Buscador
Ver revista digital
Management

Coachea a la alta dirección

18-02-2011, 5:26:25 PM Por:
Coachea a la alta dirección fifu

Entre las situaciones más complejas para un coaching está dirigir a un ejecutivo exitoso y con experiencia. ¿Cómo hacerlo?

El momento más incómodo, pero a la vez desafiante, de un coaching empresarial es cuando debe entrenar a la alta dirección; ejecutivos exitosos que por lo general mantienen altos niveles de crecimiento, poseen una inteligencia superior a la media, intuición y reciben grandes recompensas por lo que hacen.

La situación es difícil puesto que se trata de personas que demostraron talento para conducir sus organizaciones a través de diferentes tormentas, y que hoy pasan por un momento de incertidumbre y necesitan de tu ayuda. ¿Qué haces para entregarle algo que no sepan?

Parece contradictorio, pero según Sharon Ting y Ted Grubb, autores del libro Handbook of Coaching, a guide for leader coach, 32% de los CEO’s de la empresas tecnológicas norteamericanas de más veloz crecimiento, consideran que sus propias capacidades son el principal impedimento para que las organizaciones que dirigen sigan creciendo.

Tal vez acá puede haber una pequeña entrada. A estos ejecutivos, dada su posición y el modelo al que todos quieren seguir, les es muy difícil encontrar dentro de sus empresas gente que les hable con sinceridad sobre sus posibilidades de mejora.

Además, mucho de ellos tampoco se sienten libres de hablar sobre sus problemas, dudas, o anhelos de mejora con cualquiera. Aun cuando estén deseosos de mejorar y seguir aprendiendo, se envuelven con frecuencia en la soledad del poder, explican .los autores del libro.

Su posición jerárquica inhibe el acceso a un feedback honesto, el que necesitan para mejorar su propio desempeño. Precisamente ese elemento se lo puede entregar un coaching.

La experiencia del coach

Para Emilio Moraleda, ex directivo de Pfizer y .actual coaching de empresas, la clave está en la experiencia que pueda tener el profesional para ponerse en el lugar del otro (donde alguna vez también estuvo).

“Cuando dejé la presidencia de Pfizer realicé coaching a algunos de sus directivos, de manera entusiasta. El directivo, sea de la compañía que sea, agradece poder contrastar sus ideas; tener a alguien que le rete, guíe y aporte nuevas ideas. De esta manera podemos hacer mejor nuestro trabajo teniendo un impacto más positivo en los resultados de la compañía”, asegura.

Según el ex empresario, cuando las personas están en la cima es cuando más necesitan la ayuda de alguien que los guíe en lo que hacen.

“Salvo mi ex jefe, no he tenido a nadie que me hiciese coaching, y me he dado muchos golpes. Reconozco ahora que lo habría necesitado en muchos momentos. Seguro que podría haberme ahorrado muchos de esos golpes, y habría sido más efectivo si hubiese tenido a alguien que me hubiese ayudado en mi camino”, continúa Moraleda.  

Por otro lado, “sé que puedo impactar positivamente haciendo mejores líderes a quienes tienen responsabilidad en estos momentos”.

La clave estaría en tener tanto la confianza como la experiencia de haber pasado por la misma situación de ese alto directivo al que vas a coachear.

autor Equipo de jóvenes periodistas cuyo objetivo es explicar las noticias más relevantes de negocios, economía y finanzas. Nos apasiona contar historias y creemos en el periodismo ciudadano y de servicio.
Comentarios