¿Malos tiempos para los ingresos publicitarios? Así es la iniciativa de Google que puede afectarlos
Privacy Sandbox, de Google, está destinado a abordar la preocupación que la actual publicidad programática tiene para la privacidad de los usuarios.
Como fichas de dominó, este miércoles las acciones de las principales emisoras del sector tecnológico cayeron y extendieron lo que ha sido un inicio de año “de pesadilla” para este sector.
El contexto geopolítico, que tiene a los mercados en vilo por lo que suceda en la frontera de Rusia con Ucrania, diluyó en parte el efecto y la noticia sobre la caída de las tecnológicas, pero sus consecuencias podrían ser de largo plazo.
Alphabet, la matriz de Google, hizo comentarios sobre planes que sugieren “malos tiempos” para los ingresos publicitarios online, uno de los pilares de la industria. Estos comentarios se presentan sólo meses después de que una medida implementada por Apple, le pegara de lleno a la industria.
Sucede que la matriz de Google advirtió que llevaría su iniciativa denominada Privacy Sandbox a los teléfonos Android; dicho cambio podría limitar el rastreo de datos en múltiples aplicaciones.
¿Qué es la iniciativa Privacy Sandbox?
Poco antes de la pandemia, en octubre de 2019, Google presentó una iniciativa a la que denominó Privacy Sandbox, con ella pretende desarrollar un conjunto de estándares abiertos que mejoren fundamentalmente la privacidad en la web, al tiempo de abogar por un Internet gratuito, abierto y democrático a través de anuncios digitales.
Actualmente muchas webs en Internet dependen de los anuncios en línea como su principal fuente de ingresos para gestionar y mantener su contenido abierto y de libre acceso para todos.
Pero Google asegura que con la evolución de la publicidad online las tecnologías publicitarias dirigidas se han vuelto demasiado invasivas debido a prácticas intrusivas y enfoques con los que se pretende mostrar anuncios personalizados a los usuarios. Esto plantea serias preocupaciones por el derecho a la privacidad entre los usuarios de Internet.
La iniciativa consiste en nuevas aplicaciones que permitirán a los anunciantes mostrar anuncios dirigidos, pero sin tener acceso directo a los datos personales de los usuarios, como lo hacen ahora.
Con el cambio, los anunciantes pueden acceder al navegador para obtener detalles sobre un usuario que accedió a un dominio; en este caso el navegador Chrome responderá a estas consultas con información general lo suficientemente detallada como para que el anunciante tenga una idea sobre el usuario. Pero no demasiado detallada como para romper el anonimato del usuario.
El nuevo Privacy Sandbox está destinado a abordar la preocupación que la actual publicidad programática tiene para la privacidad de los usuarios. Para ello se ofrece a los anunciantes una forma de mostrar anuncios dirigidos (y más rentables), sin recurrir a prácticas que violen la privacidad y que no se pueden bloquear, como las huellas digitales.
Por ejemplo, en lugar de las populares cookies, Google espera poder instituir un nuevo conjunto de soluciones técnicas para varias cosas para las que se utilizan actualmente las cookies. Con ese fin ha propuesto un montón de nuevas tecnologías que pueden ser menos invasivas y molestas que las cookies de seguimiento. El plan se trata de toda una revolución en la publicidad digital, y como en cualquier revolución, hay costos que pagar.
La caída
2022 no es el mejor de los inicios para la industria tecnológica en general, cuando menos para los gigantes del sector, que viven momentos de bajo vuelo en los mercados de valores.
Tras los comentarios de Alphabet, las acciones de Meta Platforms cayeron 2.9 por ciento, con este descalabro el título de la matriz de Facebook acumula una caída superior al 35 por ciento en lo que vamos de este año.
Por su parte el título de SNAP, otra importante tecnológica, se tropezó 3.9 por ciento. Los títulos de Twitter no pudieron evitar un mal día al caer 3.5 por ciento, Pinterest perdió menos, pero tampoco pudo salvar la sesión al retroceder 1.0 por ciento. En este contexto negativo, las acciones de Digital Turbine, la plataforma de medios a la carta, llegó a desplomarse hasta 11 por ciento y al final del día registró una caída de 9.39 por ciento.
Si algo es constante, permanente, y parece que en estos tiempos también muy radical, ese es el cambio. El sector tecnológico fue sacudido ayer por comentarios que quizás en el futuro representen miles de millones de dólares, para bien o para mal. El mundo sigue moviéndose.
MÁS NOTICIAS:
- Peso interrumpe tres semanas de caídas frente al dólar
- 10 tablets baratas y buenas para estudiantes
- Sistema de Ahorro para el Retiro, ¿qué es la firma electrónica SAR?
- Xóchitl Gálvez promete crear 5 millones de viviendas si llega a la presidencia
- ¿Cuál es la historia de IKEA? La marca de muebles creada por un joven de 17 años
