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Opinión

La industria del capital privado alcanzará su madurez en 10 años

17-07-2019, 9:19:25 AM Por:
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La industria de capital privado ha acelerado su crecimiento, y será dentro de una década cuando podrá alcanzar su madurez

Por María Elena Zúñiga

Luego de la crisis financiera global del 2007-2008, la industria de capital privado en México no ha parado de crecer en la última década. Los incrementos de inversión en este sector de los últimos diez años han sido del 15% anual, debido al apetito de los inversionistas y a la guía de las administradoras de fondos de inversión para encontrar oportunidades de negocios atractivas que generen la máxima utilidad. Datos de la Asociación Mexicana de Capital Privado (Amexcap) señalan que el capital comprometido acumulado es de más de 55,000 millones de dólares (mdd), de los cuales ya se ha invertido más del 43%, es decir, más de 24,000 mdd.

Actualmente operan en México cerca de 180 Fondos de inversión, de los cuales más del 60% son mexicanos. El origen del dinero para la inversión en proyectos productivos ya no es un dato relevante, dado que los especialistas consideran que lo importante es atraer los capitales sin importar su procedencia, los cuales siempre buscan los destinos con las mejores condiciones para participar.

Carlos Mendoza, presidente de la Amexcap, enfatiza que México compite contra todos los países por capital. Los inversionistas indagan dónde hay mejores facilidades y retornos de su dinero y México tiene que ser competitivo en este terreno. Esta justa por los capitales la encabeza Estados Unidos, China y otros países del sureste de Asia y naciones latinoamericanas. En Estados Unidos, por ejemplo, una de cada tres empresas que salen al mercado de valores vienen de un fondo, mientras que en México es una de cada cinco.

El 10% del empleo en Estados Unidos lo generan las empresas que tienen detrás el apoyo de un fondo; en contraparte, en México en los últimos 18 años las compañías vinculadas con el capital privado han creado alrededor del 10% de todos trabajos del país, es decir, más de 1,300,000 empleos, lo cual habla de la capacidad del sector para impulsar las fuentes de ocupación formal, reitera Mendoza.

El representante de la Amexcap subraya que siempre un marco regulatorio y macroeconómico propicio resulta atractivo para los inversionistas y mejora la calificación de riesgo país.  “La inversión se vierte a México en busca de mayor rentabilidad y los gestores de capital de riesgo empiezan a invertir en proyectos visibles con historias de éxito, generando un círculo virtuoso para la economía local”.

El ejecutivo confirma que en todos los sectores donde tiene más presencia el capital privado se ve un fuerte crecimiento (capital emprendedor o venture, capital de crecimiento, bienes raíces e infraestructura). Y si bien el venture es el más joven, ha sido el más dinámico de 2013 a la fecha, al tener comprometidos 1,602 millones de dólares de inversión.

El capital tradicional (de crecimiento) maneja cerca de 12,000 mdd; el de bienes raíces cerca de 21,000 mdd y el de infraestructura más de 17,000 mdd. Este último registrando mucho auge, luego de la apertura del sector energético. “La industria privada, por sí misma, gestiona planea y desarrolla proyectos de infraestructura sin participación pública”.

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Sin embargo, aunque la situación de la industria nacional es favorable, el representante de la Amexcap, que afilia a 125 administradores, indica que entre los inversionistas predominan más los factores de incertidumbre externa que interna. México está insertado en la geopolítica internacional y tiene que aprender a manejar las nuevas variables, como el proteccionismo de Estados Unidos, la renegociación del TLC y su próxima aprobación; las posibles imposiciones arancelarias a productos mexicanos de parte de su vecino inmediato del norte y el conflicto comercial de este con China. Una vez despejados esos indicios externos, Mendoza considera que las empresas del ramo en su conjunto podrían crecer arriba del 15%.

Resulta alentador señalar que, a pesar de que México ha tenido un crecimiento modesto del Productos Interno Bruto (PIB) en los últimos sexenios (2.5% en promedio), los fondos de capital privado han crecido 15% año con año.

Actualmente, lo más importante para los dueños de los capitales es que se ven oportunidades favorables en el futuro del país, gracias al incremento de la presencia del sector privado en la economía, que ya mueve el 90% de la misma. En este sentido, Mendoza señala que el gobierno mexicano tiene que apoyarse en el capital privado, si quiere lograr su meta de crecimiento del 4%.

A nivel nacional, a seis meses de la presidencia de Andrés Manuel López Obrador se ve que este quiere hacer cambios drásticos y rápidos; sin embargo, los motivadores para las administradoras de fondos y los propios inversionistas son que el nuevo gobierno en México respeta la disciplina fiscal y el libre comercio. En particular para los administradores de fondos resulta alentadora la apertura del sistema de ahorro para el retiro para impulsar proyectos productivos, al igual que el crecimiento del ahorro bancario.

En el marco regulatorio del sector que representa la Amexcap se han logrado cosas importantes:  la nueva ley del mercado de valores, el régimen de inversiones para las sociedades de ahorro para el retiro y el programa para impulsar a las empresas llegar al mercado de valores. “Con esos cambios, el ambiente para el desarrollo de nuestra industria es más favorable y la pone en las mismas condiciones de otros países”, comenta Mendoza.

Según el presidente de Amexcap, en los próximos 10 años la industria mexicana podría alcanzar su madurez, logrando una mayor participación en el desarrollo económico nacional.

Gerardo Rojas, socio líder de Deal Advisory en México y Centroamérica de KPMG, opina que México es muy atractivo para la inversión de los fondos de capital privado y también hoy en día las empresas tienen mucho interés en investigar esta opción para financiarse. “La perspectiva de la industria es hacia el alza. Al quitar el ruido político y mediático, resulta alentador que el esquema fiscal no tenga movimientos en los próximos dos años para dar certidumbre a los inversionistas”.

“Aun en momentos de zozobra existe un ambiente propicio para la inversión, porque las personas están más abiertas no solo a atraer capital, sino a compartir sus decisiones estratégicas y gobierno corporativo”, agrega Mendoza. Los inversionistas mantienen un optimismo sobre el desarrollo económico del país, siendo para ellos un parteaguas positivo la apertura de las afores para impulsar proyectos de financiamiento.

Amadeo Valdés, director en Nexxus, indica que hay fondos muy activos para invertir y lo están haciendo en transacciones nuevas. “Para tomar una decisión de inversión, cada oportunidad se evalúa de manera independiente. Se ponderan los riesgos macro y micro del mercado, y de quien ejecuta las estrategias de crecimiento dentro de la empresa”.

Se analizan los indicadores macroeconómicos, como tasas de empleo y desempleo, ingresos disponibles, dentro de otros, y en puntos particulares de la industria se estudia el potencial crecimiento de la empresa en cuestión, su producto y el entorno competitivo en el que se encuentra; por ejemplo, si tiene competencia intensa, qué tan fácil es encontrar un producto sustituto o si es un producto relativamente inelástico. En cuanto al capital humano, es muy importante identificar, entre otras cosas, si tiene las capacidades directivas para ejecutar los planes de crecimiento o desde el fondo pueden apoyarlos reforzando al equipo de gestión.

“Hay fondos de activos alternativos con inversiones/financiamiento enfocados en infraestructura, energía, bienes raíces, deuda y capital privado en cualquier vertical”.

Gerardo Rojas, de KPMG, comenta que la industria de capital privado es muy interesante, por los muchos beneficios que tiene. “México ha sufrido por el impacto geopolítico, pero está en el apetito de los inversionistas”. México y Brasil son los que más atraen a este tipo de inversionistas, después de Colombia.

Cada vez existe un mayor acercamiento entre los inversionistas y las autoridades regulatorias y fiscales, y como valor adicional se cuenta con los CKD, los fibras y otros vehículos que han permitido la captación de capital y explosión en ese tipo de inversiones, dice.

Los CKD son un vehículo en el que el público en general puede hacer una inversión. “Con cada CKD viene el trabajo de promotores, quienes revelan la tesis de inversión para ese instrumento, a fin de que el inversionista sepa dónde está su capital. Los rendimientos de los CKD, por ejemplo, han probado ser superiores a los CETES; por ello, las afores pueden invertir un poco más en esos instrumentos. Además, con la creación de BIVA también se abrieron los mercados para amplitud las alternativas de inversión”.

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De acuerdo con el especialista, los inversionistas de capital privado están muy activos en buscar dónde invertir y en 2019. También sigue su dinamismo cerrando inversiones en sectores agnósticos como: salud, energías renovables y tecnología, lo mismo en bienes raíces, consumo y retail, como alimentos y bebidas y prendas de vestir. “Muchas de las inversiones hoy en día tienen un componente tecnológico”.

Solo en este 2019, el número de operaciones será mayor, en relación al 2018, entre un 12 y 14%, por la tendencia del mercado. Rojas coincide en recalcar que hay optimismo por el crecimiento en la industria sin que sea “mágico”, pues se han puesto los mecanismos para generar la inversión y atraer capitales.

Otro nicho de mercado interesante para los próximos años es el Fintech, el cual ya tiene su regulación; empero, la gran oportunidad está en infraestructura grande, como temas carreteros, plantas de agua, telecomunicaciones, etc. El cual, a decir del experto de KPMG, no ha terminado de despegar y despierta la atracción de los inversionistas.

Gerardo Rojas, de KPMG, señala que hay evolución del mercado local. Hoy en día, la cultura de las empresas es distinta. Están dispuestas a platicar de diferentes fuentes de financiamiento y abiertas a tomar deudas convertibles a capital o capital directo. “Muchas veces no es necesario tener todo el músculo financiero. Ellos mismos pueden apoyarse con alguien más y continuar con la misma estrategia de negocios”.

Las inversiones, actualmente, buscan una compañía y un sector para hacer su portafolio de negocios, sin importar el país de que se trate. “Es alentador que México ya no se endeude y se abran oportunidades para el sector privado”, agrega.

Capital privado, punta de lanza del crecimiento interno

La industria de capital privado es un importante motor de crecimiento para la economía interna, ya que los fondos de las afores se invierten en empresas de tamaño medio para apuntalar su expansión, generando empleo directo e indirecto, consumo y contratación de asesores de temas fiscales y legales y otro tipo de consultorías, que permiten al gobierno mayores ingresos vía la recaudación.

Amadeo Valdés, director en Nexxus, opina que la industria debe ser acíclica y apolítica para que se dedique a gestionar los recursos e invertirlos con socios que desean crecer e impulsar proyectos de crecimiento. En 2018, la compañía cerró su primer fondo de deuda privada, que otorga financiamiento a compañías/proyectos, sin que los socios vendan acciones y/o cedan el control de su negocio. “El asset class de capital o deuda privada es de las pocas inversiones donde los inversionistas pueden generar alfa (el diferencial vs. el retorno o un índice de mercado) en sus portafolios”.

Según el directivo, la industria de capital privado es un motor importante de crecimiento para la economía mexicana, porque los recursos invertidos de las afores e inversionistas, tanto nacionales como extranjeros, han impulsado significativamente la expansión y el crecimiento de empresas medianas en México.[ 

El asset class del capital o de la deuda privada es de las pocas opciones de inversión donde se puede generar alfa.“Los rendimientos en bonos del tesoro o CETES tienen un rendimiento alineado a un riesgo libre de mercado, pero si se buscan rendimientos por arriba de estos, son necesarias las inversiones en este tipo de activo para generarlo –explica Valdés–. Este tipo de activos que gestionamos y administramos en Nexxus es lo que puede permitir a nuestros inversionistas tener rendimientos más altos en sus portafolios”.

Valdés menciona que, todos los días, las administradoras de capital privado revisan oportunidades de inversión, siendo muy profundos en sus análisis, hay oportunidades en muchos sectores, entre ellos bienes raíces, energético, financiero y consumo. “Constantemente estudiamos las propuestas de inversión para diferentes sectores”.

Las compañías con planes de crecimiento acelerados requieren deuda o capital para financiar sus proyectos, lo que les da perspectivas positivas a la industria. “Seguiremos analizando proyectos para impulsar el crecimiento de las empresas. Por ejemplo, hemos visto oportunidades interesantes en compañías que ganan participación de mercado o lanzan productos innovadores”.

Uno de los temas pendientes para potenciar el desarrollo de las administradoras de fondos era el cambio regulatorio en el régimen de las afores, pero ya se está avanzando por el camino correcto.

Amadeo Valdés dice que la industria mexicana de capital privado está sólida y es competitiva con otros países. “Las oportunidades hay que gestionarlas localmente: la industria en Estados Unidos, Asia y Europa está más desarrollada por los tamaños de sus economías, pero el sector en nuestro país va por buen camino. El paso es lento, pero seguro”.

Las perspectivas de la industria son positivas para invertir. “Las oportunidades suenan retadoras pero razonables”.  Solo es importante entender que los modelos de inversión están cambiando de ingenierías financieras, a los enfocados en creación de valor mediante adquisiciones estratégicas, mejoras operativas y la aplicación de estándares de clase mundial. Estos van de la mano de los directivos de las compañías, como herramientas que los ayudan a ejecutar los planes de crecimiento y reforzar las estructuras directivas, cita Valdés.  “La industria está dejando de ser un negocio completamente financiero, para ayudar y enfocar a las compañías promovidas desde un punto de vista estratégico”.

Según Valdés, los CKDS han sido un mecanismo para que las afores inviertan de la mano de administradores de activos alternos, donde no estaban presentes y a los administradores de activos les ha permitido acceder a una base de inversionistas que no tenían antes. Desde su punto de vista estos tienen que perdurar, porque han sido un motor de crecimiento para la industria y generar un círculo virtuoso en la economía.

El caso de Nexxus

Desde su fundación en 1995, Nexxus es una de las principales instituciones administradoras de activos alternativos en México. Nexxus ha levantado y administrado diversos fondos con compromisos de capital por más de $1,500 mdd y es el único administrador de activos alternos mexicano que ha listado seis compañías en los mercados de valores.

A lo largo de su historia, Nexxus se ha asociado con 27 compañías. Ha administrado cinco fondos a través de siete vehículos de capital en México y actualmente administra su primer fondo enfocado en deuda privada, además de un fondo de capital en España. Valdés agrega que la firma analiza constantemente oportunidades de invertir en aquellas empresas donde exista un plan de crecimiento y una necesidad de recursos relevantes. Su plan a corto plazo es continuar invirtiendo los recursos que ya tienen comprometidos, principalmente el fondo de deuda privada, así como potenciales inversiones adicionales en empresas que ya forman parte del portafolio.

autor Equipo de jóvenes periodistas cuyo objetivo es explicar las noticias más relevantes de negocios, economía y finanzas. Nos apasiona contar historias y creemos en el periodismo ciudadano y de servicio.
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