El “súper dólar” ya está aquí y supera al euro en su cotización
Si lo vemos fríamente, un dólar fuerte puede convertirse en una fuente adicional de inflación.
El “agresivo” aumento de las tasas de interés realizado por el Banco de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), la titubeante política monetaria del Banco Central Europeo (BCE), una casi inminente recesión en Estados Unidos y un prolongado conflicto bélico, con todas sus implicaciones, provocaron que la tendencia de apreciación del dólar de Estados Unidos, ya vigente desde hace algunos meses, se profundizara este martes y miércoles (en los mercados asiáticos). Esto ya es un “súper dólar” ante el que las demás divisas se deprecian.
Así, la moneda estadounidense tomó un impulso de apreciación que lo llevó, en su movimiento más significativo, a romper en unas cuántas horas la paridad 1a 1 contra el euro, es decir un dólar por un euro.
Ayer, la cotización euro-dólar en los mercados cambiarios del continente asiático se ubicaba en 0.9744 euros por dólar, nivel que no se observaba desde hace prácticamente 20 años en agosto de 2002.
Dólar confirma papel como moneda de reserva
Apenas el lunes la Fed había liberado un estudio en el que analizaba el papel del dólar en el mundo y aseguraba que su divisa seguiría por muchos años consolidada como la moneda de reserva mundial.
Sin embargo, la apreciación del dólar también tiene implicaciones alrededor del planeta, significa de hecho, problemas adicionales para los bancos centrales, las economías y las proyecciones de inflación en el mundo.
Si lo vemos fríamente, el dólar al fortalecerse se encarece, lo que puede convertirse en una fuente adicional de inflación.
Este incremento en la cotización del dólar se deriva del aumento de la tasa de interés por parte de la Fed, y el hecho de que seguramente otros bancos centrales deberán subir más sus tasas y con ello “parar” su economía, un factor adicional de riesgo para los capitales.
El peso lo resiente
El mejor ejemplo de lo que sucede en los mercados cambiarios globales en este momento es nuestro mercado de divisas.
El peso mexicano cerró este martes en niveles de 20.57 pesos por dólar, con ganancias para el dólar por tercera ocasión al hilo.
El peso se debilita frente al dólar como consecuencia de la apreciación de esta divisa en los mercados globales; con la posibilidad de una recesión en Estados Unidos la moneda de ese país se fortalece cada vez más y está visto que el peso lo resiente, los efectos se mantendrán.
Las consecuencias
El fortalecimiento del dólar es una mala noticia para las economías considerando que como divisa de reserva gran parte del comercio global se realiza en dólares, al encarecerse generará presiones sobre los precios internos en cada nación, ya de por sí afectados por el repunte de la inflación.
La inflación mundial seguirá como factor de riesgo para las economías del mundo.
Lo anterior de hecho pone en una encrucijada a la gran mayoría de los bancos centrales, incluyendo a nuestro Banxico. El dilema ahora para los bancos centrales es si adoptan una política monetaria más agresiva y suben con fuerza las tasas de interés para contrarrestar la fortaleza del dólar, a cambio de provocar y profundizar una desaceleración en sus economías y una eventual recesión.
Esta gran disyuntiva es la que tiene ahora atrapada a Christine Lagarde, la presidenta del Banco Central Europeo (BCE).
Así, la volatilidad y los riesgos financieros no terminan para las finanzas globales, ante lo cual México no tiene escapatoria.
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