Vespa con sidecar, un clásico elegante y chic
Con toda la onda vintage, Piaggio vuelve la vista hacia la nostalgia de los años 60.
Los efectos del vintage están interiorizados en nuestras cabezas como algo novedoso, con mucha onda y estilo.
Una empresa líder imponiendo esta tendencia en el mercado de las motocicletas es Piaggio. El gigante italiano siempre se ha debatido entre el presente y pasado de sus Vespa.
Piaggio parece dispuesta a revivir la filosofía de las Vespa con sidecar de los años 50 y 60, cuando eran el vehículo económico y familiar por excelencia, digno para sustituir con estilo un caro automóvil.
Esta motocicleta es todo un clásico que nos remonta al pasado. El primer sidecar se acopló a una Vespa en 1948.
Con el nuevo modelo, la moto sobre la que se ha instalado el atalaje es una Vespa GTV de las series modernas. Ésta tiene un motor de 250 cc, cuatro tiempos y los refinamientos de cualquier motor actual, como inyección electrónica o refrigeración líquida.
Atractiva y sugerente, confeccionada para apasionados nostálgicos de aquella época y amantes de la estética vintage. Así se presenta la original Vespa GTV 250: con faro en el guardabarros delantero, todos sus detalles cromados y relucientes, ensamblada a un lujoso sidecar, realizado expresamente para la ocasión.
Un sidecar moderno, pero de inspiración claramente old fashion, y sin menospreciar la seguridad de un freno de disco y hasta cuarta rueda de repuesto con funda incluida, instalada en la parte trasera exterior del artilugio.
El prototipo de este esplendoroso vehículo podría llegar a fabricarse en cortas series hacia el final de esta año.
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