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Empresas

Estas son las grandes quiebras que dejó 2020 y el COVID-19

02-12-2020, 6:10:00 AM Por:
© Reuters

La quiebra no significa necesariamente la desaparición de una empresa, aunque sí el cese de actividades o una operación restringida y tienen riesgos financieros.

Junto con diciembre, llegó el momento de los balances y prácticamente todo está marcado por la pandemia del Covid-19. Sin embargo, mucho de lo que pasó este año, por no decir todo, tendrá repercusión en el futuro, algunos analistas consideran que lo peor todavía no ha pasado, especialmente en el terreno económico.

Quizás sea cierto, muchas empresas globales cerraron sus puertas definitivamente este año, o tuvieron que acogerse a esquemas de protección por quiebra para continuar sus operaciones. En varios casos incluso se registró el cierre de compañías centenarias, que luego de más de un siglo de operar desaparecerán para siempre, este es el balance del impacto del Covid-19 en el mundo empresarial.

Las grandes quiebras globales

El impacto del Covid-19 llegó en un mal momento para el mundo. Justo al inicio del año una de las grandes preocupaciones en la mayoría de las economías era la falta de crecimiento suficiente, casi todos los países estaban en la llamada “trampa del crecimiento” que se refería a una tasa del PIB modesta respecto a las necesidades en cada nación, eso incluía por supuesto a las economías emergentes.

Con un crecimiento insuficiente que genera estragos e impedía el adecuado desempeño de muchos corporativos y sectores productivos, el Covid-19 terminó por provocar el colapso de grandes consorcios.

Es importante antes de mencionarlos, que la quiebra no significa necesariamente su desaparición, aunque sí la operación restringida, pérdida de mercado y desde luego mayores riesgos financieros que mantienen los riesgos en la mayoría de estas empresas. Aquí una lista de algunos de los colapsos empresariales más notorios que nos deja este 2020, más los que se acumulen el año siguiente ya que esa es justa una de las expectativas.

También es importante señalar que si bien, en la mayoría de los casos estas quiebras globales no forman parte del ecosistema empresarial mexicano, siempre serán reflejo de lo que sucede en otras latitudes y con un mercado globalizado tarde o temprano tiene repercusiones en nuestra nación.

Cirque Du Soleil

La empresa de origen canadiense no pudo soportar el colapso total de sus operaciones en sus más de 140 destinos globales en los que se presentaría a lo largo de 2020.

La cancelación masiva de sus eventos, debido al confinamiento global, provocó el despido de 3 mil 480 trabajadores y la posibilidad de que el cierre de las operaciones sea definitivo debido a que el sector del entretenimiento es el más afectado y el que se calcula que tardará más en volver a la normalidad, al formar parte de eventos masivos a los que una buena parte de los gobiernos del mundo no autorizan todavía a plenitud y la mayoría de los ciudadanos en el mundo tampoco están dispuestos a regresar.

Sin embargo, también existe un plan de rescate que dependerá de la evolución de la economía global, no sólo la de Canadá. Los principales accionistas de Cirque du Soleil: la estadounidense TPG Capital, la china Fosun Capital Group y el fondo canadiense Caisse de Dépôt et placement du Québec, quienes en 2015 adquirieron la mayoría accionaria de la empresa, con una inversión de 1,500 millones de dólares, presentaron a las autoridades canadienses un plan de reestructuración, que todavía se litiga en los tribunales.

Lord & Taylor

Quizás para la mayoría de los mexicanos esta compañía sea desconocida, pero en Estados Unidos Lord & Taylor es una empresa de gran tradición, es nada más y nada menos que la tienda departamental más antigua del país.

En agosto pasado se acogió al capítulo 11 de la ley de bancarrota y cerró todas sus tiendas, dentro y fuera de Estados Unidos, para enfocar sus ventas de liquidación exclusivamente en línea, no tenía muchas tiendas comparado con otras empresas del sector, pero no dejaba de ser un ícono. Se acaba una historia de 194 años, la pandemia no respetó la trayectoria de esta empresa que a mediados del siglo pasado vio sus años luminosos. A casi dos siglos de haberse fundado, todo indica que pasará a la historia.

Hertz

Con operaciones en más de 150 naciones, esta empresa fue una de las más golpeadas por la pandemia ante la paralización global de la actividad turística, su quiebra era casi inminente porque antes de la pandemia se hablaba de ciertos problemas en su estructura financiera.

La empresa despidió a cerca de 10 mil empleados sólo en Estados Unidos y reconoció una deuda de 18 mil millones de dólares también en su corporativo estadounidense.

Virgin Atlantic

Las aerolíneas no pudieron evitar el impacto económico provocado por la pandemia; de hecho, la mayoría de las compañías identificadas como “banderas” por representar en cierto modo al país en el que se fundaron, recibieron apoyo de sus gobiernos, pero otras no tuvieron la misma suerte y debieron cerrar operaciones para reestructurarse o desaparecer.

Virgin Atlantic fue una de ellas, en agosto pasado se acogió a la ley de bancarrota de Inglaterra, su filial australiana hizo lo propio en ese país tras reconocer la necesidad de cuando menos 900 millones de dólares para sanear sus finanzas y mantener sus operaciones.

Aeroméxico

Esta empresa sí interesa directamente a los mexicanos, la aerolínea de bandera nacional se acogió a principios de julio al capítulo 11 de la Ley de Bancarrotas en Estados Unidos. Sin embargo, la empresa mantiene sus operaciones, aunque es un hecho que lo hará bajo condiciones de restricción en los vuelos que haga. Además, una de las preocupaciones centrales en el mundo empresarial es a falta de estímulos para esta empresa por parte del gobierno mexicano. Por el momento. la ley de quiebras estadounidenses le proporciona oxígeno financiero, pero llegará un momento en el que deberá enfrentar sus compromisos de alguna manera y todo indica que la falta de liquidez sería un gran problema en el futuro inmediato.

Lee: Aeroméxico pide autorización para despedir a 1,830 trabajadores

LATAM

Otra aerolínea en problema, como todas, la empresa concentra sus operaciones en 26 destinos en el mundo y espera una capitalización cercana a los 1,000 millones de dólares antes de que tenga que bajar las cortinas definitivamente, el cómo y cuándo es una incógnita y es parte de la incertidumbre que rodea a esta empresa, y al sector en general.

NPC International

El nombre de la empresa no nos dice mucho o nada, es más conocida por las marcas de comida como Pizza Hut y Wendy´s; los problemas de endeudamiento de la empresa se agravaron durante la pandemia ante la caída del consumo de comida en establecimientos y la lentitud que tuvo para adaptarse a las nuevas condiciones. En julio pasado la empresa se declaró en bancarrota y empezó a cerrar sucursales alrededor del mundo.

Debenhams

Esta empresa es más bien un ícono europeo, pero su quiebra y eventual desaparición tiene particularidades que nos muestran la virulencia de la crisis y su impacto en el mundo, no respeta nada, ni siquiera una historia de más de dos siglos, sí, leyó usted bien.

Estos almacenes británicos anunciaron apenas hace unas horas el fin de sus operaciones, sus problemas eran añejos, tanto que desde hacía meses estaba en pláticas con otras empresas para vender el negocio, de lo que el público en general estaba enterado. Pero la pandemia paralizó cualquier negociación y con ello se condenó a la empresa. Se calcula que serán alrededor de 13 mil puestos de trabajo los que se perderán por el cierre de 125 tiendas.

Existe una ligera esperanza, ya que sus administradores dijeron que la empresa mantendrá las operaciones de sus tiendas por algún tiempo (indefinido), para liquidar sus inventarios y las ventas en línea registradas en los meses previos. Si en ese tiempo surge un interesado la empresa dijo estar en plena disposición para negociar, de lo contrario, se habrá terminado una historia nada más y nada menos que de 242 años. Analistas de Bloomberg ubicados en el Reino Unido señalaron que de concretarse la quiebra de la compañía será un golpe devastador para el mundo corporativo del Reino Unido y de Europa en general.

JC Penney

La cadena de tiendas de ropa, artículos para el hogar y joyería, no pudo más y solicitó en junio pasado la cobertura de la justicia estadounidense para iniciar un proceso de quiebra que le permita recuperar en algún momento la rentabilidad. La compañía arrastraba entonces una pesada losa de deuda de hasta 4 mil millones de dólares y enfrentaba el cierre de la mayoría de sus operaciones debido al confinamiento global. En una de sus primeras acciones cerró 155 tiendas en Estado Unidos, pero se espera que siga en dicha tarea hasta alcanzar al menos 200 unidades más. Del futuro de la empresa dependerá que la economía de su país sede, Estados Unidos, resurja lo más pronto posible, de lo contrario, el nombre de esta empresa será historia.

JC Crew

Otra cadena de ropa que colapsó, se distinguió porque sus diseños eran muy demandados por gente vinculada al espectáculo y la política, entre ellas la ex primera dama Michelle Obama. La deuda de 1,600 millones de dólares es insostenible para la empresa, aunque espera regresar con formatos físicos una vez que se recupere, por el momento y a la espera de salir de la quiebra busca posicionarse en el mercado de venta en línea.

Muchas empresas más se han visto en problemas estos meses, por no decir que la inmensa mayoría debido al desplome de los ingresos. Otras más han quebrado.

Una de las principales recomendaciones de organismos como el Fondo Monetario Internacional (FMI) así como el Banco Mundial (BM), han recomendado a los gobiernos del mundo apoyar a sus empresas para evitar en la medida de lo posible quiebras que se reflejen en más desempleo. De hecho, apenas la semana pasada el propio FMI advirtió a los gobiernos del mundo sobre los riesgos de retirar los estímulos económicos y con ello provocar el colapso de muchas compañías.

La situación económica en el mundo empresarial es uno de los aspectos en los que más atención deben prestar los gobiernos del mundo para asegurar la recuperación sólida cuando esta llegue, opina un gran porcentaje del sector de analistas que siguen el desempeño de la economía mundial.

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