El primer empleo de los grandes empresarios: Así empezaron su fortuna
Todos ellos hoy son grandes empresarios, millonarios y con inversiones en muchos países, pero ¿cuál fue su primer trabajo o cómo consiguieron su primer empleo? Te contamos el origen de algunos de los grandes empresarios del mundo.
Hoy son grandes personalidades del mundo de los negocios, fundadores de algunas de las empresas más famosas y rentables del mundo. Sin embargo, sus inicios fueron muy diferentes. ¿Cuál fue el primer empleo o el primer trabajo que aprendieron los grandes empresarios?
Comenzaron como vendedores de cajas de cerillos, dependientes de tiendas o repartidores de camisas. Todos ellos, con el tiempo, lograron construir grandes empresas que ahora valen miles de millones de dólares. Aquí te decimos cuál fue el primer trabajo de estos grandes empresarios.
Amancio Ortega. Este español, fundador de Inditex, propietaria de marcas como Zara y Bershka, se ha ganado un lugar entre los hombres más ricos del mundo. Sin embargo, sus inicios fueron muy distintos, aunque siempre dentro de la industria textil.
Con solo 14 años comenzó a trabajar como repartidor de la Camisería Gala, en La Coruña. El negocio aún existe, aunque la sucursal donde Ortega comenzó su vida laboral cerró sus puertas en diciembre de 2014. Posteriormente, Amancio Ortega trabajó en el área comercial de comercial de la empresa de confección La Maja, donde conoció a Rosalía Mera, su futura esposa, con quien comenzó a gestar Inditex. En 1975 abrió su primera tienda Zara.
Sam Walton. Abrió su primera tienda en 1945, con sus ahorros como soldado y un préstamo de su suegro. Sin embargo, durante su adolescencia, que transcurrió durante la Gran Depresión, el fundador de Walmart y Sam’s Club fue repartidor de periódicos y vendedor de revistas.
De niño ayudaba a ordeñar las vacas de sus padres y a embotellar la leche excedente para venderla.
Ingvar Kamprad. Pese a tener un patrimonio neto valuado en más de 50 mil millones de dólares, el fundador de IKEA fue conocido por llevar un estilo de vida austero, hasta su muerte en enero pasado. Tenía solo 17 años cuando fundó en Suecia la cadena que revolucionó al mundo del diseño de muebles.
Desde niño, Kamprad era todo un visionario. Comenzó vendiendo cajas de cerillos que compraba al por mayor, lo que le permitía obtener una considerable ganancia manteniendo precios bajos. Con esta premisa continuó con otros artículos como semillas, adornos navideños, postales, carteras y bolígrafos.
Richard Branson. Mucho se ha escrito sobre este extravagante y multifacético empresario, propietario de un gran conglomerado de empresas de los más diversos giros, desde la música a la aviación.
Antes de iniciar con la tienda de discos que dio paso a Virgin Records -su primer gran negocio- Branson fundó la revista Student, donde logró entrevistar a personajes como Mick Jagger , John Lennon y Jean-Paul Sartre. Tenía solo 16 años y logró vender 50 mil ejemplares de su primer número.
Oprah Winfrey. Es, sin duda, la celebridad más influyente de Estados Unidos. No por nada su nombre suena incluso como aspirante a la presidencia de su país. Pero, antes de fundar todo un emporio mediático alrededor de su nombre, Oprah tuvo que andar un largo camino desde una infancia extremadamente difícil.
A los 17 años ganó un humilde concurso de belleza, llamado “Miss Prevención de Incendios”, lo que le valió ser invitada a un programa de radio en Nashville, Tennessee. Como parte del show narró algunas noticias a manera de broma, sin embargo, para sorpresa de todos, lo hizo de forma excelente, por lo que salió de ahí con un empleo fijo en la radiodifusora.
Sin embargo, ese no fue el primer sueldo que cobró Winfrey. Antes trabajó como dependienta en una pequeña tienda de pueblo.
