¿Por qué no debes revelar cuánto ganas en una entrevista de trabajo?
El reclutador o futuro jefe te insistirá en que le des esa información, pero puedes manejar la presión con estas respuestas.
Durante una entrevista de trabajo, de alguna u otra forma el reclutador o futuro jefe te hará esta pregunta: ¿Cuál es tu compensación actual?/ ¿De cuánto es tu salario?/, o puede agregar ¿Cuál es tu compensación esperada?
Esta pregunta se nos hace tan normal que la damos por descontado y entregamos esta información al entrevistador. Pero tal vez estamos en un error. Nuestro salario actual no es necesario ni determinante para obtener un nuevo trabajo.
Al menos esto es lo que dice Marc Cenedella, CEO del portal de carrera profesional theladders.com, quien afirma que revelar cuánto ganas no te ayudará a obtener un sueldo más alto; al contrario, puede privarte de conseguir una compensación más alta.
“Compartir tu compensación actual tiende a poner un límite superior o un tope a la cantidad que te pagará tu futuro empleador”, afirma Cenedella en un artículo.
Por ejemplo, si tus habilidades y experiencia son de ‘Nivel 3’, pero tu compensación es de ‘Nivel 2’, si revelas demasiado pronto cuánto te pagan, te puede dejar estancado en ese nivel salarial.
¿Qué pasa si no compartimos esa información? El CEO de Ladders dice que la persona de recursos humanos tiene varias tácticas para qué le digas cuánto ganas o cuánto esperas ganar:
- “¿Cuál es tu salario esperado?”
- “No, de verdad, solo necesito completar este formulario para continuar”.
- “No quisiera hacerte perder tu tiempo, entonces, ¿podrías indicarme cuál es tu rango de compensación deseado?”
- “Oye, ¿puedes hacerme un favor? Necesito indicarle a mi jefe tu rango de compensación. No le gustará si yo no lo hago”.
- “Oye, estás siendo un poco difícil aquí, queremos trabajar contigo, pero necesito saber tu compensación esperada”.
- “No puedo continuar a menos que me digas tu compensación esperada, por lo que podría afectar tu capacidad para conseguir un trabajo aquí”.
Cenedella dice que ninguno de esos pretextos es cierto, los reclutadores no necesitan esos datos para continuar el proceso y no es causa para expulsarte del mismo si no los compartes.
Pero, sobre todo, no deberías compartir información sobre tu salario por tres razones.
Las empresas tienen un presupuesto extra. “Contratar gente no es como ir a una máquina expendedora, poner las monedas correctas y dejar caer su producto en la ranura. Las personas, los trabajos, las situaciones varían. Las empresas siempre tienen un pequeño margen de maniobra para obtener una compensación adicional en función de los precios del mercado”, dice Cenedella.
Las empresas tienen múltiples niveles. Puede que te estén entrevistando para un puesto de asistente de gerente, pero resulta que estás más cerca de un gerente completo en su organigrama, pero si tu sueldo es más bajo, tal vez no obtengas el puesto.
No ha habido tiempo para conocerse. Cuando se convenzan cada vez más de que podrías ser la persona adecuada para el trabajo, se preocuparán menos por cuánto te pagan en tu empresa actual.
¿Qué responder?
Como seguramente esta pregunta aparecerá en algún momento del proceso de selección, el CEO de Ladders propone estas respuestas:
No me siento cómodo compartiendo esa información, pero estoy muy emocionado con este trabajo”.
No estoy seguro de cuál es el mercado, ¿por qué no comparte conmigo su rango de pago y puedo decirle si es demasiado bajo?”
Oh, mi empleador actual es bastante generoso, pero espero con ansias la oportunidad de trabajar con ustedes”.
Disculpa, ¿es esa información requerida? Realmente estoy buscando un lugar que me valore por mis contribuciones y esté buscando pagar lo que ellos creen que es el precio del mercado. ¿Eres capaz de hacer eso?”
Esa es una pregunta muy interesante. ¿Cuánto crees que valdrá alguien como yo en el mercado actual? “
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