Hombres y la crisis de los 40
¿Realidad o mito? ¿Qué síntomas tiene? Respondemos éstas y otras dudas en torno a uno de los temas más desconocidos para los hombres.
Es usual que las mujeres atraviesen una crisis existencial cuando se acercan a los cuarenta años de edad; sin embargo, el fenómeno no excluye a los varones.
Si bien los especialistas no la catalogan como “crisis” sí reconocen que se trata de una serie de pautas muy concretas de comportamiento y de actitudes que hacen que se les ponga esta etiqueta.
Pero, ¿de qué hablamos cuando decimos crisis de los 40? Descúbrelo a continuación:
LA CRISIS
Cerca de los cuarenta años la mayor parte de los hombres tiene su vida consolidada, hijos ya criados, un trabajo y una familia estable por lo que surge la pregunta de ¿y ahora qué?
Es cuando comienza a asomar la crisis de los cuarenta, en donde los hombres asumen ciertas consecuencias psicológicas y físicas existenciales, entre ellas el enfentar que esa nueva década habla más de madurez que de juventud y que la salud y el declive físico comienzan a pasar la cuenta.
La desadaptación se hace presente y la mejor forma de volver a sentirse “parte” del mundo es rejuveniendo.
Psicológicamente, el hombre experimenta que no sólo su cuerpo sino también su felicidad y sus ilusiones están en juego y de no retomarlas a tiempo es posible que ya no vuelvan.
Por ello, no extraña que muchos varones pasen de vivir una vida sosegada y estructurada a tener experiencias parecidas a las de cuando tenían 20 años
Por ejemplo, surgen nuevas conquistas con personas menores, aparecen inscripciones al gimnasio, se asumen menos responsabilidades, etc. Todo esto busca subir la autoestima y también, de paso, la libido.
LOS PROBLEMAS EN LA PAREJA
El síntoma más claros en hombres de 40 años suele ser la necesidad de sentirse jóvenes de nuevo y la búsqueda de nuevas experiencias que se han perdido con la edad o que en su día no pudieron experimentar.
Por estas actitudes es que se producen rupturas matrimoniales, ya que la pareja no puede aguantar el cambio al que se somete el marido.
Es como si uno de los dos volviera atrás, mientras el otro lucha por seguir adelante con los planes.
MOTIVOS DE LA CRISIS
Si bien los patrones de comportamiento ayudan al hombre a sentirse más joven y seguro, para los expertos estas conductas esconden algo más:
• Personalidades inseguras son las más adecuadas para padecer este problema.
• También en parejas que han establecido una rutina excesiva y que carecen de estímulos gratificantes de ocio y tiempo libre.
• A veces las excesivas responsabilidades juegan malas pasadas.
• Aunque la persona que la sufre es la principal responsable y es quien tiene que darse cuenta de los errores cometidos, realmente, también su entorno puede ayudar a que dicha crisis se agudice.
• Cuando nuestra vida en general aburre, cuando todos los domingos se hace lo mismo, deja de ser gratificante y comienza a ser aburrido en todos los sentidos.
LA SALIDA
Para quienes comienzan a sentir los síntomas de la crisis de los cuarenta, los especialistas aconsejan tomar una actitud más positiva de la vida y también más racional.
La visión catastrófica solo provoca sentirse peor y encontrar todo aburrido, además de pensar que la vida de cualquier otra persona es mucho más agradable que la de nosotros.
También recomiendan el diálogo constante con la pareja y el poder llegar a acuerdos para salir más a menudo y cambiar de vida: entre ambos se puede conseguir el equilibrio sin hacer daño el uno al otro.
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