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Management

¿Eres demasiado responsable? Ese es un problema y así puedes resolverlo

09-08-2022, 6:47:57 PM Por:

La responsabilidad es una de las cualidades esenciales que se busca en cualquier líder. Pero hay una diferencia entre ser responsable y sentir el peso del mundo en tus hombros.

Sin duda, la responsabilidad es una de las cualidades esenciales que se busca en cualquier líder. Pero hay una diferencia entre ser responsable y sentir el peso del mundo en tus hombros.

Para saber si eres una persona hiperactivamente responsable, responde las siguientes preguntas:

  • ¿Prestas atención a las necesidades de los demás, pero descuidas las tuyas?
  • ¿Le recuerdas a los demás con frecuencia lo que deben hacer y te molesta que parezcan irresponsables?
  • ¿Dices sí a la mayoría de las cosas que te piden?
  • Si algo sale mal, ¿sientes todo el peso de ese resultado?

Si respondiste que sí a algunas de estas cuestiones, es posible que tu excesivo sentido de responsabilidad sea un problema para tu desarrollo profesional y personal.

“Los líderes también pueden, sin darse cuenta, volverse excesivamente responsables y hacerse cargo de las tareas, las emociones, los errores y los problemas de los demás”, dice Dina Denham, coach ejecutivo, en un artículo publicado en Harvard Business Review.

Dina, quien ayuda a ejecutivos de grandes empresas como Netflix, Adobe y PwC, afirma que el líder y el equipo sufren por el exceso de responsabilidad. El primero puede sentirse constantemente abrumado y agotado, mientras que los miembros pueden sentirse sin libertad y desconfiar de sus propias habilidades.

Además, si el líder guarda rencores causados por ese exceso de responsabilidad asumida, el equipo puede absorber esas emociones negativas.

El sentimiento de responsabilidad excesiva puede venir desde la niñez y es difícil romper con ese patrón, pues nos hace sentir bien si cumplimos con todas las expectativas de los demás, así como las personas también fomentan esa conducta, pues aprenden a depender de otro para resolver los problemas.

Pero es posible aprender a equilibrar las responsabilidades, saber qué corresponde a uno, delegar a los demás y dejar ir lo que no nos toca hacer.

Dina Dunham comparte estas seis estrategias para detener la híper responsabilidad y alcanzar una vida más equilibrada.

1. Analizar tus creencias y miedos

La responsabilidad es una cualidad de la que puede enorgullecerse la gente y, a veces, ser excesivamente responsables les sirve a muchas personas y lo toman como parte de su personalidad.

No obstante, esa obsesión puede volverse un comportamiento improductivo. Por eso es importante preguntarse qué creencias o miedos refuerzan esa conducta. Es el primer paso para dejar que los demás realicen sus tareas, resuelvan problemas y admitan sus errores.

2. Devolver responsabilidades

No importa si voluntariamente asumiste responsabilidades o estas te fueron impuestas, puedes devolverlas a su legítimo propietario. Y puedes empezar poco a poco, delegando tareas sencillas a personas en específico. Comunica estas transferencias de tareas y aclara por qué las asignas.

3. Define qué realmente es tu responsabilidad

Si te cuesta determinar qué tanto del trabajo está bajo tu responsabilidad, puedes hacer este simple ejercicio: en una hoja de papel, dibuja un círculo y, como si fuera una gráfica de pay, asigna pedazos o porcentajes a todas las personas que están involucradas en un trabajo o tarea. Suma todas las cantidades y determina el porcentaje restante. Esa es tu parte de responsabilidad, y probablemente verás que es menor de lo que pensabas.

4. Acepta ayuda

Las personas demasiado responsables suelen decir “sí” cuando alguien les pide ayuda, pero rara vez pedirán o aceptarán ayuda para sí mismos. Por ello, si alguien se ofrece a liberar algo de tu carga, acéptalo con gusto. Si te preocupa agobiarlos, piensa que ellos también se sienten bien ayudando y tomando parte de la responsabilidad.

5. Sé empático, pero no asumas la angustia de los demás

Cuando una persona o compañero de trabajo comparte sus problemas o preocupaciones, las demás pueden involucrarse emocionalmente. Esto resulta un problema para los responsables hiperactivos, lo que aumenta su carga emocional personal, dañando su salud.

En vez de ser una esponja emocional, puedes hacer preguntas a la persona con el problema para comprender mejor su situación; así tendrás más información y a la vez tomas distancia emocional.

6. Sé autocompasivo

Cambiar nuestros hábitos y creencias es realmente difícil. Dina Denham indica que, en la búsqueda de una responsabilidad más equilibrada, las personas tendrán contratiempos, y eso es parte del proceso. Por eso es importante una dosis de autocompasión y paciencia. Lo importante es llegar a asumir el 100% de responsabilidad que te corresponda, pero no más.

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