Reglamento para productos ‘milagro’

“Hemos visto el desorden que hay en algunos medios: están diciendo que curan todo, que bajas de peso en siete días, que te sanan de todos los males en 15 días, la verdad es un engaño absoluto al consumidor y no lo vamos a permitir”, fueron las palabras utilizadas por el presidente de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), Miguel Angel Toscano, para alertar sobre la falta de regulación que existe en el sector de los denominados “productos milagro”.

Al parecer, el problema es grave. Según el órgano encargado de las funciones de regulación para proteger la salud de la población, estos productos están elaborados con plantas y sustancias de origen natural o a base de diversos nutrientes que no son tóxicos.

Pero hay que tener ojo. Que sus componentes no sean nocivos para la salud no quiere decir que sean efectivos.

De hecho en una investigación realizada por la propia institución durante 2004 enfocada en revisar 95 productos para bajar de peso y combatir otros padecimientos, se observó que casi la mitad fueron retirados del mercado porque simplemente no funcionaban.

En ese mismo estudio Cofepris señaló que si bien los ingredientes podían no ser nocivos, la “publicidad” de ellos sí representa un grave riesgo sanitario.

Proyecto
Lo cierto es que las autoridades ya no creen en la autorregulación, por lo que estimaron que habrá una disposición obligatoria legal con sanciones severas.

Tanto es así, que a finales de año estará listo el primer borrador del reglamento para restringir la publicidad de alimentos, bebidas alcohólicas y los productos ”milagro”.

En la propuesta, presentada por Angel Toscano, se establece como “publicidad engañosa” a aquellos mensajes ambiguos, que estimulan a una decisión rápida, que incluyen precios de un producto sin IVA y anuncios con letra pequeña o ilegible.

El planteamiento del legislador panista busca también incluir en las sanciones a los avales y a quienes den testimonios para inducir la compra de productos milagro.

Del mismo modo, buscará fortalecer las facultades de la Procuraduría Federal de Consumidor (Profeco) para verificar la publicidad engañosa o abusiva, además de incrementar las multas a las empresas que incurran en ello.

Al respecto, la Profeco enumeró los seis tipos de engaños en las promesas que, normalmente, realizan este tipo de productos.

• Quien te prometa que sólo con tomar una pastilla, beber un licuado, untarse una crema o bañarse con un jabón bajarás kilos y kilos, te está engañando.
• No existe ninguna sustancia que pueda bloquear la absorción de grandes cantidades de grasa en el organismo como para ocasionar una pérdida de peso significativa.
• Ten cuidado con las dietas pues, para funcionar adecuadamente, nuestro cuerpo necesita un suministro suficiente y balanceado de los nutrientes que aporta cada uno de los grupos alimenticios.
• Con afirmaciones acompañadas de supuestos médicos o representantes de asociaciones, los anunciantes pretenden darle credibilidad a su producto ¿cuáles expertos?, ¿de qué universidad o institución?
• Si te sometes a un régimen alimenticio y bajas de peso pero una vez alcanzada tu meta no modificas los hábitos que te hicieron engordar, no tardarás mucho en recuperar el peso perdido. Un producto no es capaz de regular aquello.
• La formación y la eliminación de grasa en el organismo dependen de procesos metabólicos, no de factores externos. Por lo tanto, ninguna crema, parche, gel, jabón o extraño artilugio es capaz de hacerte perder centímetros de forma definitiva.

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