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Finanzas

Después de la tormenta…viene la encrucijada para los bancos mexicanos

27-04-2021, 7:57:34 AM Por:
© Depositphotos

¿La banca prestará más para apoyar la recuperación económica, o cuidará que no se deterioren más sus indicadores de solvencia?

La banca mundial enfrenta un escenario complejo. La crisis y sus efectos y la digitalización acelerada han provocado que, en muchas partes del mundo, las plantillas laborales tuvieran que ajustarse. Los bancos se debaten entre la prestación de servicios cada vez más en línea, y la presencia de cientos o miles de sucursales que de alguna manera generan presencia en los lugares donde se ubican.

Tan sólo en España, al cierre del primer trimestre se habían liquidado alrededor de 19,400 trabajadores bancarios, y cerrado miles de oficinas. En la última década los bancos españoles han cerrado alrededor de 23 mil sucursales en el territorio español. Italia, Francia, Inglaterra e incluso Estados Unidos no escapan a la tendencia.

Mientras en México, los bancos no dejan de padecer las condiciones de la economía y los ajustes que tuvieron que hacer en sus esquemas de financiamiento para disminuir en la medida de lo posible el impacto de la crisis del año pasado.

La encrucijda

Es así como ahora, después de la tormenta los bancos entran en una encrucijada, el camino que decidan tomar determinará en gran medida lo que suceda con la economía mexicana, dicen analistas.

De acuerdo con cifras de CIAL dun&bradstreet, un proveedor de datos y análisis de negocios de América Latina y el Caribe, en febrero pasado el índice de Morosidad (IMOR) de la banca comercial, integrada por 50 instituciones, se ubicó en 2.68 por ciento, mientras que la pérdida esperada (determinada por la política de reservas preventivas que la institución debe tener contra riesgos crediticios), quedó en 4.09 por ciento.

Estas cifras son más altas respecto a un año antes cuando se ubicaba en 2.23 por ciento en el caso del índice de morosidad y de 3.30 por ciento para la pérdida esperada; 24 meses antes, es decir en febrero de 2019, la morosidad estaba en 2.12 por ciento y la pérdida esperada en 3.20 por ciento.

En una tendencia gráfica, es claro que estamos frente a un incremento de la morosidad en la banca comercial, un deterioro de este indicador clave.

Las cifras del análisis señalan que, si tomamos en cuenta aspectos más detallados del mercado crediticio, como el crédito al consumo, existen un deterioro más preocupante.

Por ejemplo, el índice de crédito al consumo del sistema bancario mexicano se ubicó en 5.50 por ciento durante febrero pasado y la pérdida esperada en 9.42 por ciento; 12 meses antes las cifras estaban en 4.38 por ciento y 8.90 por ciento respectivamente.

¿Qué hacer?, es la encrucijada del sistema bancario mexicano en este momento. Por un lado, tiene la posibilidad y hasta la obligación de apoyar a la recuperación económica del país por la vía del crédito, una de las principales llaves de estímulo económico en cualquier país.

Por el otro lado, tiene la necesidad de mantener y recuperar la salud de su cartera crediticia, que como hemos observado se ha deteriorado en los meses recientes. Una mayor expansión crediticia podría llevar a los bancos a un deterioro adicional que pondría en riesgo su estabilidad financiera.

La situación no es grave, pero sí preocupante

Los bancos en México mantienen signos de solidez, al menos por el momento ya que, en efecto, sus índices de morosidad se deterioraron en la crisis. La situación de la banca mexicana en el país no es grave pero sí preocupante. En este sentido, que la encrucijada en la que se encuentran es la más importante en mucho tiempo, quizás desde aquella crisis de 1995 cuando el sistema colapsó. El tiempo nos dirá si decidieron apostar por el crédito y arriesgarse a un mayor deterioro de indicadores en pos de apoyar la recuperación económica, o bien optaron por una postura más cauta para proteger sus finanzas del deterioro.

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