Estos son los celulares que emiten mayor radiación en el mundo
Un estudio de la Oficina Federal Alemana de Protección Radiológica enlistó los celulares que emiten mayor radiación. Aunque no hay evidencia lo suficientemente sólida para relacionar la radiación emitida por celulares con efectos en la salud, no está de más tomar ciertas precauciones.
En el año 2011, casi el 75% de la población mundial contaba con un teléfono celular; para 2015, la cifra de móviles en el mundo casi igualaba la de personas –7 mil millones–; hoy es casi seguro que la población mundial ha quedado rezagada por el número de celulares.
El dato es tan abrumador como irrelevante y casi obvio. Sin embargo, la Oficina Federal Alemana de Protección Radiológica ha vuelto a poner el tema sobre la mesa con su más reciente estudio: “Los Celulares que Emiten Mayor Radiación”.
Las marcas chinas encabezaron este conteo –reconocido como el más especializado en el ramo– con nueve de las diez primeras posiciones.
Sólo la finlandesa Nokia se atravesó en el camino del listado poblado por modelos de las marcas Xiaomi, OnePlus y Huawei.
Puedes encontrar más información sobre el estudio en la página de Statista.
Los resultados han vuelto a poner la mira en los celulares de hechura china, tras las recientes advertencias del FBI de evitar las marcas ZTE y Huawei por, supuestamente, funcionar como herramientas de espionaje para el gigante asiático.
Por otro lado, la radiación en teléfonos móviles no debe hacer pensar a nadie que se encuentra en un pequeño Chernóbil por dormir cerca del teléfono o llevarlo durante todo el día en el bolsillo.
“La radiación electromagnética se clasifica en dos tipos: ionizante (rayos X, radón, entre otros) y no ionizante (radiofrecuencia, frecuencia baja en extremo o frecuencia eléctrica”, detalla el Instituto Nacional de Cáncer de Estados Unidos en su estudio “Teléfonos y el riesgo de cáncer”.
¿Riesgo de cáncer por los celulares?
Mientras la radiación ionizante, o de alta energía, se ha comprobado como un factor dañino que aumenta el riesgo de padecer cáncer, la radiación no ionizante no cuenta con ningún estudio que respalde algo similar.
“Muchos estudios han examinado los posibles efectos para la salud de la radiación no ionizante procedente de radares, hornos de microondas, teléfonos celulares y otras fuentes, pero no existe evidencia firme de que aumente el riesgo de cáncer”, detalla el estudio de la institución estadounidense.
La energía de radiofrecuencia que proviene de teléfonos móviles y otras fuentes no causa ningún daño al ADN que pueda conducir al cáncer.
Incluso, se han realizado estudios sobre los cambios en el metabolismo de la glucosa tras el uso de dispositivos móviles y no se llegó a alguna conclusión determinante que alertara a los científicos.
Hasta ahora, el único efecto biológico que se conoce sobre la influencia de energía de radiofrecuencia es el calentamiento del tejido.
Tras una serie de estudios que parten desde 2011 y una diversidad de universos a las que se han aplicado, las conclusiones de la American Cancer Society deja la puerta de las conclusiones demasiado abierta.
“La ACS declara que la clasificación de la IARC significa que podría haber algún riesgo de cáncer asociado con la energía de radiofrecuencia, pero la evidencia no es suficientemente sólida para considerarse causal y necesita que se investigue todavía más”, se lee en sus recomendaciones.
Como una forma de prevenir cualquier riesgo no reconocido hasta ahora, o de mantenerse seguro en caso de sentir algún temor al respecto, la ACS sugiere utilizar manos libres y limitar el uso de teléfonos, principalmente en niños.
Cabe destacar que, pese a no haber una evidencia tangible del daño que puede provocar este tipo de energía, la Oficina Federal Alemana de Protección Radiológica sí cuenta con una limitante establecida de la tasa de absorción específica de radiación no ionizante: .60 vatios por kilogramo.
El Xiaomi Mi A1, que encabeza el listado, prácticamente triplica esa medida, y de los primeros 16 puestos, absolutamente todos la duplican, incluyendo los modelos de iPhone 7, 8 y 7 Plus.
La radiación del celular proviene de las antenas, que son la fuente de energía de los dispositivos móviles, por lo que mantener ésta lejos de la cabeza es la mejor prevención a un riesgo que, de cualquier manera, es muy incierto hasta ahora.
Basta recordar que los números de cáncer cerebral se han mantenido en una línea muy estable de la década pasada a la presente, cuando se detonó masivamente el uso de la telefonía móvil, de acuerdo con el mismo Instituto Nacional de Cáncer.
Si bien las investigaciones pueden mostrar nuevas realidades en un futuro, lo único demostrable del teléfono celular es su papel como distractor de las responsabilidades diarias para más de una generación, que tiene a muchos en redes sociales durante horas y leyendo noticias como ésta.
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