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¿Pueden salir del pacto federal los estados de la Alianza Federalista?

29-10-2020, 12:57:54 PM Por:
© Especial

Las 10 entidades que conforman este grupo no pretenden independizarse de la República, sino obtener un trato fiscal más equitativo del gobierno federal.

La “Alianza Federalista”, un grupo formado por los gobernadores de 10 estados del país, no pretende romper con la República mexicana, ni independizarse. Es decir, en su agenda no está salirse del “pacto federal”. Tampoco reclaman deudas presupuestarias, como ha señalado el presidente Andrés Manuel López Obrador, sino que piden un cambio en las fórmulas del “pacto fiscal”, para que se les devuelvan mayores recursos que esas mismas entidades ya generan.

El colectivo lo forman los titulares del Ejecutivo de los estados de Aguascalientes, Chihuahua, Coahuila, Colima, Durango, Guanajuato, Jalisco, Michoacán, Nuevo León, y Tamaulipas, todos electos democráticamente bajo la representación de partidos distintos a Morena, salvo el neolonés Jaime Rodríguez, quien llego al cargo con una candidatura independiente.

Pacto federal vs. Pacto fiscal

De acuerdo con los artículos 2 y 40 de la Constitución, la nación mexicana es única e indivisible, y está integrada por estados libres y soberanos en su régimen interior, que en conjunto forman la República, la cual es “representativa, democrática, laica y federal”. A esto se le denomina pacto federal. Ningún estado puede salirse de este pacto, pues eso significaría dejar de pertenecer a México, a través de una declaración de independencia.

En cambio, lo que plantea la Alianza Federalista es la posibilidad de abandonar el “pacto fiscal” que esas entidades mantienen con el gobierno federal, es decir, salirse del Sistema Nacional de Coordinación Fiscal, que es un instrumento jurídico a través del cual el gobierno federal distribuye los recursos del presupuesto, el cual se conforma por todos los impuestos que se pagan en el país.

Para ser más claros: El “pacto federal” es el término con el que se conoce al sistema de gobierno que rige en México, somos una República federal, integrada por estados, y no una República centralista, como por ejemplo lo es Chile. En contraste, el “pacto fiscal”, es el mecanismo con el que se distribuyen -en todo el país- los recursos del presupuesto.

En términos jurídicos, a este mecanismo se le denomina Sistema Nacional de Coordinación Fiscal, el cual sí pueden abandonar los estados, pues estos ingresaron a ese “pacto fiscal” a través de un convenio celebrado con la Secretaría de Hacienda, por ende, las entidades que así lo quieran tienen la facultad de cancelar dicho convenio.

Para ello no se necesita hacer ningún cambio a la Constitución, como lo planteó en esta semana el presidente López Obrador, quien de manera reiterada se ha negado a dialogar con los gobernadores de la Alianza Federalista, hasta este jueves, que aceptó una posible reunión condicionándola a que no haya “politiquería”.

La norma que regula a este sistema fiscal es la Ley de Coordinación Fiscal, que sirve para establecer, mediante fórmulas específicas, la participación que les corresponde a los estados de los ingresos federales. El término “participación” se utiliza para denominar el monto de los recursos que el gobierno federal les reparte a las entidades.

Esta ley está vigente desde diciembre de 1978, y desde entonces ha sido reformada en 38 ocasiones, es decir, se ha ido adecuando a las distintas necesidades que han presentado tanto los estados como el gobierno federal.

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Reparto de la riqueza

Las entidades que conforman la Alianza Federalista, que oficialmente se integró en mayo pasado, argumentan que, de cada 100 pesos que se generan en esos estados, el gobierno federal solo se les devuelve entre 12 y 30 pesos, lo demás se reparte en otras entidades del país, bajo el principio de subsidiaridad, o lo manejan directamente las secretarías dependientes del Ejecutivo federal.

Los gobernadores aliancistas agregan que, para 2021, el gobierno federal concentrará y manejará más recursos del presupuesto, disminuyendo así las participaciones que se les entregan a las entidades. “La discusión es por un presupuesto federalista o uno centralista. ¡La gente debe decidir!”, apuntaron en la cuenta de Twitter de la Alianza.

Agregan que “la fragmentación de #México nunca ha estado en la agenda de la #AlianzaFederalista”, sino que buscan “un federalismo funcional y respetuoso que devuelva a estados y municipios más recursos que ahora. Solo exigimos lo que por justicia nos corresponde”.

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Investidura presidencial

Esta semana, el presidente Andrés Manuel López Obrador había reiterado su negativa a dialogar con los gobernadores de la Alianza Federalista, de hecho, apuntó, erróneamente, que sus peticiones eran imposibles, debido a que para ello debía reformarse la Constitución.

Además, bajo el argumento de que no podía reunirse con ellos, pues debía cuidar “la investidura presidencial”, el mandatario agregó que los Ejecutivos de esos estados debían preguntar a los habitantes que gobiernan si estaban de acuerdo en la postura de confrontación que mantienen con el gobierno federal.

Los gobernadores de Jalisco, Enrique Alfaro; de Nuevo León, Jaime Rodríguez; y Diego Sinhué Rodríguez, de Guanajuato, entre otros, le tomaron la palabra al presidente e hicieron la pregunta de manera informal en Twitter, y en un evento presencial, en el caso del jalisciense Alfaro. La mayoría de las respuestas (casi 90% en Twitter) apoyan la exigencia de que el gobierno federal reformule el monto de lo que se les devuelve a esas entidades.

Así, este jueves, Andrés Manuel López Obrador aceptó dialogar con los aliancistas, siempre y cuando el encuentro no sea utilizado políticamente, aseveró.

“Sí, claro que dialogamos, siempre y cuando no haya politiquería, porque imagínense que se utilice la investidura presidencial con propósitos partidistas, tenemos que ser respetuosos de la investidura presidencial, no es un asunto personal es un asunto que tiene que ver con la institucionalidad”, apuntó el titular del Ejecutivo federal.

Tras estas declaraciones, en la cuenta de Twitter de la Alianza Federalista le dieron la bienvenida al diálogo expresado por el presidente. “Es momento de que construyamos juntos un #México y un presupuesto más justo. Sin lugar a dudas, con diálogo y voluntad política, lo lograremos. ¿Cuándo nos recibe?”.

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Controversias jurídicas

La posibilidad de que, por fin, el presidente se reúna con los 10 gobernadores del este colectivo es un primer paso para que estos propongan cambios a la Ley de Coordinación Fiscal, lo cual depende de la voluntad política que muestre López Obrador, de lo contrario, la amenaza de que esas entidades abandonen el “pacto fiscal” sigue latente.

Si no se llegara a concretar ningún cambio en las participaciones que reciben los estados de la Alianza Federalista, estos pueden cancelar el convenio de coordinación fiscal que tienen con la Secretaría de Hacienda, lo que -de inmediato- generaría diversas consecuencias jurídicas, empezando porque el gobierno federal los demandaría ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación, a través de una controversia constitucional.

autor Periodista y abogada, especialista en análisis jurídico y de derechos humanos. Ha sido reportera, conductora de radio y editora.
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