Los edificios más extraños del mundo
En Estilohoy.com te contamos de aquellas construcciones y edificios que no puedes dejar de ver cuando tomas las maletas para dar una vuelta por el mundo.
Edificios con formas extrañas, con fines culturales, de marketing o simplemente pensados así para llamar la atención de la sociedad. ¡Lee sus historias y elige tu favorito!
· La casa torcida, Sopot, Polonia
Parece una edificación sacada de un cuento, en donde la casa quisiera hacerse un lugar entre las construcciones que la rodean.
La historia se remonta a los años sesenta, cuando Dalí decidió construir su museo en el interior de las ruinas del viejo Teatro Principal de Figueres. Esta es sin duda, una de las mayores atracciones turísticas de la ciudad.
El fundador del grupo, Dave Longaberger, es el creador de este singular edificio de siete pisos de oficinas, que dejan muy claro a qué se dedica su empresa.
El costo fue de 30 millones de dólares y dos años de obras. Como si fuera poco está rodeado de árboles y junto a un lago, como si fuera un picnic.
· Museo Guggenheim, Bilbao, España
Gherkin, la torre Swiss Re o edificio Swiss Re, es un peculiar edificio ubicado en el 30 de St MaryAxe en el barrio financiero de Londres.
El sobrenombre de Gherkin, muy popular, significa literalmente pepinillo. La mayoría de la gente no sabe que el nombre oficial del edificio es 30 St Mary Axe. Es una construcción inteligente diseñada para ahorrar energía y preservar el medio ambiente.
Debido a su aspecto algo fálico también ha sido bautizado como “el pepinillo erótico” la “insinuación imponente” y el “falo de cristal”.
Eesta obra fue pensada por el arquitecto Frank O. Gehry, autor del Guggenheim de Bilbao, quien convirtió el espacio que albergaba un antiguo edificio ecléctico de estilo renacentista, en un edificio danzante.
Fue construido con paneles de concreto orientados en diferentes ángulos recubiertos por una piel de vidrio suspendida en un extremo, recordándonos el vestido de una bailarina, que acompaña un robusto bailarín cilíndrico a su lado. De ahí el nombre.
Ha creado mucha controversia por su aspecto; sin embargo, hasta fue imagen de una moneda de oro, impulsada por el Banco de la República Checa en el año 2005.
Por desgracia el edificio no puede ser visitado por dentro, ya que alberga oficinas en su interior, pero puedes acudir al Restaurante que se encuentra en el séptimo piso, o simplemente contemplarlo.