Si eres mujer, tu futuro para el retiro será (más) incierto
Salarios desiguales, menos semanas cotizadas en la Afore y menos capacidad de ahorro darán un retiro más incierto a las mujeres.
Este texto fue publicado el 9 de diciembre de 2019
El futuro para millones de mexicanos luce muy complicado cuando se acerque su edad para el retiro pues, quienes coticen las semanas necesarias bajo el actual sistema tendrán, probablemente, una pensión insuficiente.
Pero para las mujeres, el futuro será aún más complicado en cuanto al retiro se refiere. En comparación con los hombres, tendrán una pensión menor debido a tres factores principales.
El primero es la brecha salarial. Millones de mujeres ganan menos por un mismo puesto o por desempeñar las mismas tareas que un hombre. Esto afecta la cotización en su Afore y tendrán un ahorro menor.
La esperanza de vida es el segundo factor. En promedio, las mujeres viven cinco años más que los hombres, lo que hará que sus ahorros para el retiro sean aún menores a comparación de los trabajadores del sexo masculino.
El tercer factor es que las mujeres, por el rol que se les asigna socialmente, tienen menos capacidad para ahorrar. Siete de cada diez pesos que ganan los destinan a la manutención de los hijos o gastos de la casa.
Inequidad salarial, retiro desigual
A 22 años del sistema de ahorro para el retiro vigente, las Administradoras para el fondo para el retiro (Afores) y los reguladores se comprometen a incrementar los retornos de las inversiones que hacen con el ahorro de los trabajadores y a cobrarles comisiones más bajas por administrar su dinero. Sin embargo, el principal problema sigue siendo la baja tasa de reemplazo, es decir, la pensión mensual con la que se jubilarán las personas, debido a los bajos salarios.
Para las mujeres, esta situación se exacerba. Nueve de cada diez en México gana hasta cinco veces el salario mínimo (102.7 pesos diarios), mientras que solo ocho de cada diez hombres está en este rango, indica la calificadora de riesgo Moody’s en un estudio sobre el sistema de pensiones.
De acuerdo con el Observatorio de Trabajo Digno, de la organización Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, una mujer mexicana tendría que trabajar cinco días más para obtener el mismo sueldo que el de un hombre. Con una brecha de $797, las mujeres obtienen un ingreso promedio mensual por jornada completa de $5,029.
La desigualdad no solo radica en la remuneración, las mujeres trabajan de manera intermitente debido a las responsabilidades familiares, pues se ausentan más tiempo de los trabajos, lo que afecta las semanas cotizadas en su Afore.
Más trabajo, menos ahorros
Los hombres en México tienen una esperanza de vida de 75 años y las mujeres de 80. Esos cinco años adicionales significan que los ahorros se distribuyen en más tiempo de vida y dan como resultado tasas de reemplazo menores en su retiro, pensiones más bajas y un poder adquisitivo disminuido.
La intermitencia en su vida laboral provoca contribuciones más bajas y menos frecuentes a su pensión, y a menudo ganan salarios más bajos cuando regresan a la fuerza laboral, indica Moody’s en el estudio.
“A lo largo de su vida laboral, las mujeres contribuyen menos de la mitad del tiempo. Algunas incluso pueden no ser elegibles para una pensión”, alerta la calificadora.
La ley estipula que los trabajadores deberán cotizar un mínimo de 1,250 semanas (24 años) en el IMSS para tener derecho a una pensión.
Respecto al tiempo en labores domésticas que realizan personas ocupadas con jornada laboral de 20 horas o más, las mujeres empleadas presentaron la dedicación de una jornada completa adicional para estas tareas, señala el Observatorio de Trabajo Digno.
“Partiendo de que las mujeres tienen mucho menos oportunidades en el sector laboral, parecería que es algo contradictorio porque las mujeres son personas que regularmente dedican más tiempo al trabajo”, comenta en entrevista Rodrigo Iñiguez, director comercial de distribución independiente de Skandia México, una operadora de fondos de inversión.
Sin ahorros y acceso a servicios financieros
La situación se complica aún más cuando las mujeres tienen menos capacidad de ahorro y menos acceso a instrumentos financieros para hacerlo.
En diciembre de 2017 existían 60 millones de cuentas de ahorro para el retiro en el país. Un 39.6% pertenecía a mujeres y 60.4% era de hombres, según datos de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar).
Rodrigo Iñiguez realta que, en México, las mujeres destinan 70% de su ingreso a un tercero, es decir, al bienestar familiar o de la sociedad. Y reciben entre 60% y 70% menos que un hombre con la misma posición laboral. Así, a la edad de retiro se llega menos preparada siendo mujer.
Por otro lado, tres de cada cuatro personas mexicanas no poseen una cuenta de ahorro, en el caso de las mujeres corresponde a nueve de cada diez, mientras que para los hombres se registran siete de cada diez, agrega el directivo.
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El gobierno de Andrés Manuel López Obrador, planea una reforma al sistema de pensiones que, aunque no contempla aumentar la edad para el retiro, podría modificar los regímenes de inversión de las Afores para que entreguen mayores rendimientos a los trabajadores.
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Moody’s considera que la contribución por salario debe incrementarse y fortalecer las nuevas reglas de inversión que podrían mejorar los rendimientos y la solvencia de los administradores de pensiones.
“No esperamos que la reforma mejore drásticamente el sistema porque no aborda completamente las bajas tasas de reemplazo -o el porcentaje de ingresos que los jubilados reciben antes de la jubilación- que es de alrededor del 30%, en comparación con un promedio del 63% en los países de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos). Sin embargo, los cambios están en proceso de aprobación y tienen implicaciones crediticias menores y mixtas”, detalló Moody’s.
Quienes se jubilen a partir de 2021 recibirán, en promedio, 26% del último sueldo, tras el bajo nivel de contribuciones obligatorias, de acuerdo con el Estudio sobre los sistemas de pensiones: México, de la OCDE.
Las personas nacidas en México después de 1985 tienen 41.1% de probabilidades de vivir en condiciones de pobreza como adulto mayor, de acuerdo a la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS).
Pero el panorama luce aún más sombrío para las mujeres, que enfrentarán un retiro con más dificultades a causa de la inequidad de género.
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Marcia Chi Barrales Periodista que intentó estudiar derechos humanos, pero un día leyó a Oriana Fallaci y otro a Susan Sontag.