Buscador
Ver revista digital
Estilo de Vida

Montañismo: el reto a sí mismo

29-12-2010, 2:04:00 PM Por:
Montañismo: el reto a sí mismo fifu

Te invitamos a realizar este magnífico deporte, pero con las precauciones necesarias para salir con éxito de este desafío.

Imponentes estructuras de tierra que cortan el horizonte. Las montañas representaban para los hombres de la antigüedad a dioses o demonios, en el peor de los casos, el hogar de éstos. Miedo que se fue perdiendo con los primeros montañistas que se atrevieron a escalarlas, e incluso, habitar en ellas.

Para la mayoría de las personas el montañismo es una disciplina .deportiva que consiste en explorar las montañas, además del conjunto de técnicas y conocimientos que permiten realizar este objetivo.

Sin embargo, para quienes se atreven a practicarlo con regularidad, es mucho más que eso. Se trata de un desafío que se debe afrontar con los límites del ser humano y los obstáculos que va poniendo la naturaleza para evitar su descubrimiento. Muchas veces los viajeros se enfrentan con sus propios miedos, una de las luchas más difíciles.

Para Jean-Jacques Rousseau, por ejemplo, los montañistas debían desarrollarse casi como domadores, y la montaña era aquel animal que con trabajo y constancia terminaría obedeciendo las órdenes de quien se transformaría en su amo.

Además, los peligros no están exentos durante estas empresas.

“La montaña nos exige un costo para subir a ella, y este costo no tiene que ver con dinero, sino con algo que nos enseña el valor humano: la voluntad, el aprendizaje, el coraje, el compañerismo, el esfuerzo, la motivación, la técnica, el conocimiento, la derrota, el triunfo, el amor”, decía el escritor.

Cuestiones técnicas, más allá de la filosofía

Para la adecuada práctica de la alta montaña lo que principalmente se requiere es resistencia. Ésta se define como la capacidad para sostener un esfuerzo eficazmente el mayor tiempo posible. Pero, ¿cómo obtenerla? Por medio de ejercicios aeróbicos.

La clave del montañismo está en el oxígeno: para realizar cualquier actividad el cuerpo requiere de energía, y para producir esta energía el cuerpo necesita oxígeno. Por lo tanto, mientras mayor oxígeno pueda introducir y aprovechar tu cuerpo, mayor será tu energía y resistencia.

Ahora bien, cuando se va en grupo lo mejor es avanzar unidos por medio de una cuerda (cordada), la que no debe estar integrada por más de tres personas. Con ello se obtiene más seguridad y mayor confianza para progresar durante el recorrido.

El paso del grupo debe ser fijado rápidamente y debe ser constante aún cuando sea muy lento, es responsabilidad de los elementos mejor entrenados y más rápidos adaptarse al paso de los más lentos de tal forma que el grupo no se disgregue.

Además de ganas, confianza, un plan de avance, un buen equipo y estado físico, el montañista requerirá también calzado, ropa adecuada, además de alimentos, agua y una navaja.

Un aspecto general del equipo es el peso, su utilidad así como su calidad. Un excursionista carga normalmente con su mochila y con ella todas sus cosas personales, así como algunas comunes al grupo.

Se debe buscar llevar equipo útil y práctico, de nada valdrá llevar algo ligero si no sirve o si no resiste el uso que le exigirás en el campo.

Tampoco debes cargarte mucho, pues no podrás mantener el ritmo de tu equipo y podrías hacer peligrar el recorrido.

Otro punto esencial son los alimentos. Éstos deben ser de preferencia aquellos que no necesiten preparación y que no sean de fácil descomposición; energéticos e hidratantes como semillas, frutos secos y frescos, galletas, jugos y, por supuesto, agua, como prevención pastillas o liquido depurador de agua.

Una vez que hayas repasado todos estos puntos, podrás enfrentarte a tus miedos y recorrer .paisajes que sólo algunos valientes hombres han podido surcar.

autor Equipo de jóvenes periodistas cuyo objetivo es explicar las noticias más relevantes de negocios, economía y finanzas. Nos apasiona contar historias y creemos en el periodismo ciudadano y de servicio.
Comentarios