Honda y Toyota suspenden temporalmente producción en México por problemas en la cadena de suministro
Ambas empresas frenarán la producción de forma temporal debido a falta de insumos derivado del Covid-19, el clima invernal y la carencia de microchips.
La automotriz Honda suspenderá su producción en México a partir del jueves por problemas en la cadena de suministro, expresó un portavoz de la empresa el miércoles, y añadió que no se puede “especular” sobre su duración mientras trabajan con los proveedores en una solución.
La fabricante japonesa anunció en la víspera que las fallas en la proveeduría la obligarán a detener la producción en la mayoría de sus plantas de automóviles en Canadá y Estados Unidos a partir del lunes, sin dar detalles.
Honda, que tiene dos armadoras automotrices en México, señaló que todas sus plantas en Norteamérica se verán afectadas y están ajustando la producción para “administrar cuidadosamente” el suministro disponible de piezas y poder atender a los clientes.
“Continuamos gestionando una serie de cuestiones de la cadena de suministro relacionadas con el impacto de Covid-19, la escasez de microchips y el severo clima invernal de las últimas semanas”
dijo a Reuters un portavoz de la compañía.
Solamente en el segundo mes del año el ensamblaje de vehículos ligeros se desplomó casi un 29 por ciento del territorio mexicano y los envíos al exterior cayeron cerca de un 22 por ciento, de acuerdo con datos oficiales.
Toyota Motor también anunció el miércoles que recortará parte de la operación de esta semana en algunas de sus fábricas de Kentucky, Viriginia Occidental y México, haciendo énfasis en el problema de las cadenas de suministro, en relación a “una escasez de productos petroquímicos que afectará la producción”.
Honda Motor dijo a última hora del martes que los problemas en la cadena de suministros obligarán a detener la producción en la mayoría de las plantas de automóviles de Estados Unidos y Canadá durante una semana a partir del lunes.
La carencia de semiconductores que empezó a nivel global a fines del 2020, golpeó la producción y exportación de automóviles en México en lo que va del presente año y en febrero se sumaron los apagones y desabasto en la distribución de gas derivados de una ola gélida en Texas, Estados Unidos.
