Cocina escandinava, delicias en el frío polar

Cuando hablamos de comida escandinava debemos hacer una referencia respecto a qué países se consideran parte de ese territorio. Para muchas personas es lo mismo decir escandinavos o nórdicos; sin embargo, hoy haremos la aclaración: si hablamos de países escandinavos nos referimos sólo a Suecia y Noruega puesto que son los que pertenecen a la península que lleva su nombre.

Aquí también puede incluirse Dinamarca si hablamos en términos de la lengua escandinava. Ahora bien, si se incorpora a Finlandia debemos referirnos a países Finscandinavos y por último si incluimos a Groenlandia e Islandia estaremos hablando de países Nórdicos.

¿Qué comer en esas tierras?
Una vez hecha la aclaración geográfica podemos entonces hacer buenas recomendaciones. Si tus maletas tienen como destino estos países entonces prepárate para dos cosas: en primer lugar las bajas temperaturas y en segundo, para probar verdaderas delicias gastronómicas.

Partamos con Suecia, país que se ha desarrollado hasta llegar a ser uno de las naciones con una oferta culinaria más excitante. En verdad muchos afirman que nada sorprende tanto a los visitantes extranjeros como la variedad y alta calidad de la comida en los restaurantes suecos.  Sus chefs son aclamados internacionalmente por su espíritu innovador y han ganado importantes premios en las crecientes competiciones culinarias internacionales.

La columna vertebral de su gastronomía está en los ingredientes de primer nivel como el salmón, arenque y otros pescados y también carne de caza, setas y frutos del bosque.

Entre sus especialidades están las famosas “köttbullar“, albóndigas rellenas de carne, o los “kåldolmar” rollitos de col. Imperdibles son las huevas de alburno de Kalix, la increíble selección de quesos locales, los cangrejos de río, el arenque fermentado, las numerosas y diversas bayas, entre otras delicias.

En Noruega en tanto, el pescado es uno de los platos tradicionales, destacando el salmón ahumado. Se considera este producto como uno de los de mayor exportación y podría decirse que es una de las contribuciones de la gastronomía noruega a la cocina internacional. También destacan el bacalao, el arenque, productos de la sardina y la caballa. Uno de los más populares y extraños es el Lutefisk, comida hecha a base de pescado blanco seco y sosa cáustica.

Así, en prácticamente todos los restaurantes de ese país te servirán pescados y mariscos. Sin embargo, no son raros los platos de carne más ligera, como las salchichas, preparadas de diversas maneras o todo tipo de corderos.

Para acompañar será una buena elección el queso de cabra (llamado geitost y que se suele tomar con café al lado).  Finalmente, para el postre son usuales las frutas no exóticas como fresas típicas noruegas, las bayas y las zarzamoras.

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