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Eje Eurasiático, la nueva ruta de la seda

23-06-2015, 10:23:50 PM Por:
Eje Eurasiático, la nueva ruta de la seda fifu

El transporte de productos entre China y Europa podrá incrementarse con una nueva y moderna ruta comercial. México deberá buscar cómo conectarse a ella.

En el nuevo siglo, México será impactado por el desarrollo internacional de la logística intermodal. Para acceder y atacar los mercados futuros, tendrá que reconvertir su economía y comercio exterior, reorientándolos hacia otras regiones, en particular Asia y el sudeste asiático, primer mercado real y potencial de transporte en el mundo.

El principal nodo mercantil mundial será el impresionante Eje Eurasiático, que se convertirá en el epicentro del comercio planetario, abarcará a más de 50% de la población mundial y tendrá un valor superior a los 50,000 millones de dólares (mdd).

Dicha superplataforma logística está siendo desarrollada por China, Rusia y Alemania, con el hub global Shanghái (China) en un extremo, y el sistema  portuario Hamburgo/Bremerhaven (Alemania), en el otro. Es una oportunidad única para enlazar y reposicionar a México con el globo.

El comercio exterior del país está hasta hoy concentrado hacia Estados Unidos y sus expectativas de integración dinámica a otros mercados son mínimas.

Miles de kilómetros

Entre 1950 y 1988, la población mundial se duplicó, el producto mundial bruto se cuadruplicó y la carga marítima aumentó siete veces su tamaño. La flota mercante quintuplicó su tonelaje. La movilidad ha borrado fronteras nacionales, alterado filosofías, ideologías y estilos de vida. El transporte marítimo moviliza 91% del comercio global.

Entre 1990 y 2000, las exportaciones crecieron anualmente 7%. Todo ello es producto de la globalización del capital, la reconversión industrial, así como la apertura de países que no participaban en la economía global. Lo anterior obligó al planeta a reorganizar sus líneas de producción y el transporte.

El uso de contenedores, terminales portuarias modernas y equipos especializados; el concepto de land bridge o puente terrestre, puertos secos o ferropuertos y el riguroso control en tiempo de los flujos de carga, se hicieron posibles gracias al avance en la electrónica y telecomunicaciones. Estas condiciones han vuelto eficiente al tráfico intermodal.

No es casual la cesión estadounidense a presiones chinas y rusas en Europa y América Latina. Alemania, China y Rusia lideran la partida mercantil global, a través de la creación de sistemas logísticos.

El Eje Eurasiático conformará la red de transporte integrado más impresionante de la historia. El proyecto logístico impulsado por China, Rusia y Alemania partiría del hub global Shanghái, líder mundial en movimiento de contenedores, con 35 millones de TEU (twenty-foot equivalent unit / unidad equivalente a 20 pies) al año, con dos rutas:

•a) Terrestre: del puerto citado, cruzando el territorio chino y ruso, así como parte de Europa oriental, para desembocar en el corazón del Báltico y Mar del Norte, mediante el sistema portuario Hamburgo-Bremerhaven.

•b) Marítima: a partir de Shanghái, se avanza por la costa china y la península de Indochina, cruzando el estrecho de Malaca, para dirigirse al Océano Índico hasta el Mar Rojo y cruzar por el canal de Suez para acceder al Mediterráneo. Sigue en tierra por Europa central y cerraría en Alemania.

Cada ruta será intermodal, integrando sistemas ferroviarios, carreteros, marítimos y aéreos con plataformas terrestres que conecten las regiones más aisladas del descomunal perímetro que concentra la obra. Se trata de la reconformación mercantil de Asia y Europa por medio de cadenas intermodales. 

Lo anterior implica la recolección, consolidación y traslado de productos, servicios y personas, justo a tiempo, al menor costo y con la calidad y eficiencia requeridas. A ello se suma el despliegue de tecnología avanzada y el uso intensivo de capital.

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