Para este fin de año, procura que tu discurso sea inspirador

Los malos discursos de fin de año suelen ser recordados por tediosos, aburridos y hasta faltos de sentido. Debido a la importancia de este momento para crear una conexión con los colaboradores y animarlos para un siguiente año, elimina las posibilidades de que éste sea motivo de burlas o sospechosas.

Atiende los siguientes puntos y logra mejores resultados con una estructura clara y firme:

• Objetivo

La persona líder debe tomar en cuenta que mientras más corto y emotivo sea el discurso será mejor captado, por ello tener claras dos o tres ideas principales es la mejor opción.

• Un discurso con toque humano

Es importante que las y los colaboradores se sientan identificados con la cabeza de la empresa, deben saber que son igual que la persona que está hablando; ello causa empatía y mayor compromiso. Añadir anécdotas personales o historias familiares suele funcionar.

• Reconocimiento de los colaboradores

Es importante que cada una de las trabajadoras y trabajadores se sienta parte de la empresa. Reconocer sus logros es la mejor manera de demostrarle que sus objetivos profesionales van de la mano con los de su organización.

• Siempre se puede llegar a más

Para que quienes colaboran se sientan con seguridad de que las metas del siguiente año pueden ser alcanzadas, deben darse números y ejemplos de logros alcanzados.

• Entusiasmo

Si bien el discurso debe ir acorde con la personalidad de quien lo expresa, también se debe estar consciente que ser entusiasta al momento de decir los retos del siguiente año, es fundamental.

• La duración

Por último, la duración de un discurso no debe rebasar los 13 minutos, después de este tiempo el interés de la audiencia se pierde.

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