Desacuerdo en Washington paraliza a Wall Street
Los avances percibidos en los últimos meses en el mercado laboral y el desempeño económico favorable hoy están amenazados por la parálisis del Gobierno.
Wall Street abre
sus puertas bajo la prolongada sombra del desacuerdo
político en Washington que obligó a. cerrar
parcialmente el gobierno estadounidense por primera vez en 17 años,
amenazando tanto el desempeño económico en el cuarto trimestre, como los
avances percibidos durante los últimos meses en el mercado laboral.
Con la temporada de resultados pisando los talones, que dará
inicio este martes con la publicación de las cuentas del fabricante de aluminio Alcoa y las de los bancos JP Morgan Chase y Wells
Fargo previstas para el viernes.
El evento macroeconómico que mantendrá expectante al mercado
es la publicación de las Actas de la
reunión de la Reserva Federal de
mediados de septiembre. Antes del encuentro, se daba por hecho que la Fed
iniciaría la retirada paulatina de los estímulos monetarios reduciendo el monto
de las compras mensuales de deuda. Sin embargo, .el
organismo monetario sorprendió al mundo de nuevo al mantener, sin cambios y
contra todo pronóstico, la política de relajación monetaria imperante desde
2008.
Otro factor del cuadro macro son las ventas minoristas, que
si logran aumentar un 0.3% -como anticipan los analistas- consumarán 6 meses
consecutivos de mejora de la demanda en el gasto de consumo, desde la compra de
automóviles a aparatos electrónicos.
Balanca comercial, petróleo y crédito
Para alejar el fantasma
de la deflación que ha acosado a los mercados desde marzo de este año,
estará el índice de precios de importación y el de precios al productor. El
encarecimiento del petróleo en pleno apogeo de la crisis entre Siria y EU (en septiembre) garantizará
un incremento del 0.3% en los precios de los productos importados; en tanto
mayores costos de la energía presionarán al alza los precios al productor, que
podrían aumentar un 0.2%. A excepción de los volátiles costos de energía y
alimentos, los precios pagados por los
productores en EU subieron nueve meses consecutivos hasta agosto pasado.
Un dato que la Reserva Federal seguirá con interés es el de
la balanza comercial de bienes y servicios por su potencial para medir el
estado del comercio internacional, así como de la demanda interna de productos
importados. En ese sentido, el consenso del mercado anticipa que el déficit comercial se mantendrá en
septiembre en 39,000 millones de dólares, apenas sin cambios respecto a julio,
cuando se amplió un 13% a consecuencia de la escalada del crudo. En junio, el
déficit comercial se situaba en su nivel más bajo en cuatro años en 34,500
millones de dólares.
Por último, el crédito
al consumo tal vez siga mostrando la tendencia alcista que ha mantenido
durante gran parte del año, con un crecimiento del 13% hasta 12,000 millones de
dólares, apoyado en el aumento de los préstamos no renovables que incluyen
desde la financiación para la compra de un automóvil hasta el pago de cuotas educativas.
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