Buscador
Ver revista digital
Opinión

EU vs China: la guerra no ha acabado

25-09-2020, 8:59:14 AM Por:
© Depositphotos

La relación tortuosa entre estos dos países está llena de desafíos, aún más cuando el mundo post-COVID exacerbará la competencia entre las potencias.

Por Laura Iturbide Galindo*

Dos potencias confrontadas: sanciones comerciales, amenazas, afrentas, acusaciones de espionaje, cese de visas, cierre de consulados y cada día los desencuentros se incrementan y agudizan. Un enfrentamiento que recuerda los episodios más álgidos del siglo xx, entre otros actores, pero que quizá compartan el mismo origen: la lucha por la hegemonía mundial.

Detrás de todo esto, la supremacía por la tecnología 5G, la innovación, los vehículos eléctricos, el desarrollo de los mejores sistemas de defensa e incluso la carrera espacial por la exploración de Marte y el descubrimiento de vestigios de vida en este y muchas razones más.

Y, sin embargo, son dos países interrelacionados comercial y productivamente, como las dos economías líderes a nivel mundial que son. Tan solo su intercambio de bienes y servicios fue más allá de los 500,000 millones de dólares (mdd) en 2019, con amplio involucramiento en las cadenas de suministro globales.

Es por ello que la tensión ha sido muy intensa y la duración de esta disonancia es incierta, pero se prevé que sea larga. Ambas partes habían puesto un impasse en lo comercial, habiendo firmado la primera fase de un acuerdo comercial a mediados de enero del año pasado en la Casa Blanca, pero la pandemia, por el origen del virus y la gestión de la misma, los ha vuelto a regresar a la contienda y aún con más tensión, y es probable que dicho acuerdo quede sepultado en los próximos meses.

Lee: Trump pide a la ONU “responsabilizar” a China por pandemia de COVID-19

Ahora, la búsqueda por conquistar aliados es más intensa en ambos lados y la carrera por llegar a la vacuna más rápidamente no tiene tregua. China ha tratado de ganar todos los espacios abiertos que ha dejado la administración Trump en su camino, alegando que es una “potencia en decadencia” y que no se resigna a perder escaños en el escenario mundial. Y EU, a su vez, trata de convencer al mundo de que las tiranías no caben en un “mundo libre” y que el gigante asiático compite por posiciones estratégicas de manera desleal e injusta.

¿Estaremos frente a una nueva versión de Guerra Fría? ¿Qué pasará si los demócratas ganan la presidencia de EU el 3 de noviembre? Es muy factible que el tono y el énfasis en materia comercial cambien con Biden, pero las discrepancias continuarán, porque su programa económico, de hecho, es de corte nacionalista. Empero, temas como el medio ambiental, aspectos laborales y Hong Kong estarán incluidos y muy presentes en su agenda.

En verdad, las fricciones siguen siendo generalizadas y sistémicas que trascienden a Trump y a Biden, y guardan, en lo profundo, un gran recelo por el dominio geopolítico y el acceso a los mercados de capitales y tecnología. Sin duda, la relación tortuosa entre estos dos países está llena de desafíos, aún más cuando el mundo post-COVID exacerbará la competencia.

*Laura Iturbide es coordinadora de la maestría en Economía y Negocios y directora del Instituto de Desarrollo Empresarial de la Universidad Anáhuac, campus norte.

Lee: El BID, otra batalla de la guerra Trump-China

Nota del editor: Este texto pertenece a nuestra sección de Opinión y refleja la visión del autor, no necesariamente el punto de vista de Alto Nivel.

autor Equipo de jóvenes periodistas cuyo objetivo es explicar las noticias más relevantes de negocios, economía y finanzas. Nos apasiona contar historias y creemos en el periodismo ciudadano y de servicio.
Comentarios