Ver revista digital
Economía

Estos son los productos que más suben de precio y vacían tu cartera

31-01-2018, 9:03:38 AM Por:

Desde el gasolinazo de 2017, la inflación ha subido considerablemente y las consecuencias se reflejan en el aumento de precios de la canasta básica y la disminución del poder adquisitivo de los mexicanos.

La inflación ha aumentado los precios de los productos de la canasta básica. El sobrecalentamiento de la economía mexicana, implementado por las autoridades fiscal y monetaria desde 2014 a 2016, ha resultado caro para los consumidores mexicanos, que mes ven disminuir su poder adquisitivo.

Comprar un producto de la canasta básica, un garrafón de agua, un viaje en transporte público, un aparato electrónico o alimentar a una mascota, resulta cada vez más costoso para los consumidores, que desde inicios del 2017 enfrentan una inflación rampante.

Los precios al consumidor subieron 5.51%, en la primera quincena de enero de 2018, el mayor aumento para un mismo periodo desde el 2009. La cifra resultó menor al 6.77% del cierre del 2017, un máximo de 17 años, pero esto se debe meramente a un efecto aritmético, debido a la alta base de comparación.

La inflación se encuentra fuera del objetivo del Banco de México de 3 % +/- un punto porcentual, esto es, un mínimo de 2% y un máximo de 4%.

Te recomendamos leer: Los mexicanos vivieron el consumo más caro en 16 años

Precios afectados por la inflación

A inicios del 2017, el aumento de hasta 20% en los precios de las gasolinas y el diesel disparó la inflación. Los productos o servicios que sufren un mayor impacto en sus precios son aquellos que requieren de la gasolina o combustibles como uno de sus principales insumos o bien, aquellos con altos niveles de rotación en los puntos de venta.

Por ejemplo, comprar un kilo de huevo en una tienda de abarrotes en el área metropolitana de la Ciudad de México cuesta 33 pesos cuando el año pasado costaba en promedio 22 pesos.

Producto o servicio Precio 2017 ($) Precio 2018 ($)
Huevo 1 kg 22 33
Bolsa de arroz marca Aurrera 10 13.5
Leche 1lt Santa Clara 16 18.5
Azúcar 1 kg 15 18
Agua embotellada 10 litros Epura 23 27
Obao roll on para hombre 65g 20.2 21.9
Transporte público Estado de México (tarifa mínima) 8 10
Caseta México-Cuernavaca para autos 74 98
Tanque de gas LP de 20kg 280 400
Pentrexyl 500 mg 28 cápsulas 224.09 250
Fuente: Sondeo en supermercados, tiendas de abarrotes, INEGI y  Capufe.

Un cartón de leche de un litro de la marca Santa Clara cuesta 18.50 pesos en supermercados como Walmart, cuando el año pasado costó en promedio 16 pesos.

“El primero y más afectado fue el transporte en general, que es el sector que utiliza intensivamente combustible. A partir de ahí todos los sectores y productos que dependen del transporte en gran medida, como empresas que dependen de su flota de camiones para llevar sus mercancías a los puntos de venta”, dijo en entrevista el director de la consultora Triplethree International, Iván Franco.

También puedes leer: Estas son las carreteras más caras de México en 2018

Inflación acumulada anual 2017
Índice o producto Var %
Canasta básica 9.61
Alimentos, bebidas y tabaco 7.92
Frutas y verduras 18.60
Transporte 11.48
Salud y cuidado personal 6.13
Energéticos 17.69
Gas doméstico LP 44.06
Gasolina de bajo octanaje 17.46
Gasolina de alto octanaje 22.62
Fuente: INEGI

Aquellos que tienen alguna mascota también deben gastar más para su cuidado. Una bolsa de arena para gato de 10 kg de la marca Bob se vende en 110 pesos en Walmart, desde 99 pesos del año pasado.

Si la mascota requiere cuidados especiales, el gasto es mayor. Una bolsa de 3.8 kg de alimento de prescripción costó en enero 650 pesos, frente a un precio promedio de 560 pesos de 2017, en tiendas para mascotas. El mercado de alimento balanceado para perros y gatos es uno de los más afectados con la depreciación del peso frente al dólar, ya que gran parte de sus insumos son importados.

Gasolina, el detonante

El gasolinazo del 2017 fue solo el detonador que disparó la inflación acumulada por la depreciación del peso frente al dólar, las bajas tasas de interés y la alta liquidez en la economía mexicana.

El Banco de México mantuvo su tasa de interés referencial en un mínimo de 3% desde 2014 hasta finales de 2015, una tasa baja impulsa el consumo. Pero el banco central la mantuvo en mínimos a pesar de que el peso comenzó a depreciarse en junio de 2014, ante la expectativa de que la depreciación solo era temporal, algo que no comenzó a revertirse sino hasta inicios de 2016.

En tanto, la  base monetaria, esto es, el dinero en poder del público, creció a una tasa promedio de 15.8% de 2014 a 2017, cuando el Producto Interno Bruto (PIB) nominal lo hizo a una tasa de 7.6%. En una economía estable el crecimiento de la base monetaria es cercano al PIB nominal

Una mayor cantidad de dinero en la economía es una medida artificial para generar crecimiento económico, que si no es respaldado, no es sostenible y solo termina en un incremento de precios.

“Esta inflación es un fenómeno monetario porque no hay crecimiento sustentado de precios que se pueda mantener si no existe capacidad de compra, si no  existe liquidez en manos de los consumidores”, comentó en entrevista Alfredo Coutiño, director general de Moody’s Analytics para América Latina.

Explicó que, lo que hizo el banco central desde 2014, fue bombear dinero extra a la economía, lo cual impulsó a la demanda interna; es decir, el consumo y la inversión, más allá de la capacidad productiva de la economía. De esta manera, generó un poder de compra que no estaba sustentado.

Por su parte, el gobierno aprovechó las bajas tasas de interés para aumentar su nivel de endeudamiento, lo que también generó un mayor bombeo de dinero a la economía.

Ante esta situación, el Banco de México comenzó a elevar su tasa de interés referencial, que actualmente se encuentra en 7.25%.

“Ahora la demanda interna está restringida y eso limitará el crecimiento, pero lo hará hasta el nivel que es consistente con la capacidad potencial de la economía que no va más allá del 2.5%. El consumidor enfrenta una tasa de interés de más del doble que la que tenía. ¿Es un problema? No, porque esa es la tasa consistente con la realidad económica mexicana”, dijo Coutiño.

Los especialistas coincidieron en que los precios seguirán ajustándose a la alza este año, ya que además, algunas empresas o negocios aún no han reflejado el aumento que han tenido en sus costos.

Por ejemplo, Víctor, el dueño de una cafetería en la colonia Nápoles, que emplea a cuatro personas, ha visto aumentar el precio de sus insumos hasta en 30%, sin embargo, absorbió estos incrementos durante el 2017 al disminuir su margen de ganancia, algo que ya no hará este año.

“El gasolinazo solo fue una señal, lo que realmente fue el origen fue el sobrecalentamiento injustificado de la economía que ahora estamos pagando”, dijo Franco, quien espera una inflación para el cierre de año de 5%.

Economista-Reportera, escribo sobre política fiscal y monetaria
Salir de la versión móvil