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En México, los contenidos generados con IA no tendrán derechos de autor

17-01-2025, 8:48:07 AM Por:
En México, los contenidos generados con IA no tendrán derechos de autor
© Archivo

Una sentencia ya determinó en México que los resultados que genera la IA no tienen protección autoral, pues estos no son obras humanas originales.

Hay malas noticias para todos los que pensaban decirse autores de contenidos hechos con Inteligencia Artificial Generativa: En México una sentencia ya determinó que los diseños, escritos, imágenes, ilustraciones, audios y videos elaborados con esta tecnología no cuentan con derechos de autor, ni pueden registrarse para obtener la protección que otorgan las normas de la propiedad intelectual.

Tal y como ya ha ocurrido en países como Estados Unidos y España, por primera vez en nuestro país, la Sala Especializada en Propiedad Intelectual del Tribunal Federal de Justicia Administrativa (TFJA) emitió una sentencia con la que se niega el registro de un diseño, hecho con Inteligencia Artificial, ante el Instituto Nacional de Derechos de Autor (Indautor).

Al tratarse de productos que elabora un sistema computacional, y no de creaciones humanas originales, los resultados que se obtienen en las plataformas de Inteligencia Artificial Generativa (IAG) no poseen derechos de autor, ya que este término -autor- solo puede dársele a una persona física cuando esta crea una obra original con la que expresa su creatividad.

Por ende, al no contar con derechos autorales, pues no se trata de un autor, quien posea productos hechos con IAG -legalmente- no puede reclamar la exclusividad para su explotación económica.

Por ejemplo, este texto que estás leyendo tiene una autora, es una creación periodística original, cuya explotación económica posee ALTO NIVEL, si alguien copia este artículo se puede reclamar el plagio, e incluso demandar por daños y perjuicios.

En contraste, una persona que introduce una instrucción (prompt) en un programa de Inteligencia Artificial (IA), solicitando la elaboración de un texto, no es autor del resultado que obtenga, además de que este último no es una obra original, ni una creación, es un producto generado o elaborado por la plataforma que se esté usando.

Autoría en controversia

El caso que resolvió el Tribunal Federal de Justicia Administrativa versó sobre la demanda de una persona que, en 2024, intentó registrar como autor un diseño gráfico generado con la plataforma de Inteligencia Artificial Leonardo.

El Indautor le negó el registro porque, de acuerdo con los artículos 3 y 12 de la Ley Federal del Derecho de Autor, las obras que protege esa norma son solo aquellas de creación humana original, en tanto que autor “es la persona física que ha creado una obra” literaria o artística.

Inconforme con la respuesta, el particular demandó en el TFJA la resolución de esa autoridad, argumentando que las instrucciones que introdujo en el programa eran de su autoría, y sin ellas la plataforma no hubiera producido el diseño.

Cabe aclarar que el demandante no pedía el reconocimiento de la originalidad de su instrucción, sino el registro de un diseño que elaboró el programa mencionado.

La Sala Especializada en Propiedad Intelectual del Tribunal no le dio la razón, por lo que confirmó la negativa de registro, toda vez que el producto de lo que pretendía registrarse fue la IA. Ergo, solo las creaciones humanas son susceptibles de ser protegidas por el derecho de autor.

Este criterio es coincidente con el emitido en agosto de 2023 por una Corte del Distrito de Columbia en Estados Unidos, instancia que determinó que “una obra creada sin ninguna participación humana”, a través de la Inteligencia Artificial, no goza de derechos de autor, por lo que es correcto que las autoridades se nieguen a registrar productos generados con esta tecnología.

En ese caso, la Oficina de Derechos de Autor estadounidense ganó la demanda promovida en su contra por Stephen Thaler, un hombre que creó un sistema informático que él mismo denominó como la “Maquina de la Creatividad”.

Dicho artilugio había elaborado un producto gráfico que Thaler intentó registrar, mencionando “al sistema informático como autor, y explicando que esos derechos deberían transferírsele por ser el propietario de la maquina”. Sin embargo, el registro le fue negado y perdió la demanda.

Tanto en México como en Estados Unidos, y prácticamente en todo el mundo, la legislación en materia de propiedad intelectual solo protege las obras creadas por autores humanos.

Ética y derecho

Desde finales de 2022, con el auge de ChatGPT y otros programas de IAG, cientos de personas publican cotidianamente en sitios de internet escritos que presumen como de su autoría, cuando en realidad fueron generados con IA.

Si bien estos productos pueden ser comercializados, en términos jurídicos no es factible su registro ante el Indautor. Además, no es ético publicar un texto, una imagen o un diseño elaborado con IAG sin mencionar que se utilizó esta tecnología.

Así, las personas que venden libros electrónicos elaborados con Inteligencia Artificial, en los hechos pueden estar recibiendo ingresos al colocarlos en plataformas especializadas, pero si un tercero decide copiarlos y comercializarlos, el poseedor primigenio no puede decirse plagiado porque dicho producto no es una obra que tenga derechos de autor.

Al respecto, el TFJA apuntó en su sentencia que, “aunque la persona física es quien da los lineamientos e instrucciones” a la IA, lo que esta genera es un “producto de la ejecución de los algoritmos que emplea” el programa.

“Por lo tanto, conforme a la Ley Federal del Derecho de Autor no es procedente considerar que los resultados generados por la inteligencia artificial se consideren como creaciones intelectuales, o bien obras originales”.

Las implicaciones de este fallo son similares a las que se dieron con la sentencia de la Corte del Distrito de Columbia. Por ejemplo, los textos, imágenes o diseños obtenidos con IA, al no tener derechos de autor, no pueden ser firmados por la persona que le dio la instrucción al programa, por lo que publicar y comercializar el producto sin aclarar que se elaboró con IA es un fraude a la ley.

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autor Periodista y abogada, especialista en análisis jurídico y de derechos humanos. Ha sido reportera, conductora de radio y editora.

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