Kylie Minogue, la princesa australiana del pop
08-07-2009, 5:00:00 PM
Por: Alto Nivel
Kylie Minogue es la princesa australiana del pop y heredera natural de Madonna. Ha conocido ambas caras de la vida, saliendo victoriosa en cada batalla.
Kylie Minogue ha sido considerada por muchos como la sucesora natural de Madonna.
La declaración no es demasiado exagerada, considerando que la australiana tiene 9 discos de estudio a cuestas y ha puesto sus primeros 13 sencillos en el Top 10.
Son millones los fanáticos que se rinden a sus pies y la crítica especializada tampoco ha quedado inmune a su talento.
A tanto llega el reconocimiento de la cantante y actriz, que la reina Isabel II de Inglaterra le concedió, en 2008, la medalla de la Orden del Imperio Británico por sus servicios a la música. Además es la única mujer en ganar un MIT (Music Industry Trust), premio que se otorga a artistas que contribuyen a la música.
Inicios
Kylie conoció la fama de niña, cuando aparecía en la exitosa telenovela australiana Neighbours. Su papel provocó que los productores le prestaran atención, y tras grabar el cover Locomotion se inició su carrera musical.
Entre sus discos más exitosos figuran, Enjoy you self (1989) y Fever (2001), que contiene el hit Can’t Get You Out Of My Head. El tema fue número uno en 21 países, el disco vendió más de seis millones de copias en el mundo y Kylie se situó entre las estrellas de moda del panorama musical.
Mención aparte merece la placa Body Language (2003), un disco cuya portada está inspirada en la imagen de Brigitte Bardot y que según los medios especializados fue “el disco que debió haber grabado Madonna o que siempre querrá haber hecho Britney Spears”.
El fantasma del cáncer
En 2005, Kylie anunció que padecía cáncer de mama por lo que suspendió su gira mundial. Entró a la sala de cirugía ese mismo año mientras varios fans se amontonaron en los alrededores de su residencia.
Tras la operación, hizo su primera aparición pública en el Hospital Infantil de Melbourne, visitando a niños con cáncer. Entonces comenzó una quimioterapia y viajó a Francia, donde se alojó en el Instituto Gustave Roussy, en Villejuif, para completar su tratamiento.
Durante su estancia en Francia escribió el libro La Princesa del Espectáculo y lanzó su perfume, Darling.
En 2006 regresó al escenario, para alegría de sus fanáticos y de la escena musical que aprecia a los artistas de calidad y que están acostumbrados a ofrecer buenos espectáculos.
La declaración no es demasiado exagerada, considerando que la australiana tiene 9 discos de estudio a cuestas y ha puesto sus primeros 13 sencillos en el Top 10.
Son millones los fanáticos que se rinden a sus pies y la crítica especializada tampoco ha quedado inmune a su talento.
A tanto llega el reconocimiento de la cantante y actriz, que la reina Isabel II de Inglaterra le concedió, en 2008, la medalla de la Orden del Imperio Británico por sus servicios a la música. Además es la única mujer en ganar un MIT (Music Industry Trust), premio que se otorga a artistas que contribuyen a la música.
Inicios
Kylie conoció la fama de niña, cuando aparecía en la exitosa telenovela australiana Neighbours. Su papel provocó que los productores le prestaran atención, y tras grabar el cover Locomotion se inició su carrera musical.
Entre sus discos más exitosos figuran, Enjoy you self (1989) y Fever (2001), que contiene el hit Can’t Get You Out Of My Head. El tema fue número uno en 21 países, el disco vendió más de seis millones de copias en el mundo y Kylie se situó entre las estrellas de moda del panorama musical.
Mención aparte merece la placa Body Language (2003), un disco cuya portada está inspirada en la imagen de Brigitte Bardot y que según los medios especializados fue “el disco que debió haber grabado Madonna o que siempre querrá haber hecho Britney Spears”.
El fantasma del cáncer
En 2005, Kylie anunció que padecía cáncer de mama por lo que suspendió su gira mundial. Entró a la sala de cirugía ese mismo año mientras varios fans se amontonaron en los alrededores de su residencia.
Tras la operación, hizo su primera aparición pública en el Hospital Infantil de Melbourne, visitando a niños con cáncer. Entonces comenzó una quimioterapia y viajó a Francia, donde se alojó en el Instituto Gustave Roussy, en Villejuif, para completar su tratamiento.
Durante su estancia en Francia escribió el libro La Princesa del Espectáculo y lanzó su perfume, Darling.
En 2006 regresó al escenario, para alegría de sus fanáticos y de la escena musical que aprecia a los artistas de calidad y que están acostumbrados a ofrecer buenos espectáculos.
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