La ciencia en el mundo debe ser un asunto de mujeres
La mujer puede enriquecer la creatividad y el conocimiento de los proyectos de investigación y aumentar las posibilidades de verdadera innovación
Miles de doctoras en México y en el mundo podrían contar esta historia: “Aunque llevo mi bata blanca y me presento como médico, los pacientes asumen que soy una enfermera o una asistente. Y peor aún, si en el lugar hay un hombre, porque los pacientes solo se dirigen a él; es al único al que cuentan su historia, al que hacen preguntas”. Lo mismo cuenta María del Rosario Olivera, directora médica de la compañía de biofarma Bristol-Myers Squibb (BMS). Le sucedió cuando era estudiante y hacía rondas en hospitales. Por fortuna, cuando ingresó al mundo laboral eso cambió. En la actualidad, María tiene a su cargo un equipo médico de 20 personas de tres países: México, Colombia y Venezuela.
María decidió estudiar medicina porque quería ayudar a las personas y esta profesión le daba la posibilidad de hacerlo en diferentes frentes: desde la parte mental y afectiva, hasta la patología orgánica. Al final de la carrera, María descubrió la investigación clínica (la rama que determina la seguridad y efectividad de medicamentos, dispositivos, productos de diagnóstico y tratamientos) y cómo a través de ella se podían solucionar los problemas de la gente. “Entonces me incliné hacia ese lado, porque un médico puede incidir en el proceso hasta lograr resultados favorables para los pacientes”, cuenta.
En BMS, María ha contribuido en la introducción de inmunooncología, un área terapéutica que aprovecha el sistema inmunitario de una persona para combatir el cáncer. Los medicamentos inmunooncológicos ayudan a estimular el sistema inmunológico del paciente, para que sea capaz de reconocer y destruir las células cancerosas con mayor eficacia.
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Más investigadoras
Desde hace tiempo, la mujer se ha interesado en la ciencia; sin embargo, se consideraba que este campo no era “asunto de mujeres”. La mujer había sido relegada a labores domésticas o de producción artesanal, subestimando su capacidad de investigación, producción y creación en otros campos, como la medicina y la ciencia. Incluso muchas mujeres dudan de las capacidades de sus congéneres cuando prefieren acudir a consultas médicas con hombres, pues desconfían de las especialistas o cirujanas. Pero con el paso de los años la mujer ha logrado abrirse espacios en las diferentes disciplinas, derribando obstáculos como discriminación, hostigamiento sexual, inequidades salariales, falta de promoción en posiciones directivas, embarazo y responsabilidades domésticas y familiares.
María tiene dos hijas pequeñas, de seis y nueve años de edad, y nunca hizo una pausa en su carrera para afrontar la maternidad. “He podido balancear bien las dos cosas: mi vida profesional y mi papel de mamá. De hecho, mis años como mamá ha sido el tiempo en que más he crecido dentro de la organización. Claro que ha habido momentos complejos en los que he tenido que sacrificar un poco de mi vida personal, pero al cabo del tiempo recibes tu recompensa”.
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Parte fundamental del éxito laboral de María ha sido su red de apoyo, principalmente su esposo y su familia. “Una va armando esa red para que, cuando tengamos que ausentarnos, nos aseguremos de que la familia va a estar bien. El respaldo de la empresa donde trabajas y de tu equipo también son primordiales”.
En BMS hay una red de mujeres llamada B-NOW, la cual impulsa el rendimiento empresarial al abarcar la diversidad de género. B-NOW garantiza que las mujeres de la compañía tengan las mismas oportunidades de ser reclutadas, desarrolladas y retenidas globalmente dentro de una cultura que da prioridad a esta misión.
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Y es que en BMS saben que las mujeres agregan una importante cantidad de fuerza al campo de la ciencia y la medicina. Estudios recientes muestran que las mujeres médicas pueden brindar mejores ahorros en la atención clínica y en el sistema de atención médica, en comparación con sus homólogos masculinos, y generalmente también son más colaborativas en actividades de investigación.
En el artículo Why It’s Crucial to Get More Women Into Science, publicado en el sitio web de National Geographic, el profesor de la Universidad de Michigan, Scott Page, quien estudia la diversidad en sistemas complejos, dice que la mujer puede enriquecer la creatividad y el conocimiento de los proyectos de investigación y aumentar las posibilidades de verdadera innovación.
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La imagen estereotipada de “investigadores genio” que realizan descubrimientos mientras trabajan solos ha dado paso a un modelo más colaborativo, en el que la investigación se realiza por equipos formados por científicos y científicas de diferentes campos. Además, estudios realizados por instituciones como Goldman Sachs y la Universidad de Columbia han encontrado que las empresas que emplean a más mujeres superan a sus competidores en todas las medidas de rentabilidad.
¿Cómo incluir a más mujeres en la medicina y las ciencias? La directora médica de BMS aconseja empezar por temas educativos y culturales, empoderando a las niñas a que estudien carreras STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas) y poniéndoles ejemplos de mujeres que hicieron carreras STEM y que han contribuido al crecimiento de una organización.
Encontrar formas creativas para que las mujeres equilibren su trabajo y las responsabilidades familiares también es fundamental para desarrollar mujeres líderes en la ciencia.
Hay muchas mujeres talentosas y brillantes con el potencial de ser líderes en ciencia. El éxito será de aquellas que estén dispuestas a atreverse e innovar, a pedir lo que quieren, a dominar el arte de la multitarea y a perseverar en los momentos difíciles.
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