó, además de la legación diplomática y consular de Cuba, la Embajada de la Unión Soviética, donde charló con el oficial de la KGB, Valeriy Vladimirovich Kostikov, quien ante el gobierno mexicano estaba acreditado como vicecónsul y no como espía.

Hasta ahora, no se sabe con certeza si era real que Lee Harvey Oswald quería regresar a la Unión Soviética a través de Cuba, viajando a la isla desde México. El magnicida había vivido en la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas entre 1959 y 1961, donde incluso renunció a su nacionalidad estadounidense.

Presuntamente arrepentido, y casado con Marina Nikolayevna Prusakova, logró recuperar su pasaporte y regresar a la Unión Americana, para enseguida participar en el “Comité Juego Limpio para Cuba”, un grupo que apoyaba a la Revolución cubana. Todas estas contradicciones no han podido explicarse del todo 12 lustros después, ya que la CIA aún tiene miles de documentos que se niega a desclasificar.

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autor Periodista y abogada, especialista en análisis jurídico y de derechos humanos. Ha sido reportera, conductora de radio y editora.
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