Legisladores: ¡Mantengan los recortes al presupuesto 2017!
El superávit primario propuesto en la Ley de Egresos de la Federación para 2017 podría perderse en el debate legislativo, el riesgo es que con ello también se pierde la confianza de los inversionistas.
La mala noticia es que la propuesta de Ley de Egresos de la Federación, mejor conocida como el presupuesto de gastos, bien podría perder el muy conveniente y esperado superávit primario de 0.4% del PIB, aún antes de que comience 2017. Los intereses locales y la mano de los legisladores pudieran tener este efecto.
Los diputados y senadores de diversos partidos han dado indicios de que, lejos de aumentar su austeridad, este presupuesto sólo puede subir gracias a su oportuna intervención. El PRD ha declarado que no votará a favor si no se efectúan cambios en los recortes propuestales y se ha declarado defensor del gasto social; el gobierno de la CDMX clama por los rincones por su Fondo de Capitalidad, que el año pasado fue de 4,000 millones de pesos (mdp); el PAN anuncia que peleará por los recursos fronterizos (unos 570 mdp); en Nuevo León se quejan por su Línea 3 del Metro, que tiene un costo total de 6,900 mdp.
En cambio, el presupuesto de 15,000 mdp asignado al Poder Legislativo no bajará ni un peso, antes bien, nos hicieron el favor de no subirlo. Tampoco parece que bajará ni un centavo el presupuesto del Instituto Nacional Electoral (INE), también de cerca de 15,000 mdp, sobre todo en la parte que otorga dinero a los partidos políticos como prerrogativas: más de 4,000 mdp.
No parece que haya consenso, ni voluntad de jalar parejo en el tema presupuestal. Hoy, como siempre, abogamos a favor de que se cumpla con el superávit primario propuesto, porque es indispensable para mantener la confianza de los inversionistas.
Las presiones sobre el peso, que lo llevaron a niveles de 20 pesos en estos días, se deben principalmente a la reunión de la Reserva Federal de Estados Unidos, que se llevará a cabo esta semana. Sin embargo, un presupuesto en peores condiciones que las anunciadas sería muy mal mensaje para los mercados.
Que le hagan como quieran los legisladores, pero de cada peso que “desrecorten”, deberían estar dispuestos a compensar con un monto equivalente en otro rubro presupuestario. Habría que proponerles, por ejemplo su propio presupuesto legislativo, o en el dinero de los partidos políticos. De esta manera, los ciudadanos podríamos sentirnos plenamente representados en esta Legislatura.
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